Capitulo 24: El Plan

36 8 9
                                    

El dolor disminuyo justo en el momento en el que Ethan llego para intentar ayudarme. Estaba consciente de lo que pasaba pero me sentía tan cansada que no hice ni el mas mínimo esfuerzo para abrir mis ojos.

Nadie sabía que había ocurrido hace solo unos momentos. No sé ni cómo llego el dolor, simplemente paso y no teníamos la idea de porque ocurrió. Sin siquiera planeármelo me abrí mis ojos y me di cuenta que estaba en una de las habitaciones de la casa de Janett.

Arrepentida de haber ido a la inauguración de Copicup les conté a mis amigos todo lo que había sucedido, cuide mucho no olvidar el mas mínimo detalle ya que podría ser que nos sirviera de algo. Como suponía que pasaría Janett me empezó a gritar y echar la contra por lo que había hecho.

-¿No sabes lo que has causado? Te dije una y otra vez que no tuvieras la tentación de ir pero ahí vas a escondidas en lo que nosotros dos te buscábamos por todas partes.

-Lo siento-dije con un hilo de voz.

-No vuelvas a salir. ¿Me escuchaste? Estamos tratando de protegerte y tú te vas haciendo locuras. Lo peor del caso es que relevaste la existencia de nuestra raza a los humanos.

-No podía quedarme con los brazos cruzados. Es que ni siquiera vistes el daño que empezó hacer Luke. ¡No estaba lanzando almohadas suaves ni nada por el estilo Janett!

Ella empezó a ponerse realmente eufórica y Ethan se quedo ahí parado sin saber qué hacer.

-No debiste de haber ido. Tal vez no hubiera tantos heridos si te hubieras quedado con nosotros.

-¿Me estás diciendo que soy la culpable de esto?

-Pues en parte sí.

Mi cabello empezó a ponerse en llamas, como había cada vez que mi enojo sobre pasaba mis limites.

-Créeme si estuvieras en mi lugar harías lo mismo-comente.

-Quizás no- continuo- Y no creas que enojándote vas hacer que cambie de opción.

-¡La culpable es la Dama Oscura!-grite.

- Entiende no hubiera pasado si no tuvieras las ganas de ver a Sarah. Ya no está segura junto a nosotros. ¡Entiéndelo de una buena vez!

Y salió de la habitación dándole un fuerte golpe en la puerta. Jamás la vi tan enojada como hoy. El dolor que había desaparecido por un momento volvió. Me dolía cada parte de mi cuerpo, tuve que acostarme bruscamente en la cama de nuevo. Sentía como si me estuvieran golpeando con un objeto extremadamente fuerte, no aguantaba sentía como si en cualquier minuto podría desmayarme Mi respiración se agitaba con cada segundo que pasaba.

-Tranquila, tranquila ya pasara- Ethan se había sentado a un lado mío y estaba claramente más calmado que Janett- No te desesperes Lissa, ya te lo he dicho.

-¿Porque me está doliendo el cuerpo de esta forma?- dije con la voz agitada y gimiendo de dolor.

-No lo sé. Probablemente fue un impulso o te llego alguna clase de maldición que incrementa dolores de esta forma.

-Quiero que se vaya- empecé a llorar, no aguantaba más si algo me iba a pasar quería que sucediera cuanto antes.

-Respira. Piensa en otra cosa. Algo bello.

-¿Cómo quieres que piense en algo así si acabo de poner en peligro a tanta gente?

El tenía una sonrisa triste.

-No dejes que te afecte Lissa. No fue tu culpa.

Me abrazo mientras continuaba llorando y gritando por el dolor. Se quedo a mi lado dándome palabras de consuelo que me tranquilizaban "Relájate" "Todo estará bien" "Ya paso". Y funciono puesto que con cada palabra de su dulce voz el dolor desaparecía. Mi cuerpo se relaje hasta el punto que me quede dormida en sus brazos.

Mi Última Oportunidad (MUO #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora