Osea... No

11. Paz y Azúcar

Hoy es jueves... tortuoso jueves

La última vez que vi a Ezequiel era martes...

Si empezamos a contar desde el miércoles...

Recién voy por el día dos..

Tome mi cuaderno borrador y leí lo que había escrito el día anterior

Día uno

Sin cambio alguno de emoción, todo sigue igual, mis pronósticos son que probablemente en tres días caiga en depresión..

Justo debajo de eso anote:

Día dos

Repentino cambio de emociones.

Síntomas:

· Melancolía

· Pena

· Ganas de comer helado

He estado pensando en dejar mi orgullo de lado...

Definitivamente me voy a volver loca.

Lo cerré y mire atentamente cada anotación que había en las tapas del mismo. Tome mi lapicera color rojo y escribí con una letra muy prolija

Los monstruos también se enamoran...

No sé por qué escribí eso...

Seguro que dentro de mi retorcida mente tiene sentido... si eso debe ser... seguro mi conciencia está detrás de esto... perfecto, ahora hasta mi conciencia quiere deprimirme...

Guarde el cuaderno junto con mis demás cosas, tome mi taza y Salí de la habitación, ya era hora de prepararnos para el colegio...

Junto con Gema, la noche anterior recibimos millones de mensajes de la mafia, literal, al parecer Pietro había activado la alarma anti desconocidos que tiene incorporada nuestro sistema, provocando que todo mafioso a la redonda estuviera alerta y con los pelos de punta...

Logramos investigar mucho de Pietro la noche anterior, sabe hablar a la perfección español, tiene un coeficiente intelectual altísimo y un pequeño gran detalle... su apellido es Di Benedicto, eso quiere decir que es familiar directo de un Di Benedicto, los mafiosos a los cuales más admiro...

Ahora que lo pienso bien... no deberíamos haberlo golpeado tanto si era un Di Benedicto... creo que si se nos fue un poco la mano...

Junto con Gema y Pietro, luego de almorzar, tomamos nuestras respectivas mochilas y nos encaminamos hacia la escuela, habíamos decidido ir caminando, para que Pietro conozca un poco la ciudad.

-Pietro con respecto a lo de ayer...-dije tímidamente-no sabíamos que eras quien eras...

-por favor no nos mates!-dijo mi hermana con sus manos juntas

-no se preocupen señoritas Evans-dijo- se que no debí haber leído sus cosas sin su permiso, entiendo que lo único que querían era resguardar su gran base de datos, y no Gema, no las voy a matar, el negocio del crimen organizado no es lo mío, es lo de mi familia, mi interés es mas por la ciencia y la investigación, decidí abrir sus datos, porque estoy haciendo un trabajo de información con respecto a cómo funciona la mafia aquí, y como afecta esto en las personas del hoy por hoy, un tema interesante para mi, ya que vivo rodeado de mafiosos...

-entiendo-dije

-espero que no tengan problema en que las ayude en sus asuntos para recolectar todo los datos que necesito para mi trabajo-dijo Pietro