CAPÍTULO 5

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Narra Adriana

Hace un momento que se a ido Alessia. No se, pero últimamente, se marcha a si por que si... Sin dar ninguna explicación.
Es extraño, como si ocultaría algo...
Miró a Laura y ella se cruza de brazos, echándose hacia atrás en la silla y suspira.
-¿que le pasa? - inclinándose hacia delante
-ni idea - me apoyo en mis manos -sólo se que sabe que tu eres bruja
-¡¿COMO?!
-no tengo ni idea... Solo se que lo sabe... ¿Como? Ni idea...
Laura siguió con las fotos, por cambiar de tema más que nada, supongo que estara impactada, la sola idea de pensar que alguien más sabia que ella era alguien especial, una bruja para ser exactos y sólo de pensar que ese alguien es la hermana de William, yo también tendría miedo sólo de pensarlo... Notó un escalofrío que recorre todo mi cuerpo.
-aqui pone.... - coge la foto y le da la vuelta -los O'Connors eran unos nobles, en el año 1679... Gran familia que protegió a los brujos... - me mira -¿Desciende de los O'Connors? Tu amiga digo
-no se... ¿Viven aún algunos de sus miembros?
-No creo que exista nadie que lleve el apellido. La familia quedó extinguida a raíz de la guerra civil, hace muchísimo tiempo por lo mismo que pone aquí, mi abu me contó que los asesinaron por ayudar a mis antepasados a escapar - se cruza de brazos -aunque ahora que recuerdo... la residencia de los O'Connors sigue estando aquí, a apenas a treinta minutos de la uni
-Muy interesante...
-también me contó que el nombre de las hijas eran: Erin y Alessia.
-demasiada coincidencia...
-¿decías algo? - la veo que esta recogiendo las fotos
-ah, no nada...
-y que Casandra Anderson - se pone de pie -les hizo un regalo, no me preguntes que tipo de regalo porque no tengo ni idea... Ya tengo bastante con que le e sacado esto a mi abu
La ayude a recoger las fotos, las metió en la carpeta y después las guardo en el bolso, me puse en pie y salimos al patio.
Anduvimos lentamente y en silencio, sin mantener ningún tipo de conversación, yo seguía pensando en que Alessia si tenia algo que ver con los O'connors... Hay algo dentro de mi que me dice que si. Esas fotos... Mucha coincidencia en que justo se parezca a la chica que salía en la foto.
Un escalofrío recorrió toda mi espalda, erizando el pelo de mi nuca.
Nos dirigimos hasta la campa que siempre vamos. Ante nuestros ojos se extendía el parque, bañada por la luz de la luna.
Nos sentamos en el césped del patio. Llevábamos apenas un mes y medio en la Universidad y ya hemos sufrido seis ataques y sólo uno a muerto.
Me di cuenta que al no tener a mis padres cerca, que me ayudaran, que me hicieran sentirme a salvo, protegida... solo me refugiaba en mis amigos y aunque me cueste reconocerlo en mi querida extraña compañera, de cierta manera me sentía protegida cuando ella estaba cerca de mi, como si en ella hubiera algo sobrenatural... Quiero decir como Laura. Es confuso lo que siento... Como si ella me hiciera sentirme como en casa, es extraño.
Es que con todo lo que a sucedido, necesitaba desahogarme, en menos de cuatro semanas seis ataques y en ese momento, con algo o alguien atacando, acechando por todas partes sabia que nosotras mismas podríamos ser las siguientes... Sólo de pensar en eso, se me ponía un nudo en el estómago.
Levantamos la vista al oír un grito, no muy lejos del lugar en el que nos encontramos, yo sin poder evitarlo me agarre al brazo de Laura, cerré los ojos y lo apreté con fuerza, como si esperará a recibir algún tipo de golpe, que me fuera a causal dolor.
-jóvenes, es hora de volver a sus habitaciones - dijo el guardia de seguridad por megafonía.
Al notar que Laura respiraba con normalidad y no sucedía nada, yo también empece a respirar con normalidad, aunque todavía notaba que el corazón se me saldría por algún lado, era incapaz de soltar el brazo de mi amiga... Pero esta acarició mi pelo para que me tranquilizara
-tranquila... - me dijo en voz baja y comencé a abrir los ojos.
Miró a mi reloj y son las 22:00 de la noche dios ¿ya es tan tarde? ¿Y el grito de antes? Esperó que no sea nada... Me estoy empezando a asustar, miro a Laura que estaba mirando en todas las direcciones.
-creó que tenemos que echar un vistazo... - poniéndose de pie
-¿estas segura? No creó que...
-Adriana, igual hay alguien que ahora mismo esta en peligro y somos su única esperanza
-tienes razón - digo decidida
-vamos...
Me ayuda a ponerme en pie y nos ponemos en camino hacia donde habíamos escuchado el grito hace un par de minutos.
No se ve a nadie en todo el campus... Normal, creó que somos las únicas que andamos a estas horas por aquí y encima yendo hacia un grito de dios sabe quien... ¿y si anda por aquí lo que ataca a los estudiantes? ¡quien me mandara ami...! Por lo menos tengo una bruja a mi lado por si acaso, me siento un poco más segura.
-tranquila - me agarra del brazo -yo también estoy asustada, para que te voy a mentir... - y seguimos avanzando con paso firme pero lento con seguridad, mirando en todas las direcciones.

Luna RojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora