Solo tu puedes salvarme

CAPÍTULO 9

Como habéis sido buenas vais a tener premio aquí tenéis el 9 y por la mañana pondré el 10 aun así estoy un poco triste por la falta de comentarios con vuestros comentarios me ayudáis a seguir escribiendo.

Los personajes no me pertenecen...

POV RICK

Sentí como algo me hacía cosquillas en la nariz intenté apartarlo pero estaba demasiado cansado hasta para mover la mano, abrí lentamente los ojos y me encontré con la causante de mis cosquillas. Kate estaba acostada de lado, estábamos cara a cara y estaba profundamente dormida, me gustaba ver como subía y bajaba su pecho de forma tranquila. Tenía el pelo desordenado y uno de sus rizos era el causante de haberme despertado. Pase mis dedos suavemente por su cara apretándole un mechón y metiéndose detrás de la oreja, y verla así dormida plácidamente fue la cosa más bonita que había visto en mi vida. Se veía tan feliz que no quise despertarla. Me levanté dispuesto para hacerle el desayuno. Me quité la camiseta del pijama para cambiarme y me tiraron los puntos, ese herida que había olvidado durante los dos últimos días, ella provocaba eso en mí hacia que me olvidara de cualquier cosa, podía caerse el techo encima de nosotros y no darme ni cuenta. Me giré y allí estaba Kate mirándome, vi en su mirada alegría sorpresa y miedo, el mismo miedo que sentía yo en este momento de no saber hacia dónde nos dirigíamos pero ilusionado y feliz de poder vivir cada segundo que pase con ella.

-Hey-le saludé.

-Hey-me dijo con una sonrisa que me eclipso y en sus ojos pude ver un atisbo de duda, no podía dejar que pensará y llegara a la conclusión de que había sido un error, así que me acerque a ella y le di un beso suave en su boca, me separé lo justo para ver que esa dudas habían desaparecidos, volvía besarla juntando nuestros labios de forma tentativa, dejando que nuestro labios fueran conociéndose poco a poco, el beso empezó a aumentar y se volvió más apasionado. Kate puso sus brazos alrededor de mi nuca y me atrajo hacia abajo para profundizar más el beso, hice un mal movimiento y los puntos volvieron a tirarme me aleje a la vez que deje escapar un pequeño gemido de dolor.

-¿Estas bien?-preguntó preocupada.

-Si solo es la herida.

-Déjame vértela- se acercó me quitó el apósito que tenía y me hizo volver a gemir al tirar del él para poder despegarlo- esto está infectado Castle ¿Cuánto tiempo hace desde que te lo curaste por última vez?

-Pues desde que me lo curo el paramédico-dije haciendo una mueca.

-Dios Castle esto te lo tienes que curar mínimo una vez al día para que no se te infecte. Donde tienes un botiquín.

-En el baño creo la verdad es que no suelo usarlo.

Se levantó y se dirigió hacia el baño, apareció unos segundos después con todo lo necesario para poderme curar la herida y volver a taparla. Cogió un algodón y alcohol y lo acercó a mi herida.

-Esto puede doler- me digo mientras me aplicaba el algodón sisee un poco por el dolor intente reprimir un gritito- lo siento ya saben los que dicen si duele significa que está funcionando.

-Si claro pues entonces creo que está funcionando- y ella soltó una risita por mi comentario.

-Vale ahora solo tengo que ponerte el apósito de nuevo y estará ya bien.

Me tapó la herida y dejó que sus dedos rodearan la herida como una pequeña caricia que me llegó al alma, le miré a los ojos y con mi mirada esperaba estar diciéndole todo lo que quería decirle aunque no sabía si eso era posible, pero algo le llegó porque me dio una sonrisa de esas que me roban el alma, y se levantó despacio dejando un leve beso en mis labios. No sabía lo que teníamos y estaba claro que íbamos a tener que hablar en algún momento de lo que significaba todo aquello pero en este momento me conformaba con lo que me estaba dando, con lo que los dos en este momento podíamos dar.

Nos arreglamos y decidimos salir a desayunar en un bar cercano no nos queríamos alejar pero necesitamos salir de esas paredes porque si no, no dejaría que saliera de la cama. Bajamos por el ascensor lanzándonos de vez en cuando tímidas miradas, cuando salimos del edifico y tras saludar a los agentes que allí se apostaban nos dirigimos hacia una terraza muy cercana donde podríamos desayunar tranquilos. Nos sentamos el uno junto al otro rozándose nuestras piernas, nos miramos y nos sonreíamos disfrutando de esto nuevo que estábamos viviendo.

El camarero llegó y pedimos nuestro desayuno, un desayuno muy completo con tostadas, huevos revueltos, tortitas zumo y por supuesto café. Compartimos el desayuno entre risas y mucha mucha complicidad. Estábamos tan absortos el uno del otro que no nos dimos cuenta de la presencia de alguien detrás de nosotros hasta que no nos llamaron la atención.

-Hola Rick-dijo María acercándose para saludarnos.

-Hola María ¿Qué tal? -Dije levantándome y dándole dos besos en las mejillas.

Se quedó mirándonos como si supiera que algo había cambiado en la relación entre la detective y yo, como si estuviera en el aire como si cualquiera que supiera mirar supiera que nada importaba a nuestro alrededor cuando estábamos juntos, podía ser porque a pesar de estar María presente no podía dejar de mirar y sonreír a Kate, me era imposible. De repente sonó el móvil de Kate, y se levantó disculpándose para ir a recoger la llamada. Nos quedamos María y yo solos y le invite a sentarse y pidió un café y empezamos a entablar una conversación sin ninguna sustancia, hasta que realizó la pregunta que desde que llegó le estaba rondando la cabeza.

-¿Te gusta verdad?

-¿Qué?-dijo haciéndome un poco el tonto.

-La detective te gusta Rick y a ella también le gustas solo hay que mirarle como te mira.

-Es extraordinaria como no iba a gustarme.

-Se nota que te gusta y no como a las demás me alegro mucho por ti de verdad- se levantó sonriendo y me dio un abrazo se incorporó me dio un beso en la mejilla y me dijo al oído-cuídala Rick puede ser la definitiva.

Se largó de la misma forma que había venido sin apenas darnos cuenta de su presencia, pero esas últimas palabras que me dijo me dejaron pensando, nunca había pensado pasar el resto de mi vida con nadie a pesar de todo lo que había vivido con las otras mujeres con las que había estado no sabía cuánto iba a durar pero sabía que no era para siempre, siempre pensé que no era el tipo de para siempre pero ahora mismo mientras la miraba como se acercaba y me sonreía lo supe ella era la mujer con la que quería pasar el resto de mi vida.

POV ASESINO

Allí estaba tan tranquilo rodeado de chicas como siempre, era un playboy que utilizaba a todas las chicas y luego las tiraba después de usarla, tenía que aprender a tratar a las mujeres, tenía que acabar con él y ya había decidido el momento y el lugar iba a hacerlo sufrir, hasta la muerte.

Cualquier crítica o comentario es muy bien recibido.

XXOO

Twitter: @Tamyalways