Viajábamos en una especie de túnel, parecía película de ciencia ficción pues parecía que pasábamos por el espacio solo que si había aire. Gracias a dios Dinah no me soltaba, sus dedos parecían estar casi abrochados con los míos, no sería buena idea soltarnos para nada.
Mira, estamos cerca -susurró Dinah señalando un especie de rectángulo negro que se hacía grande rápidamente, a pesar de que no podía distinguir si nos encontrábamos en movimiento al menos sabía que flotábamos- ¡ahí viene el gran golpe! -me jaló a ella, abrazándome para protegerme de una caída, y cerré los ojos esperando, pero en mi pie, que de manera rara estaba descalzo de nuevo, era como si el traje que traía puesto hubiera desaparecido, seguramente estábamos de nuevo en pijama. Sentí algo demasiado cómodo para ser el suelo, nos hallábamos de nuevo en la cama- Normani... -susurró Dinah abrazándome, yo me abracé de ella lo más fuerte que pude- creo que esto ya acabó, no hay ruido, ni ningún monstruo... ¡estamos en la cama de Beyoncé con sus fluidos vaginales de nuevo! -habló feliz mientras sostenía mi rostro con una amplia sonrisa sobre sus labios antes de que se pusiera a besar mi rostro varias veces hasta llegar a mis labios.
Al fin... -susurré siguiendo el beso, tomando sus suaves mejillas entre mis manos- ¡al fin podremos dormir tranquilas!
¡Eso creen ustedes! -se escucho una risa algo cerca de nosotros, la propietaria de la voz, la niña hacía acto de presencia y la luz del baño se prendía- son buenas escondiéndose -su voz se escuchó más cerca, como si estuviera debajo de la cama, había poca luz pero Dinah cerraba los ojos con fuerza.
Pe-pero ganamos -habló Dinah.
¡Cállense! -la voz de la niña parecía mezclada con una voz monstruosa de fondo la apareció inundando la habitación en un eco. Esta voz nos había dejado completamente heladas, pues parecía como la de un señor con voz ronca y dura. la cama se empezó a mover de un lado a otro- No hablen, no griten, que su peor pesadilla puede hacerse realidad -la voz grave aumentaba mientras la risa de la niña resonaba por todos lados, cerrar los ojos y rezar era lo único que podíamos hacer- ¿Creen que me gusta perder? son las tres de la mañana, nunca pierdo a las tres con treinta y tres, la hora del diablo -la cama fue a dar contra la pared, no sé como Dinah se las arregló para sujetarnos bien con la cabecera y así no salimos volando- ¡deberían estar dormidas!
¡Estaríamos dormidas si nos dejarán dormir! -grité desesperada.
Dinah, cariño, ¿Recuerdas esta hora? -una chica con ojeras enormes apareció detrás de Dinah, Di abrió los ojos como platos muy sorprendida- yo sé que si lo recuerdas, veintiuno de abril, hace casi seis años -solo se escuchó como Dinah tragaba saliva y apretaba mis manos
Di-Dinah, ¿qu-qué esta pa-pasando? -tartamudee tratando de no ver a la chica, pues no se le veían los ojos y que haya aparecido una chica en la habitación con una clase de bata blanca y piel más pálida que la de un muerto a las tres de la mañana no era lo más bonito del mundo, era aterrador.
Langi, por favor vete -Dinah habló, tratando de sonar seria pero sus ojos empezaban a llenarse de lágrimas.
¿Porqué quieres que me vaya? Dinah... ¡Ni siquiera me haz saludado! -una mano de la chica toco el brazo de Dinah, estaba ensangrentada entre los dedos, ¿Quién habrá sido esta chica?
Vete por favor, Dinah no quiere verte -traté de defender a mi chica, pero esa "Langi" la jaló hacía ella, como si quisiera que la mirará.
Anda, háblale de mi a tu nueva novia -se cruzó de brazos y yo también lo hice, más confundida que un bebé conociendo al gemelo de su papá.
Eh, yo... uhm, Normani ella es Langi -Dinah sonrío de manera incómoda.
Eso me enteré, mencionaste su nombre hace rato- arqueé mi ceja mirándola, ella no dejaba de jugar con sus manos, viéndonos a las dos.
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HAUNTED
FanfictionDinah y Normani consiguen un descuento para ir a un hotel en donde suele hospedarse Beyoncé. ¿Pero qué pasará cuando descubran que su habitación está encantada?