Mi Última Oportunidad (MUO #1)

Capitulo 11: Oscuridad y tinieblas del pasado.

Sentí mi respiración más agitada de lo que suele estar. Mamá y papá entraron corriendo a mi habitación.

-Lissa ¿qué pasa? - dijo preocupada mamá

-Tranquila mamá es solo una pesadilla.

- ¿Quieres hablar de eso?

-No- respondí secamente.

-Ok, intenta volver a dormir cariño -dijo papá.

Me dejaron sola e intente conciliar el sueño me asuste mucho. Por alguna razón sentí que debería de ir con Sarah. Así que le mande un mensaje aunque fuera medianoche. A los 4 minutos respondió:

Claro puedes venir a casa estoy haciendo unas cuentas. Te espero. La puerta la dejare abierta.

Me puse un pantalón y una camisa azul para no llegar en piyama y salí de mi casa a escondidas. Entre al cobertizo para sacar mi bicicleta. Estaba muy oscuro así que simplemente dije:

-Iluminate.

Y una bolita blanca muy brillante apareció como no sabía con exactitud dónde estaba la bicicleta la agarre y la empecé a buscar. Una vez que la encontré y salí de la casa. Antes de partir exclame: Apágate. Y la luz desapareció.

Llegue a la casa de Sarah y abrí la puerta con cuidado. Pase cuidadosamente por los muebles para no hacer ruido hasta que llegue a su habitación. Toque la puerta y ella dijo "Pasa". Cuando entre la vi sentada en una silla enfrente de su computadora.

-Hola Sarah- dije yo.

-Hola- respondió mi amiga volteándome a ver - ¿A qué se debe esta visita nocturna?

- Tuve una pesadilla Sarah, no sé por qué motivo pero la tuve y no puedo dormir.

Sarah se quedo pensativa.

-Yo digo que lo consultes con Ethan.- respondió.

-¿Por?

- Sencillo- empezó a decirme - Quizás sea una visión o algo por el estilo.

-No creo Sarah.

- ¿Como que no?

-Pues no es algo misterioso y no creo que le deba contar al menos no aun.

- Si eso quieres pero yo te sugiero que le digas.

-Lo pensare- dije dudando- Ahora me puedes decir ¿qué estás haciendo?

- Ah, sí estoy mandando un correo al director nos dijo que el teatro estará disponible hasta dentro de un mes.

- ¿Porque tanto?

- Hubo muchos daños Lissa.

-Bueno al menos seguiremos vendiendo y haciendo rifas ¿cierto?

-Si, por eso no te preocupes.

Seguimos hablando de cosas sin sentido. Y al final termine durmiendo ahí claro también le tuve que decir a mis padres. Al día siguiente había escuela pero antes quise pasar por la biblioteca de los Xalips para tomar un libro prestado. Así que Sarah y yo nos levantamos temprano para alcanzar el tiempo.

Llegando al callejón recordé que no sabía abrir el portal.

-¿No sabes abrirlo? - pregunto mi amiga molesta- ¡Y no te acordaste!

-Perdón. -dije con voz inocente.

Ya nos estábamos por marchar cuando apareció una niña pequeña con su madre, en realidad eran Rosie y la mamá de Ethan.