Mi Última Oportunidad (MUO #1)

Capitulo 25: Tercer ataque

En cuanto las dos personas salieron corriendo decididos a enfrentarse uno al otro. Yo no espere más tiempo y apreté el botón del pequeño aparato que tenía en mis manos y lo solté lanzándolo bruscamente al suelo.

Sin dudarlo un minuto todos salimos corriendo en dirección hacia esas personas. Distinguí que eran dos mujeres, una tenía el cabello rubio y la otra se le distinguía su cabellera castaña. Yo me fui directo a la mujer con cabellos rubios que se encontraba al extremo derecho del terreno. Cuando llegue a su lado mi primera reacción fue lanzarle un hechizo aturdidor. El efecto no duro mucho pero la retuvo por un instante. A mi lado se encontraba Janett decidida a lanzarle algo un poco más efectivo pero el hechizo reboto y le dio a uno de los guardianes.

Tarde un tiempo en asimilar que aquella chica traía una clase de cuchillo aferrado a su mano dispuesta a usarlo con cualquiera que se le acercara. Me pregunte si la otra mujer también traía un arma.

Intente hacer todo con calma, aunque no resulto del todo, tenía que ponerme firme y concentrarme en lo que hacía. Varios hombres se acercaron e intentaban quitarle aquel arma con diversos hechizos mientras algún otro hombre que no conocía la sujetaba por detrás.

Ella forcejeaba y daba la impresión de que pronto se le cortaría la respiración pero a pesar de ello intento seguir luchando.

Me uní a ellos e intente arrebatarle el cuchillo pero fue en vano. Después de que ella agitara su mano, el cuchillo me hizo un corte en la mano, no muy profundo al parecer pero emití un gemido fuerte por el dolor. Al minuto desapareció pero supe al instante que eso se debía a que estaba agitada y acelerada que no había tiempo de pensar en los dolores, ni en mis heridas.

Yo me entre tanto en la misión que ni me di cuenta que ya habían llegado los refuerzos que habían esperado en otras fuentes. Me aliviano que fuéramos mas, a pesar de que fueran 2 contra por lo menos unas 300 o 400 personas las chicas que ahora seguían ordenes de la Dama Oscura eran fuertes y no se rendían.

En ocasiones se acercaban bastante que casi cometían el asesinato pero siempre intentamos ser más rápidos para separarlas. Otras veces se iban por direcciones opuestas lo cual nos sorprendía de momento pero luego caíamos en cuenta que era una clase de distracción.

Me quede casi sin aliento cada vez que me proponían a atacar de una u otra forma. Ambas chicas se aventaban contra cualquiera. Su único objetivo era llegar a la posición de la otra.

Janett había conseguido una especie de espada, creo que se la prestaron. E intentaba hacer que la chica de cabello castaño se detuviera. La chica le dio un empujón fuerte y con un cuchillo, un poco más chico del que vi en manos de la otra chica, logro hacerle un corte profundo en la entre pierna. Después ella se cayó para atrás haciendo un fuerte impacto sobre el suelo. Abandone mi puesto y me dispuse ayudarla, no conseguía ponerse de pie. La chica le había quitado la espada a Janett y estaba a punto de clavársela en el pecho pero me dispuse a lanzar un hechizo que soltó una ventisca fuera de lo común y de esta forma la espada salió volando perdiéndose en la oscuridad. Entre 4 guardianes separaron a la chica de Janett, ella parecía volverse de nuevo hacía ella, pero con un gran esfuerzo la apartaron del lugar. Rápidamente me acerque a Janett que estaba intentando levantarse pero cuando casi conseguía sentarse se derrumbaba al suelto de nuevo.

-Janett ¿Estás bien?- pregunte alarmada.

-Tranquila estoy bien- contesto haciendo una vez más el intento de levantarse- Tu sigue. Estaré bien.

Pero yo me negaba, no la iba dejar ahí en medio de tanto caos. Quizás ella siguiera enojada conmigo pero aun así seguía siendo mi amiga y no la abandonaría.