SAT

Capítulo 4

-Señorita Helman, pase por favor- Le pide el mismo asistente.

Cassidy con un aspecto más que relajado entró a la habitación, ni si quiera se había preocupado por los gritos que surgían de aquel cuarto.

-¿Que hay?- Ingresó Helman sentándose en la silla frente a Dalton, este aun tenia su cabeza en la pobre de Skyler, ¿Que hacer con ella?

-Cassidy, que bueno verte de buen humor- Le dice el comandante, volviendo a la presente situación, ahora su atención debía fijarse en encontrar al líder.

-¿Y que le hace pensar que estoy de buen humor?- Pregunta ella levantando una de sus cejas, divertida.

-Oh lo siento, es lo que parecía- Responde el comandante mientras se recuesta en su asiento.

-Bueno, apresurémonos con esto ¿Si?- Apura la joven, a lo que Dalton arruga su frente y luego sonríe.

-Esta bien, cuéntame sobre tus momentos en la Casa Azul de los sueños- Le pide el comandante, cruzando sus brazos.

-¿Es en serio? Estoy cansada de contarlo- Suspira cansada Cassidy pero de todas formas prosigue- Solo tengo que decir que fueron los peores días de toda mi vida-

-Bueno tampoco pudieron ser tan malos ¿No? Cuatro hombres que te adoraban- Le comenta malvadamente Dalton.

-¿Que? ¿Adorarme?- Una mas cayendo en su provocación.

Dalton suspira y dice: -Para mi eras su favorita- Vuelve a manifestar de forma perversa el comandante.

-¿Usted se esta escuchando?- Cuestiona Cassidy, frunciendo el ceño y apuntando con su dedo indice, su oreja.

-Comentaron algunas de las chicas que estuvieron contigo encerradas, que eras la más fácil de todas- Comenta cruelmente Dalton.

-Es mentira, ellas nunca dirían algo como eso- Expresa dolida la joven.

-Claramente no te lo dijeron, pero testificaron que tu no reprochabas a la hora del abuso, te gustaba- Mintió el comandante, ella cambio su mirada, si estas mataran, Dalton estaría muerto. El sabía tocar el punto crucial de cada uno de ellos.

-En serio ¿Usted escucha lo que dice? ¿En que vida a alguien le gustaría que se aprovecharan de uno?- Preguntó indignada ella.

-A ti, aparentemente- Cassidy era la mas agresiva de todas, y él lo sabia, así que no se asomo a la mesa por precaución.

-Es un idiota, cállese si no sabe lo que dice- Le reclama la joven- Esto debe ser una broma, una pesima broma-

-Solo se que a las zorras les gustan esas cosas. ¿Te crees una?- Cuestiona vilmente Dalton.

-Por supuesto que no- Cass se levanto de su asiento gritando y golpeando fuerte la mesa.

-Yo creo que si lo eres- Sonrió falsamente el comandante.

-Lo matare, en serio, y no me va a importar nada, ni usted, ni su estúpida corporación, ni la condena- Menciona Cassidy enojada y claro que lo estaría, ¿Por qué el comandante le decía cosas como esas?- Lenta y dolorosamente acabare con usted si no se calla y continua con lo se supone que tiene que hacer- dice ella mientras se acerca Dalton.

-¿Y cuando lo harás?-

-Ya mismo, si es posible-

-¿Ya mismo quieres matarme? No podrás, sin un arma, no vales nada- Dice Dalton negando con su cabeza.

Ella salto sobre él y llegó a golpearlo, tan fuerte que hizo que su labio inferior sangrara, las luces se fueron y lo que tenía que pasar, pasó.