Presagio

Capitulo 22 Sentimientos encontrados

Vaya!! Hessen si que tiene el don, pues Googlee lo de los colores y estuvo mal, pero nuevamente ese no era el punto.
Nunca me he dejado llevar por las primeras impresiones, o eso creo. Pero es su egoísta desdén por denigrar a los demás y su absoluto egocentrismo lo que me hace odiar a Rumanov, además de cuentas personales, como el separarme de lo que más amo y hacerme desdichada cada vez que puede.
Con un gran suspiro me tiró en la cama y viene a mi memoria los momentos que pase con mi familia en el distrito y luego el rostro de Liam, Liam su nombre lo menciono con un gran suspiro, son tan diferentes él y Rumanov, por un lado tenemos al gladiador y por otro al tirano, el jocoso y el huraño, el amigo y el enemigo hasta físicamente son lo contrario. Liam, es bronceado, de cabello castaño y ojos cafés claros, un tono miel, mientras  que Rumanov tiene cabello castaño bastante oscuro, una tez morena bastante clara lo que permite apreciar aún mas esos brillantes ojos azules, tan dominantes cuando te miran, que ocultan algo cuando no lo hacen.

Flashback
Voy saliendo para buscar a la pequeña Evelyn, pero antes de gritar para llamarla, la encuentro con la mirada, en un columpio llorando, me detengo un segundo para retirar mi rostro de angustia e ir a ver que le sucede, pero en lugar de eso veo a Rumanov acercarse a ella, noto que le dice algo, abraza a la pequeña y le seca las lagrimas con su pañuelo, no lo podía creer, estaba inmóvil, jamás podía haber imaginado una escena en donde Rumanov mostrará sentimientos y ahora lo vivo en la realidad, estoy sumamente sorprendida.
El tonto de Hessen me susurra en el oído "prejuicios" pero claro, estaba tan sujeta en mi papel como espectador, que me sobresalté de tal manera que incluso hasta salté, él me guiñó el ojo y les gritó a su primo y a Evelyn para que entraran, los dos llegaron tomados de las manos y la niña aún tenía un rostro serio pero ya no lloraba.
- querida princesa, te estábamos esperando - dijo Hessen en tono dulce y paternal.
- Lo siento- dijo Evelyn con un tono bajo y melancólico. Hessen se arrodilló para estar a la altura de la pequeña y le dijo
- No te preocupes mi amor, vamos a jugar para que no estés así, pero cuéntame por qué esa cara larga??!! EHHH !?? - Hessen la alzó, la colocó en sus hombros y entraron. Luego vi como Rumanov los seguía con la mirada, después me miró directamente a los ojos y yo no divise su mirada, los dos clavamos los ojos como siempre lo habíamos hecho, con seguridad, sin miedo, sin vergüenza por nuestra mirada, pero ahora era diferente pues no había furia, ni enojo, solo ese encuentro donde tratábamos de averiguar los pensamientos del otro, fueron pequeños segundos donde descubrí que Rumanov tenía algo guardado muy dentro de él y me hizo verlo más humano.
Luego él alejó su mirada y se fue.

Tal vez si me precipité en odiar tanto a Rumanov, y antepuse mi situación en la que me colocó para juzgarlo, después de todo Liam y Rumanov si tienen aspectos similares los dos son altos, bueno cualquiera con mi altura diría que toda la gente es alta, pero los dos oscilan entre el metro con ochenta, tienen un cuerpo musculoso, cejas y pestañas bastante pobladas con unos ojos bastante sinceros y profundos, aunque es extraño porque son personalidades distintas pero ambos tienen esa chispa en los ojos que los hacen ver honestos, con sentimientos profundos y sumamente atractivos.
No puedo creerlo, por qué los estoy analizando y aún peor por qué los comparo, yo a Liam lo quiero, pero a Rumanov ... simplemente lo ... Es decir me disgusta.

Tomó una almohada y la apretó contra mi cara, no puedo creer lo que estoy pensando, así que mejor me acomodo para dormir y dejar descansar a mis pensamientos