Capitulo 2 El crepúsculo de los cambios

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Mire el cielo, y observe el magnífico crepúsculo que me envolvía, la brisa alborotaba mi cabello y hacía que su tono castaño; se convirtiera en rojizo debido a ese último rayo de sol que me alumbraba a la cara, había una gran paz, podía escuchar las olas moviéndose en sinfonía olas en adagio que al chocar en esas inmensas rocas hacían un crescendo espectacular, podía oler el glorioso paisaje era un olor a sales marinas. De pronto, recordé que había quedado de no llegar tan tarde a casa, así que tome un gran respiro, cerré mis ojos, me acerque a la punta de aquel acantilado, y con una sonrisa en el rostro me avente...

Ese clavado me había salido mucho mejor que el anterior, di giros perfectos y al caer no salpique mucha agua ,adoraba estar en ese lugar, era mi rincón secreto desde qué tengo memoria, y aún lo sigue siendo, salí del agua, tome una toalla me seque el rostro y mi cuerpo cuidadosamente; mi cabello chorreaba gotas a gran velocidad mientras caminaba; así que decidí enrollármelo y de cierta forma exprimirlo, posteriormente lo solté, agarre la toalla que traía en mi mochila, giré mi cabello al lado derecho y comencé a frotarlo con la toalla de modo que me quitara el resto de agua salda que aún quedaba en el, continúe viendo el glorioso paisaje una vez más, era tan hermoso, este momento del día en particular me encantaba nos muestra a la humanidad el hecho de que la eternidad no puede ser concedida por nada y nadie, ya que ni el inmenso y fuerte sol la tiene, paso un minuto y me di la vuelta, tenía que volver a casa; agarre mi mochila la coloque en mi espalda, me puse un short y mi blusa azul que tanto me gustaba, me encantaba porque gozaba de su comodidad y sobre todo de su color, ese color me encantaba, me hacía recordar al mar., camine hasta hallar mi bicicleta, la agarre del manubrio y me subí en ella, iba a una velocidad media, algunos autos pasaban por el camino, estaba tranquila, cuando..., recordé que le había dicho a mi mejor amigo, que iría con él a ver la película que tanto había esperado, y de pronto vino a mí lo que me había dicho al final de nuestra conversación telefónica '' no olvides que en nuestro distrito sólo hay un cine, no llegues tarde'' "pero tiene ¡40 salas¡, Liam... además no te preocupes llegare a tiempo"

- RAYOS- dije, mientras aceleraba mi velocidad, sabía que no le podía hacer esto a mi mejor amigo, y después vino a mi memoria, el momento en que conocí a Liam, si, como olvidarlo me dije a mi misma con una pequeña sonrisa.

FLASHBACK

Las personas en nuestro distrito tienen una costumbre, ellos hacen una pequeña kermés, el 14 de febrero; y así cuando la luna está en su plenitud y a un ángulo determinado las participantes deben arreglarse y estar presentables, y los participantes deben agarrar una flor, la más adecuada que ellos encuentren, algunos hacen trampa y ya la traen lista en su mano, el objetivo es que todos los participantes deben girar en círculos al compas de la música, los faros y las luces alumbran a estos deforma que sea mejor la vista, la flor escogida por los caballeros debe ser entregada a la dama que llame su atención y ella decidirá sí quiere aceptarla o no, yo siempre me quedaba a observar a las personas, me encantaba ver las reacciones de los participantes, es por eso que en aquel 14 de febrero, estaba Liam con una rosa roja, caminando., yo estaba sentada viendo a mis atolondradas y coquetas hermanas menores, también observaba a mi querida hermana mayor Ayla, sin duda alguna, ella era las más bella del lugar; siempre en el jardín de infantes ganaba el concurso "la reina de la primavera", ella es alta, delgada, cabello rubio con finos rizos en las puntas, ojos azules ( iguales a los de papá), pestañas extremadamente largas, que le llegan al borde de sus cejas, su rostro fino, con unos simpáticos hoyuelos descubiertos cuando sonríe, un nariz respingada y su tés blanca, con toda esta belleza física, cualquiera pensaría que mi hermana sería de lo más arrogante y egoísta, sin embargo era cálida, optimista, humilde, inteligente y a veces tímida, me apene de ella ya que mi madre la había forzado a participar en el baile, todos la miraban pero la conocían bien y sabían que no iban a lograr nada con ella más que una sonrisa, pero casi todas las chicas tenían sus ojos puestos en el bien parecido chico nuevo, tenía su cabello castaño claro y ondulado, ojos miel, nariz respingada, alto y algo musculoso, yo no veía más que eso, no era para tanto, pero casi todas hacían un gran alboroto de risas y chismorreos por él, no lo vi más que ese momento durante ese baile, al finalizar , note que Ayla tenía por lo menos 12 flores, las había recibido por cortesía, le dedique una sonrisa, y luego vi su cara de sorpresa, de mismo modo vi los rostros de las otras chicas, no sabía cuál era el propósito, y fue cuando escuche que alguien se aclaraba la garganta, y luego una voz masculina diciéndome...

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