Que no te de miedo enamorarte.

Capitulo 2.

Y de nuevo otra vez lunes,me puse mi uniforme y me solte mi larga melena rubia,llevava tantísimo tiempo sin dejarmela suelta...y a clase deprisa y corriendo porque si no llegaba tarde,y me esperaria una gran regañina de la maestra.

Al llegar,ahí estaba Laura,con su pelo largo castaño suelto y peinado con todo detalle,tenia una mirada de enfado.

-¡Tia! ¿Donde te metiste el sábado en la disco?Te estuve buscando por todas partes...

-Ah pues...estuve bailando con Victor y alas 2 me fui para casa.

-¿Victor?¡El kinki!No puede ser...¡Pero que hace una chica con tanta categoría como tu con un chico de esa clase!¿Os abeis enrollado?

-¡Para el carro máquina!No me e enrollado con el...pero...me gusta tía no se...ya sabes que yo no miro de la clase que sea como tu...no importa donde viva,o el dinero que tenga si es rico por dentro.

-Oh vamos Clara,me pones enferma...

Me senté en mi mesa,fingiendo estar atendiendo,en realidad estaba en una pompa pensando en ver a Víctor...Aunque tengo su número...¿Debería llamarle?

De pronto,la profesora se dio cuenta de que no estaba atendiendo,y dio un golpe en mi mesa,menudo susto me a pegado.

VICTOR:

Cada día me cansa mas mi vida,siempre lo mismo,no me sale ni un curro,todo el día tirado en la cama dibujando o perdiendo el tiempo.Que triste,con 19 años que tengo y desaprobechando mi juventud alo tonto...

Empezé a escuchar voces en el salón,y ahi estaba...marcelo con sus cervezas de mas con ganas de bronca.

-¡Perra estúpida,siempre te digo que cuando llege yo alas 16:30 del bar,quiero la comida en la mesa!¿Es tan complicado de entender?

Mi madre acobardada,lo único que hacía la pobre era pedir disculpas,ya que Marcelo la asustaba por sus brutales palizas,cuando de pronto escuche una bofetada sali corriendo de mi habitación,y me encontré ami madre tirada en el suelo llorando y a Marcelo saliendo por la puerta para volverse al bar.

-Mamá...Otra vez...¿Hasta cuando vas a seguir aguantando esto?

-Él cambiara Víctor,no pasa nada.

-Mamá,sabes que eso no pasara,me dijiste lo mismo ayer,y antes de ayer,y hace un mes,y hace tres años cuando empezo todo igual...solo te aviso,que como te vuelva a poner la mano encima yo...

-Tu no aras nada Victor,dejalo estar.

Y se fue asu cuarto con la mano de Marcelo marcada en su delicada cara.Y marcelo en el bar,me tocara recogerle como todas las noches en el rellano,porque es incapaz de subir un solo peldaño de las escaleras,soportando su mal aliento a vino y sus vómitos.