Lo que me gusta de ti (TaeNy - Adaptación)

Capítulo 23: Cuando tú me miras en los ojos.

La puerta se abrió con brusquedad y por el susto el café que estaba bebiendo en ese momento se derramó encima de los documentos y...

-¡Ayyyyy maldiciónnnnn! ¡Mi piernaaaaaaa!

-¡Tiffany! ¡Losientolosientolosientolosiento! ¡Te juro que no fue mi intención...!

-¡Cierra la boca y busca algo para limpiarme! ¡Esta mierda ardeee!

Taeyeon salió corriendo hacia el baño y enseguida trajo una toalla mojada que puso encima de las piernas de Tiffany que estaban enrojecidas por el café caliente derramado.

-¡Suelta eso! ¡Ya lo hago yo!-protestó Tiffany, tomando la toalla y secándose con la mano izquierda.

-Tiffany...

La pelirroja alzó la mirada y alzó una ceja, observándola inquisitivamente.

-Lo siento, yo...

-¿No te enseñaron a tocar a la puerta?-interrumpió Tiffany, de mal humor.

-Sí, por eso te pido disculpas, porque...

-Ya no tiene importancia, ya me quemé y ya se dañaron los documentos...

-¿Cuáles documentos?-preguntó, confundida.

-Los de mi trabajo-respondió Tiffany, intentando levantarse.

-Sabes lo que dijo Myu...

-¡Sé muy bien lo que dijo!-le espetó Tiffany, caminando hacia el baño, pero Taeyeon la detuvo.

-¿Se puede saber qué te hice ahora? No me creo que estés así sólo por un poco de café y unos documentos-reclamó.

-Hubieras podido ser un poco más sincera conmigo. No te costaba nada.

-¿De qué hablas? ¿En qué supuestamente no fui sincera ahora?-inquirió Taeyeon, confundida.

-¡Dijiste que Alex y tú no son novios, pero salen en fotos del periódico besándose y luego me entero que él gusta de ti!-le espetó, con rabia.

-¿Hola? ¿Me estás haciendo una escena de celos o qué?-preguntó Taeyeon, incrédula.

-¡¿Celos?! ¡Esto es increíble! ¿Por qué habría de tener celos?-siseó.

-¡Pues eso es lo que parece!-chilló Taeyeon, enojada-¡Te recomiendo que antes de creerle a tu amado Nichkhun me preguntes las cosas! ¡Las fotos pueden ser malinterpretadas!

-Malinterpre... ¡Por favor, Taeyeon!

-¡Sí, porque yo no besé a Alex, fue él quien me besó a mí!

-¿Qué...?

-Sí...Alex gusta de mí, ¡¿Pero qué demonios quieres que haga?! ¡Ya le dije que no podía haber más nada entre nosotros que una amistad!-farfulló-Ni siquiera sé por qué te digo esto...al final siempre le vas a creer a Nichkhun.

- No se trata de eso...

-¿Ah no? ¡¿Entonces de qué?!-preguntó, con rabia-Nunca logro entenderte, ¿Vamos a estar siempre de este modo?

-¿Cuál modo?

Taeyeon sin pensarlo, se acercó a Tiffany y acariciando su mejilla la miró profundamente. La pelirroja sentía que por alguna razón ya había estado así de cerca con ella.

-A veces creo que...esto significa algo y no me dejas más opción que soñar con...me confundes y eso me desespera porque yo quisiera y me muero de ganas por...

-¿Qué...?

Se había formado una especie de vacío en el que nada se podía escuchar, sólo el sonido del corazón latiendo con fuerza y embotando sus sentidos. Taeyeon miró sus labios y supo que ya no podía seguir esperando más, se acercó más y casi le da un infarto al miocardio. Un segundo después la pelirroja estaba en una esquina y Taeyeon en la otra, completamente de espaldas.

-Señorita Tiffany, el Señor Jongwook la quiere ver, ¿Le digo que pase o usted...?

-Dile que...dile que yo bajo y que...que me espere en el despacho-balbuceó Tiffany, evitando mirar hacia cualquier lugar. María salió y las dos se volvieron a quedar solas.

-Tiffany...

