《Capítulo 12》

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Todo este ambiente me estaba poniendo nervioso y hacia que mis manos temblaran, me sente y coloque un mechón de mi pelo detras de la oreja.

-Veras Nathaniel...son muchas cosas las que tengo que decirte y todas rondan entorno a tu padre, solo quiero que estes bien.- Dijo tomando mi mano.

-Dime ya. -Era notable que estaba super nervioso, no podía evitarlo ese hombre abuso de mi desde que era un crío y sin piedad.

-Para empezar, he estado utilizando tu móvil. - Dijo soltando un leve suspiro, como si se estuviera quitando un peso de encima.

-¿Qué? ¿Por qué? ¿Para qué? ¿Que tiene que ver con mi padre? - Mi corazón latía a mil, estaba totalmente nervioso.

-Calmate, dejame explicarte.
Tu padre ha estado mandandote mensajes constantemente pero yo te los he estado borrando por el simple comentario de estos, Nathaniel, este ya es diferente...

Se podía notar el miedo por parte del rubio. - E-enseñamelo.- Decía tan decidido, tenía miedo, pero no podía no saber de que trataba el mensaje.

Castiel puso una cara un tanto indescifrable, sacó el móvil del otro joven y se lo enseñó haciéndole tensar.

"Vaya, vaya, ya se donde te hospedas.
Has sido bastante ágil a la hora de huir, pero te vas arrepentir mucho, no sabes muy bien con quien estas tratando pedazo de puta.

Disfruta cada segundo con ese "amigo" que tienes, que pronto no lo veras más."

Nathaniel llevó la mano que le quedaba libre a la boca haciendo escapar unas lágrimas del miedo, cuando acabó de leer el mensaje el móvil se le resbaló cayendo sobre el suelo.

Castiel corriendo lo abrazó acariciandole la cabeza para hacerlo calmar cosa que no pasaba, pero el seguía.

-. No te preocupes no voy a dejar que te pase nada. - Decía el pelirrojo

Nathaniel se aparto y lo miró por unos segundos con asombro, Castiel lo miró y empezó a secarles la lágrimas.

-. C-Castiel...no quiero que te involucres en esto.

Dijo él rubio a gachando su mirada.
Castiel siguió sujetandole de su rostro.

- Mirame, quiero que me mires a los ojos mientras te digo esto. - Nathaniel se ruborizo y miró a Castiel.

-. E-está bien.

-. Nathaniel yo te quiero y creo haberlo dicho en algún momento, no pienso dejarte sólo en ningún momento, no te cierres, no te hagas daño tú sólo, tranquilizate que todo va a estar bien, ya verás.

Nathaniel no cabía en su asombro no esperaba que se le volviera a confesar pero él también, él también sentía sentimientos hacía Castiel pero no sabe cómo expresarlo.

Castiel le acariciaba mientras Nathaniel cerraba sus ojos dejándose mimar como sí de un gatito se tratase.

-.Nathaniel no creo que pueda aguantar más.

El pelirrojo de repente le plantó un beso casto, pero Nathaniel no le detuvo, dejó llevarse.

Castiel tumbó al rubio en el sofá lentamente mientras se besaban apasionadamente, cada lengua exploraba la cavidad bucal del otro, parte de la saliva se deslizaba sobre el cuello de Nathaniel.

Castiel fue bajando hacía el cuello de Nathaniel lamiendo, mordiendo, besando y succionando cada parte de él mientras Nathaniel sólo soltaba suave y tímidos gemidos.

Castiel por un momento se paró y colocó los brazos de Nathaniel sobre su cuello y las piernas en su caderas.

-¿Q-qué haces Castiel?

-. Vamos a la habitación será más cómodo para ti.

Castiel levantó a Nathaniel como si de un peque se tratase, el rubio ante esto hundió su cara en el pecho de él.


Acto seguido el pelirrojo volvió a llevar la iniciativa.

Ambos se besaban lento y tiernamente, mientras Castiel acariciaba todo el abdomen del rubio quién tenía pequeñas convulsiones cada vez que rozaba sus pezones.

Depósito su mano en el miembro rubio cuál fue acariciando lentamente.







La temperatura en mí subía con cada uno de sus toques.

Castiel se despojó de toda su ropa quedando totalmente desnudo, mostrandome su cuerpo totalmente formado y quitó la poca ropa que quedaba en mí.

Mi corazón no paraba de palpitar más y más fuerte con cada acaricia que recibía sobre mi miembro.
Según lo manejaba iba besando mi abdomen hasta pararse y posar sus labios sobre la punta.

Comenzó a lamerlo de arriba abajo, su lengua se sentía cálida hacia este acto haciéndome sentir un placer enorme cuál generaba unas descargas eléctricas.

-¿Estás listo?.- Afirme gestual.

Se dirigió a su mesita y sacó un tarrito con un líquido transparente.

Vertió ese líquido sobre mi entrada, éste era caliente.

Movía sus dedos al rededor de mi entrada hasta adentrar uno, cuál iba metiendo y sacando lentamente acto seguido metió un segundo que fue moviendo en círculos y por último metió un tercero cuál este consiguió llegar al punto exacto haciéndome gemir y succionar su dedo en señal que estaba listo.
Castiel introdujo su virilidad en mí esfínter dejando que éste se acostumbrara mientras me besaba.

Poco a poco fui moviendo mis caderas para poder continuar, lo siguiente que se sentía era como nuestros cuerpos ardían de lujuria haciendo un vaivén.

-.Haa...Ah...C-Castiel...nng.- De repente sentí un escalofrío haciéndo arquear mi espalda, mi abdomen y el de Castiel quedó bañado por mi semen, segundos después él llegó al clímax llenándome de él.

-.Te amo.- Me abrazó por varios minutos para después levantar mi rostro haciendo que nuestras miradas se encontraran.

No podía más mi corazón palpitaba a mil y de una cosa estoy seguro yo lo amo.

-.Y-yo también te amo.- Velozmente aproveché y pose mis labios sobre los suyos.

-.Me haces muy feliz.

Me dio un tierno besó en la frente y cayó rendido del cansancio y yo al igual cerré mis ojos.


Hola personitas, aquí les traje algo de lemmon.

Tardé demasiado en publicar, lo sé pero la causa fue que me queme la mano derecha y me era imposible.

Aquí su capítulo, hasta la próxima (≧▽≦)/









No quiero que el mundo nos separe más  (Casthaniel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora