Te necesito junto a mí [Frikey]

Capítulo 11

"Mentiría si dijera que no te extraño o que no lo haré, pero me pones en una situación difícil y solo me despedire para conservar la poca dignidad que tengo. Tal vez algún día te des cuenta de lo mucho que te he amado"

Se despertó muy temprano para acomodar sus cosas, todas las que tenía que llevar. Tomó una larga ducha donde reflexionó si en verdad estaba haciendo lo correcto y llegó a la conclusión de que si quería ser feliz y no sufrir más, debería irse a probar cosas nuevas, nueva ciudad, nuevas personas, nuevo trabajo  y tal vez hasta un nuevo amor.

Llamó a Bob para que lo llevara al aeropuerto y en diez minutos apareció su mejor amigo en la puerta

-Adiós Skip, cuida la casa, se buena mascota, tal vez regrese por ti. Cuida a Frank - Acarició a su cachorro y un par de lágrimas se escaparon por estas. Su perro sabía a lo que se refería, él entendían todo hasta con una mirada. Michael se puso de pie, miro la escalera y susurro -Adios Frankie - Luego abrió la puerta y desapareció por ésta.

El cachorro corrió escaleras arriba, abrió la puerta con su patita y observó a Frank envuelto en las sábanas. El pequeño can comenzó a ladrar lo más fuerte que jamás lo había hecho, luego tiraba de la sábana pero Frank no respondía, tenía el sueño muy pesado. El perro se subió a la cama de un salto, levantó su patita y orinó los píes de Frank

-SKIP! - Gritó levantándose de la cama - Estúpido perro - Caminó a su habitación, busco ropa y luego se ducho rápidamente. - Skip, ven aquí - Llamaba al cachorro que ladraba en el primer piso - Hey, ¿Que tienes ahí? - El pequeño tenía en su boca una carta donde llevaba su nombre - Dame eso - Se lo quitó, lo abrió y comenzó a leerlo

Frank:

Supongo que si estas leyendo esto es porque no te has despertado cuando me fui. Creí que me dirías que me amas antes de partir, pero como nunca lo escuché salir de tus labios me fui a vivir con Matthew a Londres.

Espere tanto tiempo a que suceda algo antre nosotros que ya no tenía sentido seguir esperando, ya nada tiene sentido sin vos pero haré un esfuerzo.

Te amo más que a mi propia vida o más de lo que jamás pude llegar a amar a alguien. Te convertiste en lo más importante que tenía y ahora te dejo ir, vive tu vida y trata de no recordar el apellido Way y esfuérzate en ser feliz, tal vez algún día nos volvamos a encontrar, pero ya no seremos los mismos.

En verdad Te amo, espero que algún día lo entiendas. Adiós, cuida mucho a Skip. Te amo.

Michael Way.

-Mikey - Susurró mirando hacia todos lados. Subió corriendo las escaleras, entró en su habitación y observó que faltaban cosas de él, abrió su armario y no había ropa, luego se fijó en su cómoda y estaba completamente  vacía, con una excepción.

En el último cajón había una caja muy llamativa de color azul. Frank la sacó, Respiró antes de abrirla y cuando lo hizo se llevó la sorpresa más grande de su vida

-Ohh Mikey - Susurro mientras las lágrimas caían por sus ojos. En aquella caja estaban todos sus recuerdos con Frank, desde las servilletas de papel, hasta las cartas que Frank enviaba cada navidad antes del accidente de Gerard o los regalos que solía hacerle un su cumpleaños, entre otras cosas.

En verdad lo había esperado por mucho tiempo.

Sacó su celular y llamó a Bob lo más rápido que pudo

-Vamos desgraciado. Contesta! - Dijo en tono alto antes de que lo atienda

-Hol..
-Se que estas con él Bob, ven a buscarme. Quiero hablar con él - Grito más desesperado que nunca
-Frank, su vuelo esta por salir en 45 minutos o tal vez menos
-Bob, yo lo amo. Ven por mí - Se desesperó mientras salía de la casa y comenzaba a correr hacía el centro en caso de que Bob no quiera ir por él
-Frank, si lo amas ¿Por qué no se lo dijiste antes? Si lo hubieses dicho ahora él estaría en su casa contigo
-Bob, ¿Vendrás a buscarme? - Preguntó con desesperación, sabía que se había equivocado y no estaba para que Bob lo ande retando como solía hacerlo su madre -¿Sabes? No lo hagas, iré yo mismo
-Frank, espera! - No lo dejo terminar cuando Colgó y comenzo a correr con mas rapidez hasta su casa