-Ahora no, Taeyeon-dijo y sin mirarla, salió de ahí.

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-y...blahblahblahblahblah...porque eso blahblahblahblahblah...yo pienso que mejor...blahblahblahblah...

La iba a besar. ¿En qué jodidos estaba pensando? No podía, no debía, porque estaba Alex que le gustaba Taeyeon y eso sería como una traición, además que se iba a casar con Nichkhun. Quería recordar todo ya de una vez, ¿Por qué no podía? ¿Tendría que pegarse otro golpe así como en las comiquitas para recuperar la memoria? No, estaba siendo absurda. La cabeza le estaba comenzando a doler como el demonio y tenía que dejar de pensar, pero era muy difícil cuando en lo único que podía pensar era en la escena de celos que le había montado a Taeyeon. No quería aceptarlo, pero eso es lo que parecía y había sido.

Además a toda esa ensalada de problemas en su cabeza le agregaba el hecho de que su amnesia le estaba haciendo pensar que todo aquel tira y encoge con la morena venía de antes, de ese tiempo perdido en algún lugar de su cerebro y que clamaba por ser encontrado. Aquello que había sentido al estar tan cerca de ella, esa proximidad le llamaba a un hecho que estaba ahí permanentemente, porque cuando miraba a sus ojos, cuando la miraba así se perdía por completo, todo se sentía tan bien y sentía esas ganas de protegerla, de tenerla cerca siempre, nunca dejarla ir.

Se estaba volviendo loca.

-...parece?

Tiffany a miró a Jongwook y el chico la miró a ella, ahí enseguida supo que no había escuchado nada. Absolutamente nada.

-Joder, Tiffany. Eres increíble-murmuró, cansado y tapándose el rostro.

-Lo siento.

-¿Qué?

-¡Lo siento! ¿Está bien?-replicó, desesperada.

-¿Qué ha pasado?-preguntó Jong, cruzándose de brazos,

-Creo que me gusta Taeyeon.

Jongwook la observó detenidamente y parpadeó varios segundos, asimilando aquella respuesta lentamente.

-Bueno...

-¿Bueno? ¡¿Me estás diciendo bueno?! ¡Está mal! ¡Yo me voy a casar aunque no recuerde el motivo y...! Por Dios, esto es increíble...

-Cálmate, Tiffany...si quieres puedes empezar a explicarme qué te hace pensar que está mal que te guste Taeyeon.

-¡Es que no me puede gustar! ¡No puedo sentir esto! ¡No debo porque...Dios santo, me voy a casar!-replicó

-Deberías hablar con Taeyeon-sugirió Jong.

-¡Por supuesto! ¡Como es tan fácil!

Suspiró y se sentó en el mueble, se sentía cansada, frustrada y harta de no recordar nada.

-Sabes que no sé cuando comencé a sentir esto...yo la veo y es como si...como si todo estuviera bien, como si nada importara, pero...no puede y no debe ser así, porque yo me voy a casar y...Alex le gusta ella, yo no puedo hacerle eso a mi hermano, no puedo...

-Entonces... ¿Qué vas a hacer?-preguntó Jongwook.

-Nada. No puedo hacer nada.

-Sí puedes...

-No, no puedo y no insistas más.

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-Casi la beso.

Un gritito muy agudo resonó por toda la casa y Taeyeon tuvo que taparle la boca a Leah para que dejara de chillar como una endemoniada ambulancia.

-¿Qué hizo? ¿Se apartó? Seguro que se apartó, es demasiado lenta y...

-En realidad todo se arruinó cuando María entró y Tiffany se asustó. Salió de la habitación de inmediato y yo no pude decirle nada-explicó, frustrada y sentándose en la cama de Leah.

-Aún me debes la apuesta que hicimos-le recordó Leah.

-¿Cuál? Ya yo cumplí, ¿Acaso no recuerdas antes de la competencia...?

-No, yo te dije que quería que la besaras y...

-¡Y sí lo hice!-replicó Taeyeon.

-¡Tenía que ser en la boca!-protestó Leah-¡No en la mejilla!

-Lo siento, pero no especificaste.

-¡No puedo creer lo lentas que son las dos!-bufó Leah-Lo puedo entender de Tiffany porque siempre ha sido así, pero de ti no.

-¡Hey!-protestó Taeyeon-Más respeto ¿Sí?

-¡Pero es que me desesperan!-chilló Leah, levantándose de la cama-A ver...dime cuántas veces has estado cerca de besarla. ¡OJO! ¡No cuentan esa vez en el club ni ésta vez!

Taeyeon bajó la mirada y trató de esconder una sonrisita, que a pesar de todo Leah notó y enseguida abrió los ojos desmesuradamente, incrédula.

-¡No puedo creerlo! ¡Me estás jodiendo, Taeyeon!-gritó, mientras saltaba encima de la cama.

-¡Haz silencio! ¡Te van a escuchar!-protestó Taeyeon, mirando hacia la puerta.

-¡Es que me es imposible pensarlo...! ¡Tienes que contarme! ¡Suéltalo! ¿Te le aventaste? ¿Cuándo fue? ¡¿Por qué no me lo dijiste?!

-Ni siquiera es como piensas, siempre pensé que sería yo la que...

-¡Mentiraaaaaaaaaaaaa! ¡Me estás mintiendo! ¡No puedo creer que haya sido ella! ¡Me tienes que contar! ¡Cuéntalo!

-¡Cállate, Leah! ¡Deja de ser tan dramática!

-¡No puedo creer que te haya besado!

En ese momento se abrió la puerta bruscamente, dejando paso a una Tiffany ceñuda.

-¿Se puede saber cuál es el escándalo, Leah?-preguntó.

Leah saltó de la cama y lanzándosele encima la abrazó con fuerza, mientras empezaba a gritar y pegar chillidos de loca. Taeyeon se estaba muriendo de la vergüenza.

-¡Ay, Leah! ¡Mi brazo! ¡¿Se puede saber qué demonios te ocurre?!-protestó Tiffany, muy confundida e intentando zafarse del abrazo. Leah por fin la soltó y compuso una cara de absoluta seriedad, mientras tomaba por el rostro a Tiffany y le apretaba las mejillas.

-Hermana, quiero que sepas que te adoro con todo mi corazón y que eso que hiciste fue lo mejor que has hecho en tu vida...

-Leah...

-Silencio, Taeyeon, estoy hablando con Tiffany.

-Pero...

-Tiffany, nunca te lo he dicho pero eres mi hermana favorita-dijo, aun apretando las mejillas de Tiffany.

-Soy t-tu única her-hermana-murmuró Tiffany, adolorida.

-Exactamente.

Leah seguía apretando con más fuerza las mejillas de su hermana, que ya se estaban poniendo rojas, mientras observaba a Tiffany fijamente con una mirada de veneración.

-Ehh...L-Leah, ¿P-podrías, p-por fa...vor sss-soltarme la c-cara? M-me haces daño-farfulló Tiffany, tomando con la mano izquierda las manos de Leah que le lastimaban.

-Oh, sí, lo siento-dijo, soltándola de inmediato. Tiffany se llevó su mano libre hacia las mejillas enrojecidas, haciendo gestos de dolor.

-¿Se puede saber qué es lo que supuestamente hice que te puso así?-preguntó Tiffany, confundida.

-Ah, no te lo puedo decir, pero cuando recuerdes lo sabrás-respondió.

-¿No me lo puedes decir ahora? No creo que se me quite la amnesia por un buen rato-pidió.

-No, ahora tengo que salir con Hyunsuk. Lo siento, Tiffany...

Leah sonrió y tomando su bolso, salió de su habitación. Tiffany miró a Taeyeon, que seguía ahí, inquisitivamente.

-¿Hyunsuk?-preguntó, sin entender. Taeyeon se encogió de hombros y salió también de la habitación.

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-Vaya, vaya, te dignaste a aparecer... ¿Recordaste que tenías reunión conmigo ayer?

-Lo siento, Heechul. Tenía que cuidar de Tiffany-dijo Taeyeon, sentándose en la silla al lado de Heechul.

-¿Cómo está?-preguntó Heechul, leyendo unos papeles.

-Bastante bien, no creo que me necesite mucho en esto de cuidarla...A propósito, tampoco se recuerda de ti.

-¿Qué no se recuerda? ¿Qué quieres decir con qué no se recuerda de mí?-preguntó Heechul, confundido.

-Tiene amnesia. No se recuerda desde el instante que nos conocimos hasta el día que se cayó del caballo-explicó, apesadumbrada.

-¡Vaya! Qué fuerte... ¿Eso quiere decir que te olvidó?

-Sí, eso es lo que quiere decir.

-Bueno, pero ahora sí sabe que quien eres, ¿No? Teniéndote todo el tiempo atrás como su niñera...

-No soy su niñera, Heechul, sólo cuido de ella mientras se recupera del todo; que espero que sea pronto, porque ya me estoy cansando de ésta situación.

-¿Cuál situación?-preguntó Heechul.

-Ninguna, ahora dime cuándo comienzan las grabaciones.

Heechul la miró sonreído y bufó negando con la cabeza.

-Qué rápido cambias de tema. Las grabaciones comienzan pasado mañana, Tae. Eso quiere decir que te quiero temprano aquí, sin discusiones, ni excusas. Se suponía que empezaríamos hace ya 3 días, pero en vista de que tuviste este percance con tu niña favorita...-miró a Taeyeon, alzando las cejas-Lo pospusimos a favor tuyo para el jueves. No te puedes quejar.

-No hay problema.

-Espero que no. Puedes salir, si quieres.

Katya que estaba con Hyunsuk, la iba a esperar en el mirador. Así que bajó hacia el estacionamiento para buscar el auto. Cuando salió por fin de las instalaciones, decidió que iría antes al Starbucks para pedir un café. Una vez ahí, mientras estacionaba, salía del auto y se colocaba los audífonos de su iPod, escuchó una voz de hombre que conocía muy bien.

-Tengo que repetirlo, estás hermosísima hoy.

-Y tú estás muy guapo.

La mujer de cabello castaño y ojos cafés se alzó un poco y le dio un beso en los labios al hombre, quien no era otro sino Nichkhun. Taeyeon se quedó petrificada ante esa imagen, sin saber qué hacer o pensar, Nichkhun parecía encantado con todo aquello cuando se separó de ella y cuando voltearon, Taeyeon tuvo que esconderse detrás de su auto para no ser descubierta mientras vio que entraron al Starbucks. Se enderezó y se recargó de la puerta aún sin poder creer en lo que había visto, sintiendo la rabia y la irritación correr por sus venas.

Tomó su celular y marcando el número de Leah, esperó que atendiera.

-Taeyeon, ¿Ya vienes en camino?

-En realidad no, se me presentó un problema. ¿Podrías pedirle a Hyunsuk que te lleve a la casa?

-¿Qué pasó?-preguntó Leah, preocupándose.

-No es nada importante, Le no te preocupes. Estaré en tu casa más tarde...

-¡Espera, no cuelgues! ¿Te vas a quedar a dormir en mi casa?

Taeyeon tuvo el repentino impulso de decirle que no, pero aún estaba lo de cuidar a Tiffany y ahora con lo que había visto, más que nunca deseaba protegerla, avisarle sobre Nichkhun, pero no sabía si lo haría porque eso probablemente la lastimaría y no quería causarle daño.

-Sí, creo que sí...

-¿Sí o no, Taeyeon?-apremió Leah.

-Sí, sí, sí voy. Me tengo que ir, Le. Dile a Hyunsuk...

-Pero...

-Nos vemos luego-y colgó. Sintiéndose mal por no decirle a Leah de lo de Nickhun, ella era la hermana de Tiffany y también tenía derecho, muy probablemente se pondría histérica y no mediría las consecuencias al decírselo a la pelirroja.

No sabía que iba a hacer, pero algo tenía.

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-La corte solicita tu presencia, cariño.

Tiffany alzó la mirada del libro, confundida. Nichkhun había llegado hacía ya una 1 hora de, según lo que había dicho, hablar con su abogado sobre el caso en contra de Daewon. Lo poco que sabía de lo que había sucedido y que le había dicho Jongwook y Nichkhun era que había estado en una competencia de equitación y que cuando ganó, Ryu Daewon la había golpeado con el bastón haciéndola caer del caballo.

Por supuesto no recordaba nada de eso, ni siquiera la competencia misma.

-¿Para qué? No podré testificar nada, porque tengo amnesia. No recuerdo lo que sucedió-dijo Tiffany, cruzándose de brazos.

-Sí, lo sé, pero es necesario que vayas de todas formas. También tendría que ir Myungsoo para que testifique los daños causados a tu persona y...

-Aún no estoy segura, yo hubiera preferido que del caso se encargara Jong-interrumpió Tiffany, frunciendo el ceño.

-Cariño, tú sabes que él ahora está encargado de tu trabajo pendiente en la empresa y no podrá estar todo el tiempo pendiente del caso-explicó, a la vez que le daba un beso en la cabeza.

-Yo podría manejar muy bien todo lo de la empresa, ya me siento recuperada-refunfuñó, testaruda.

-¿Recuperaste la memoria y te quitaron el cabestrillo?-preguntó él, sonriente y alzando una ceja.

-No, pero...

-Entonces, no seas cabeza dura, Tiffany. Deja que de esto se ocupe mi abogado-replicó Nichkhun, abrazándola y besándola.

El timbre sonó en ese momento y Tiffany se levantó del mueble para abrir. Era Taeyeon, quien al ver a la pelirroja se quedó de piedra, porque no esperaba tener que verla tan rápido. Es más, esperaba que estuviera ya en su habitación, durmiendo posiblemente.

-¿Vas a pasar o te vas a quedar ahí?

-¿Quién es, cariño?-preguntó la voz de Nichkhun, que al parecer ya había llegado y eso le causó a Taeyeon una impotencia y una rabia descomunales, que intentó calmar respirando profundamente y entrando a la casa con absoluta seriedad.

Tiffany a cerró la puerta y Taeyeon miró a Nichkhun, arrellanado cómodamente en el mueble sin sus zapatos.

-Hola, Taeyeon ¿Cómo te fue?-saludó él, con una gran sonrisa.

-Perfectamente genial y supongo que a ti te debe haber ido estupendamente ¿No?-replicó Taeyeon, sarcástica e irritada, pero con una sonrisa para esconder la rabia que sentía.

-Nah...ni tanto, las reuniones son siempre aburridas-respondió, encogiéndose de hombros.

Toda la bronca y la rabia que sentía le bajó y le subió por todo el cuerpo, por un instante se imaginó lanzándose encima de él y cayéndole a golpes con un martillo para quitarle la cara sonriente que tenía. No podía entender como alguien podía ser tan hijo de perra.

Tiffany por su parte, notó que algo estaba pasando con Taeyeon, vio sus manos y notó que las tenía encogidas en un puño y estaba completamente tensa. Algo le debía haber pasado cuando estuvo fuera y quería saber qué era.

Taeyeon miró a Tiffany fijamente y sintió ganas de soltarle toda la verdad sobre Nichkhun enfrente de él, sin importar las consecuencias, pero había algo que la detuvo y que le decía que mejor era no decir nada, que Tiffany por su cuenta debía darse cuenta, pero aún sentía esa voz que le gritaba que la pelirroja tenía que saber la verdad.

-Tiffany, tengo que...yo...no puedo, olvídalo.

-¡Taeyeon! ¡Espera! ¡¿Qué sucede?!-gritó Tiffany, confundida, dispuesta ya a salir corriendo tras de ella por las escaleras, pero Nichkhun la detuvo.

-Cariño, déjala tranquila, debe sentirse mal o algo.

-Pero...ella estaba...

-Vamos, Tiffany...debe ser que algo pasó con su trabajo o qué se yo. Quédate aquí conmigo y déjala que a lo mejor Leah ve lo que le pasa y la ayuda.

Tiffany siguió mirando las escaleras por donde había subido Taeyeon y luego miró a Nichkhun, aún sin entender el comportamiento de la morena.

Se sentó de nuevo en el mueble, mientras Nichkhunl la abrazaba dándole besos por la espalda.

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No sabía qué hacía todavía ahí, quería irse a su casa y hablar con su tío Hyuk, pero no podía irse porque aún tenía que cuidar de Tiffany, aunque sabía que ya la pelirroja podía desenvolverse mejor sola. Ahí estaban todos sus hermanos y María para protegerla, sin embargo ahí se encontraba, en la habitación de huéspedes con ganas de pegarse contra las paredes por ser tan idiota.

"¡Vaya forma de cuidarla y protegerla! Escondiéndole la verdad y encubriendo al patán de Nichkhun".

Intentó respirar profundo para calmarse y se levantó de la cama para ir a ver si ya Tiffany estaba en su habitación y dormida. Esperaba que sí ya que habían pasado 2 horas desde que llegara y formara aquel teatro delante de la pelirroja.

Cuando salió de la habitación vio que todas las luces ya estaban apagadas, menos una en el pasillo que daba hacia las habitaciones de Mike y Noah. Se acercó hacia allá para apagarla, pero cuando iba a presionar el interruptor se encontró con Tiffany de frente.

-Pensé que estarías dormida-dijo Tiffany, mirándola inquisitivamente como si fuera a detectar algún tipo de comportamiento extraño en la morena.

-Lo mismo digo yo-contestó Taeyeon, bajando la mirada-¿Qué hacías por aquí?-preguntó.

-Vine a darle las buenas noches a los chicos.

-Cuando los vi hace un rato ya estaban dormidos-dijo Taeyeon.

-Sí, ya...

Se hizo un silencio tenso entre ambas, que ninguna quería romper, pero Tiffany decidió hacerlo.

-¿Ocurre algo?-preguntó con cautela.

Taeyeon observó fijamente a Tiffany, sintiéndose ahogada de pronto, quería llorar de la rabia que sentía por dentro, porque no sabía cómo decírselo sin molestarla o lastimarla.

-Me siento mal-murmuró Taeyeon, bajando la mirada. Tiffany se acercó un poco y le levantó el rostro por el mentón, obligándola a mirarla.

-¿Deseas contarme?-preguntó, suavemente.

Sin poder controlarse más, se lanzó en brazos de Tiffany para abrazarla. La pelirroja hizo un gesto de dolor al sentir una punzada en el brazo, pero no dijo nada, simplemente le devolvió como pudo el abrazo con una sola mano.

-Quisiera decírtelo...quisiera saber cómo encontrar las palabras para...no quisiera que...esto me da tanta rabia y yo...no sé...

-¿De qué hablas?-preguntó Tiffany, angustiada. Se separó de Taeyeon y la miró fijamente, como intentando buscar la respuesta en sus ojos. Pero sólo encontró que su mejilla era muy suave al acariciarla. Taeyeon miró los labios de Tiffany y ya se iba a acercar más, cuando de pronto se detuvo y negando, se fue de ahí hacia su habitación. Dejando a Tiffany más confundida que nunca y con el corazón latiéndole con fuerza.

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Abrió la puerta y entró sigilosamente, todo estaba oscuro e intentaba no pisar nada. Cuando estuvo frente a la cama, la vio ahí, con los ojos cerrados, algo le decía que no estaba dormida así que se arrodilló enfrente de ella y con la punta de los dedos acarició su rostro desde la frente, pasando por sus ojos, su nariz, sus labios...deteniéndose en estos un poco más y luego bajando hasta su mentón.

En ese momento sintió como se estremeció y abrió los ojos, descubriendo unos penetrantes ojos marrones que la miraban con intensidad. Quiso decir algo, pero de pronto era como hubiera perdido el habla y sintió su corazón palpitar aceleradamente.

-Te amo

Taeyeon abrió de nuevo la boca para decir algo, pero Tiffany ya había cerrado el poco espacio que quedaba y con mucho cuidado la besó. Apenas fue un roce al principio, pero pronto se volvió más intenso y desesperado, pero igual de dulce y tierno, como si la pelirroja buscara no lastimarla y hacer de aquello más duradero, más eterno.

Se inclinó, buscando prolongar y hacer más palpable el contacto del beso que cada vez era más suave y sintió como Taeyeon la tomó por el rostro y la acarició en la mejilla, le estaba pidiendo permiso para profundizar aún más y en ese momento lo supo, lo recordó.

No era nadie más que Taeyeon.