El Nuevo Paciente {laliter}

16.Verdad y consecuencia

El auto freno y me dedique a admirar mi entorno,no era el lugar que imaginaba ver,tal vez como un típico hombre me hubiera llevado a la playa,un departamento en las afueras de la ciudad,Peter era diferente,el solo observar conmocionada el enorme lago de un pueblo a las afueras de la ciudad,me hacia la idea magnifica de algún día tener una casa para mi.Baje del auto a penas Peter giro su rostro para ver mi emoción y es que le había preguntado todo el camino nuestro destino pero el terco,no quería responderme y sólo cuando ví ese gran cartel que decía Portlan a sólo mil kilómetros, la sonrisa apareció.

Caminé con Peter a mis espaldas,sabia que el me estaba mirando,al observar bien lo que tenia frente a mi,mis labios formaron una gran *o* pero no de esas *o* conmocionadas,era una de esas *o* que admiraban lo que estaba plantado frente a su cuerpo.Le sonreí cuando lo vi de reojo sonreír,una cabaña frente a mis ojos,enorme pero sencilla al punto de parecer un tanto abandonada me saludaba con la puesta de sol...el viaje había válido la pena, fije mi vista al rededor,un paisaje casí soñado,lleno de árboles y con el sol brillante.Había llegado a ese lugar el cual Peter quería que estuviéramos y era tan hermoso ver la naturaleza a mi alrededor que estaba fascinada.

-¿Te gusta?-Me preguntó,en sus manos traía dos maletas.

Dirigí mi vista a sus ojos y no pude evitar morder mi labio inferior ante tal pregunta,por supuesto que me había encantado si lo que más amaba en el mundo eran los días de campo y dicho eso los recuerdos venían a mi mente,toda mi infancia había constado de viajes familiares.

-¿que si me gusta? Es el lugar perfecto-Exclamé aún observando todo a mi lado.

-Gracias a Dios que si te gusta-Exclamó como si estuviera aliviado.

Lo miré divertida ¿Porque creía que no me gustaría? Al menos en ese momento el ya lo sabía.

-Siempre me han gustado este tipo de lugares Peter-Le respondí encogiéndome de hombros.

Sonrió dejando las maletas en el suelo.

-Le Pregunté a tus amigas que era lo que más te gustaba pero al parecer no conocen la Lali que yo quiero conocer-Dijo pasando sus manos por mis hombros,de arriba hacia abajo.

El tenía razón,desde que había llegado a la clínica,con las chicas nunca habíamos hablado de ese tipo de temas,pense algún día hablar de ello,al menos los ojos de Peter me hacían perderme en el momento.

-Gracias-Le dije con una leve sonrisa-Nunca imaginé que acertarás.

Peter volvió a sonreír pero esta vez negó con su rostro derribando nuestra distancia.

-No fui yo quien acertó pero me alegra estar acá con vos-Susurró mirando mis labios.

Fruncí mi ceño.

-¿Entonces quien fue?-Pregunté pasando las manos por su cuello.

-Fue Euge,ella te conoce mucho o es una bruja-Admitió con tono divertido.

Imaginé a mi jefa como si fuera una bruja y una carcajada escapó de mis labios,Peter también rió escapándose así el supuesto momento romántico por uno lleno de carcajadas.

-Si ella supiera que la llamás así te mata-Dije aún riendo.

Peter volvió a acercarse a mi,tomó de mi cintura y sólo nos quedamos en silencio,mirándonos sin decir nada,llevando minutos afuera de la cabaña sin planear absolutamente nada.

-Me tenés muerto-Habló por fin cuando el silenció se hizo dueño.

Lo miré a los ojos,esos hermosos ojos verde claro que había visto cuando me había enamorado de su sola imagen en una foto,era loco,era estupido, incluso yo misma decía no creer en esas tonterías del amor a primera vista o en el destino pero la vida me estaba mostrando como el destino hablaba sin que uno pudiera escucharlo.