SAT

Busqueda

-Todos estos jóvenes poseen pasados crueles, señor- Comentó el aspirante a comandante, pero por ahora cadete Radahall.

-Mejor, quiero todo sobre ellos en mi oficina mañana por la mañana, mientras mas rápido, mejor- Exigió el comandante Dalton, mientras volvía a su oficina- Ah, y yo mismo les comentare sobre el programa a cada uno- Informó.

Reformatorio de Washington.

La primera parada de Dalton fue en Washington, la idea de conocer a la joven Skyler Samuels, le fascino.

-Buenos días Skyler- Le saludó cordialmente el comandante.

-Ya casi termino, ¿Si? No necesitaba ninguna escolta- Comento ella terminando de comer el "almuerzo", si así se le podía llamar.

-No, descuida hoy no te van a transferir, tengo una propuesta que hacerte- Le dijo el comandante mientras juntaba ambas manos detrás de su ancha espalda.

-¿Y tu eres?- Le preguntó ella frunciendo el ceño confundida.

El solo sonrió.

Reformatorio de Arkansas.

-¿Como te encuentras hoy Alex?- Le preguntó Dalton al joven que se encontraba tirado boca arriba en su pequeña cama.

-Espléndidamente señor, este es el mejor lugar del mundo ¿No cree?- Le dice sarcástico Alex mientras se sentaba en su cama- Ah y por cierto, ¿Quien es usted?-

-Bueno, seré tu liberación Alex, tengo un trato para ti-

-¿Un trato eh? Cualquier cosa si me saca de aquí- Le dijo Alex pasando su mano al comandante para que este la tomara.

Dalton sonrió y lo ignoró dándose media vuelta en dirección a la puerta- Ven conmigo-

-¿Esto es legal?- Preguntó el joven desorientado.

Prisión de Los Ángeles.

-¿Cuando llegaste Cameron?- Le pregunta el comandante al muchacho que parecía estar reconociendo su nueva celda.

-Hace unos minutos, no lo puedo creer- Dice el muchacho- Esto ya no es mas el reformatorio- Aún no se persignaba de la presencia del comandante y cuando lo hace le pregunta: -¿Es el guardia del pasillo? ¿Podemos hacer un trato? Conozco una forma muy...-

-Tú no harás nada, sígueme- Lo interrumpe el comandante, y así lo hace Cameron.

Prisión de Nueva Jersey.

-Ah, la gran prisión de mujeres de Nueva Jersey, ¿No es increíble Radahall?- Pregunta el comandante- ¿Y donde esta nuestra chica?-

-Cassidy Helman es... La protagonista de la pelea señor- Comenta Radahall.

En medio del gran comedor se disputaba una escena infernal, Cassidy era, sin duda, la que dominaba la pelea, zarandeando del cabello de otra mujer que se encontraba en el piso sin ninguna posibilidad de volver a pelear. El comandante miro a Radahall, y este a los guardias que venían con ellos, estos de inmediato acudieron a separar a ambas señoritas, cuando trajeron a la rubia y la pusieron enfrente al comandante, esta no paraba de gritar y pedir que la soltaran.

Dalton la miró por un momento, sonrió y dijo:

-Se lo explicare en el camino, llévensela-Ordenó.

Prisión de Indiana.

-¿Aceptas o no el programa?- Al fin estaba manteniendo la primera charla formal con uno de estos jóvenes- De todas formas no tienes opción, creo-

Cualquiera que la vea, diría que es imposible que Lucy fuera una criminal, pero allí estaba.

Se cruzo de piernas y preguntó- ¿Y yo que obtengo?-

-Una vida, un trabajo- Iba enumerando Dalton, el sin fin de posibilidades que ella tenía junto a él- En cambio aquí- Miro todo el lugar con desprecio-No tienes nada- Terminó.

Ella lo miro por un momento, sonrió y aceptó su mano.

Prisión de Ohio.

-¿Cual es Radahall?- Pregunta el comandante caminando por los pasillos de la prisión.

-Es la celda 208, señor- Le contesta John Radahall.

-El 2 y el 8 forman el diez, un número brillante- Menciona el comandante mientras abría la celda 208- Tan brillante como Scott Harries, ¿Como estas muchacho?- Le dijo el comandante.

-Ya le dije a los otros sujetos que no voy a decir nada- Le responde Scott.

-Tranquilo, tranquilo. Vengo sacarte de aquí-

-Que estupideces dice, esto no le servirá, ya se que quiere chantajearme, pero la idea fue toda mía- Scott estaba nervioso, la lealtad que presentaba le encantó al comandante.

-Es brillante Radahall, vamos muchacho, te lo explicare al rato- Le dijo el comandante mientras se iba y hacia señas a sus guardias para que prosigan con el protocolo, pataleando y quejándose, Scott subió al auto de la corporación.

Reformatorio de Misuri.

-Al fin, nuestra última parada Radahall- Comenta Dalton

-Así es señor, Drake Shepard lo espera en el comedor- Le comenta.

Drake ciertamente se encontraba ahí, con un estilo de vago, recostado sobre la silla mientras se quejaba por lo bajo.

-Drake, chico, lindo día eh- Le dice el comandante, tomando asiento.

Este solo frunció el ceño y asintió.

-¿No vas a saludarme?- Drake forzó una sonrisa en forma de saludo- Esta bien, ¿Te gustan las computadoras?- Este asintió mirando distraído hacia cualquier lado del horrible comedor- Perfecto, por que tengo un gran trabajo para ti-

-No me moleste ¿Si? Suficiente con que ya este aquí, para que gente como usted me este molestando- Mencionó hablando por primera vez el joven, se levantó para volver a su celda, por ende el comandante hace señas a sus guardias para que lo retuvieran.

Iba a ser un gran trabajo.

En ese momento, luego de ya tener a todos sus nuevos agentes, hizo una llamada.

-Edward, todo listo, te veo en Nueva York- Y luego cortó.

Dalton Barret en multimedia :)