Mi nombre es Samuel David y es difícil pensar como un sueño o una meta se puede derrumbar solo por un ser humano cometer un error algo parecido me sucedió a mi.
Cada día como de costumbre me despertaba pensaba aún en mi cama que podría hacer para poder salir adelante, fui un niño normal como todos la única desventaja que tuve fue que no fui a la escuela, estaba aferrado a la idea de alcanzar grandes cosas como querer llegar a tener dinero en abundancia, darme lujos, buenos carros y cosas así, ese día me levante y fui a casa de mi mejor amigo o por decirlo así mi socio Esteban
- Epale hermano , como va todo? - Le pregunte a esteban
- Bien todo como de costumbre, como está la señora Nellys ?
La señora Nellys era el ser que mas amaba en el mundo, la mujer que siempre lucho por mi, mi madre.
- Pues bien ahí cada día peor, hay días en los que no se toma sus medicamentos para la diabetes, y se complica.
- Lo siento hermano, se lo difícil que es ver a tu a mamá sufrir, afortunadamente aún tienes la tuya con vida.
- Sabes? Lo mas duro es ver aquella mujer guerrera que lucho por mi, aquella que hizo de mamá y papá juntos aquella, que me sacaba de los problemas, y a veces no poder ayudarla por el hecho de que no me dan trabajo por no haber estudiado por ser de un barrio .
- Pues si, pero no tienes dinero por que no quieres, de hecho te abrí las puertas para que pudieras tener lo que quieras hasta ayudar a tu mama, solo porque eres mi amigo .
Esteban fue un niño que al igual que yo creció en este barrio lleno de maldad, y su meta era matar aquel hombre que mato a su hermano, y llego a ser jefe del barrio pero sin cumplir su meta.
- No, hermano sabes que yo en esas cosas no me meto, como sea resuelvo . Me tengo que ir, cuídate.
- Ok, sabes que cuentas conmigo para las que sea, toma aquí tienes dinero para los medicamentos de tu mama.
- No, tranquilo yo veo como hago.
Se podrán preguntar que porque no acepte el dinero si me estaba ayudando, era mi orgullo no me gustaba nada regalado.
