Te necesito junto a mí [Frikey]

Capítulo 6

"El enojo puede ocultarse junto con la tristeza y la felicidad, pero el amor es un sentimiento que no se puede ocultar, o tal vez si, pero jamás desaparecerá"

El menor estuvo prácticamente todo el día en las nubes, los labios de Michael seguian en su pequeña cabesita, dando vueltas por todos lados.

Eso no significaba nada, simplemente le gustaban sus labios.

No decía estar enamorado ni nada por el estilo, es solo que aquellos labios fueron suficientes para ser fuerte, para darse cuenta que la vida es valiosa y no hay que desperdiarla lamentándose.

Michael ya cansado de llorar decidió levantarse, despedirse de su hermano, prometerle que volvería a visitarlo algún día. --Aunque ahora confiaba que aquella estrella, de nombre Gee, lo seguía para todos lados y jamás lo dejaría solo, como el mismísimo Gerard Way.--

El Mayor decidió pasar por el supermercado a comprar comida. Algo para tener en casa, café y más café. Caminó hacía su casa y desde unas casas anteriores a la suya divisó la figura de una persona sentada en las escaleras frente a la entrada, con su cabeza escondida entre sus manos

"Frank" susurro el morocho y por instinto su corazón comenzó a latir a mil por hora mientras apresuraba el paso, sin importar el peso de las bolsas prácticamente corrio hasta su casa y al estar frente a ésta lo observó mejor y no era quien pensaba, sino..

-¿Matt? - Lo miró entrecerrando los ojos para verificar que no estaba equivocado. El pelirrojo se puso de pié y lo abrazó haciéndo que sus bolsas caigan, pasó un braso por detras de el torso de su novio y lo apretó mas a su cuerpo -¿Que te paso? - Preguntó al notar sus ojos aguados, su camisa arrugada, corbata desecha y su saco sobre las escaleras

-Yo.. mi padre... lo saben - Michael lo abrazó más fuerte, se sentía feliz porque los padres de su novio sabían sobre su relación, pero por otro lado era algo que le daba igual ya que no oo veía como un novio, sino como un amigo de la infancia- Se enojó mucho conmigo y no quiere volver a verme - Dijo con un hilo de voz

-Lo siento Matt, todo esto es mi culpa - Se separó lentamente de él - Si quieres terminar conmigo por esto... lo entenderé - Dijo triste bajando su mirada. Sabía que no lo amaba, pero era la única persona que le correspondía su amor o que alguna vez lo hizo

-Oye, mírame - Lo obligó a mirarlo levantando su mentón - No dejaré que el amor de mi vida se aleje de mi nuevamente por una estúpida discusión con mi padre - Ambos chicos se abrazaron nuevamente

-Entonces... ¿Estamos bien? - Preguntó tímido. Aunque a estas alturas del partido ya nada le importaba, Frank era todo un lío

-Claro que si, a menos que tu no lo quieras estar - Le dedicó una sonrisa triste

-Tonto - Lo beso lentamente, como si el beso representara palabras y acciones - No digas eso - Juntaron sus frentes y ambos sonrieron ignorando a las personas a su alrededor que los juzgaban con la mirada - Vamos adentro, odio que la gente nos mire - Dijo rompiendo el "Momento mágico'' que estaban teniendo

-Si, vamos - Le sonrió mostrando sus dientes blancos y grandes que en algún momento enamoraron al morocho, pero ahora simplemente no sentía nada al verlos.

Matthew lo ayudó a cargar sus bolsas, Michael rezó por que Frak no esté dentro de la casa. Con cuidado y miedo abrió la puerta. Por suerte la televisión estaba apagada, eso le confirmaba que Frank no estaba allí. Suspiro al no notar su presencia y sonrió como si nada

-¿Puedo quedarme a comer? - Pregunto sacandolo de sus pensamientos. Este asintió sin problema, conociendo a Frank Iero éste ya estaba en un bar metiéndose alcohol hasta por los poros.