¡Tú, Perra Asquerosa!

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Lyn.

-- ¡Levantensen!-- grita mi madre del pasillo-- ¡Ya es hora de despertarse para el instituto holgazanas!-- nos grita por segunda vez a mi y a mi queridísima hermana.

Me levanto sin quejidos, me coloco las pantuflas que se encuentran debajo de mi pequeña pero confortable cama. Tomo una almohada que se encuentra sobre el suelo y se la lanzo a Roxy.

Me rió de dicha broma que le he jugado, odia que la levante temprano. Es toda una perezosa, suspiro para mis adentros.

-Ughh, Ly-Lyn... Dejame dormir-- murmura mientras se tapa con la almohada que le he lanzado minutos antes.

-- Levántate-- le ordeno-- mamá se va a enojar conmigo por ser la mayor y no levantarte en tiempo y forma --le grito, mientras la sacudo sin piedad.

Refunfuñando se despereza y acto seguido se levanta y maldice a lo bajo.

Ella, lamentablemente es así, a veces pienso ¿Será mi hermana? Se pasa con los insultos y sus ganas de no hacer nada productivo me agota. Sinceramente no sé a quién salió tan arrastrada.

-- Deja de pensar perra-- me interrumpe de mis pensamientos-- ayudame a buscar mis libros-- dice elevando la voz.

Rodeo los ojos.

-- Yo no tengo la culpa de que seas tan desordenada. ¡Mira!-- señalo-- tu ropa interior,
I-N-T-E-R-I-O-R-- recalco-- esta en todas partes. ¡Aprendé por favor a ser ordenada una vez en tu vida!-- junto las manos.

Lanza un suspiro.

-- Callate, vos-- me señal con desagro-- proyectas todo y sos la "ordenada" de la familia- contesta.

-- ¡Ay!, callate por favor-- sacudo mis brazos-- te ayudo por última vez-- le advierto-- reitero es la última-- la fulmino con la mirada.

Sonríe de oreja a oreja.

-- Gracias hermanita-- se lanza a mis brazos.

-- ¡¡Quítate perra asquerosa!!-- la aparto de mí.

Una vez más ha ganado, Pfff, soy tan bondadosa a veces.
Me tira un beso, y entra al baño mientras yo como buena hermana busco sus libros.
Perra asquerosa digo a lo bajo a medida que intento juntar su ropita de zorra.

Sale del baño al minuto.

-- ¡Lyn!, ¿Cómo se hace para desenmarañar un nido de arañas enfermas?-- pregunta mientras toca esa cosa espantosa de pelo que tiene.

Le contesto sarcasticamente.

-- Ya sabes, agua y shampoo. Habla con Patch, el sabe el proceso- le explico amablemente.

Pone los brazos en jarra.

-- Vete al demonio- me insulta.

Busca un peine y comienza a peinarse. Luego de segundos aparece maquillada. Yo como molesta que soy no dudo en molestarla.

-- Oye!-- le lanzo unas bragas- pareces un payaso, limpiate-- rió fuertemente.

Termino minutos después de ordenar sus cosas, yo ya estoy preparada con un bello moño bien hecho como siempre.
Tomo mi mochila.

-- Deja de estar quieta, muevete- la regaño-- nos retarán por tu maldita culpa-- le suelto.

Sin siquiera mirarme ingresa al baño.

Antes de salir le grito:

-- Apurate bebosha, vas a llegar tarde para ver a tu Puto Ken... digo Alfredo el verdulero de la esquina-- dicho esto me rió mientras cierro la puerta detrás de mi.

¿Vecino Nuevo? Sumiso NuevoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora