¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Era el idiota mas guapo que había visto en mi vida"
Recuerdo perfectamente el día en el que me dieron este trabajo, estaba demasiado emocionado, aunque mi mamá no tanto, le dije que por mas que yo quisiera no podría comerme la mercancía. Soy un fiel amante de los dulces y si, ahora trabajo en una tienda de dulces. Un lugar hermoso donde hay cualquier tipo de ellos, debo admitir que siempre es una tortura ver como los clientes se llevan sus bolsas y sus paquetes llenos de azúcar y yo no poder comerlos, me he acostumbrado a ello.
Pero en realidad amo mi trabajo.
-jiminie ¿Qué vas a comer?
-No lo sé.- Seokjin me saco de mi pensamiento.
Jin hyung es mi compañero de trabajo. Es el chico mas bonito que he visto en mi vida, alto, delgado, piel blanca, perfecta y facciones envidiables. A veces me siento celoso de el ya que todas las chicas le coquetean, y no solo ellas, también los hombres. Y para colmo ni si quiera puedo odiarlo, es tan agradable que es imposible que te desagrade.
El se convirtió en mi mejor amigo.
-Voy a ordenar algo.- dijo tomando su teléfono móvil.
-¿Del restaurante chino?.- pregunte mirándolo, o mas bien admirándolo, he llevado toda la mañana intentando saber como se peino para que se le mirara tan bien.
-Ugh no.- el frunció el ceño.
-Ah, se me olvidaba que no te gusta la comida de ahí.- me reí.
-Lo sabes.- el se sonrió -¿Te parece si pedimos algo de pollo?
-Claro, pide uno de estos.- señalé la imagen de un pequeño folleto.
-Seguro.- el comenzó a marcar el número.
-Pero que le quiten esa cosa amarilla que le ponen, no me gusta.- comenté en lo que el esperaba en la línea.
La campanita de la puerta sonó en señal que un cliente había entrado, nosotros no nos movimos porque supuestamente estábamos en nuestra hora de comida y Jungkook debía estar al pendiente.
El es otro empleado.
-Hola ¿alguien me puede atender?.- el cliente pregunto.
Seokjin me pelo los ojos como pidiéndome que fuera a atender pero yo ya estaba en mi tiempo libre así que me negué, no iba a trabajar en mi descanso. Jungkook debería estar encargado de eso, por lo que le insistí en que no iría mientras el ordenaba la comida.
-Holaa.- volvió a hablar - tengo dinero.
Vaya idiota, ni si quiera lo había visto pero solo de oír su voz ya podía imaginarme el tipo que era.
Nadie atendía y no tuve otra opción así que salí con una sonrisa al mostrador.
Oh no.
-Estuve mucho tiempo esperando aquí.-dijo el idiota, el idiota mas guapo que he visto.
