Intérprete:
Si fuera más guapa y un poco más lista, si fuera especial si fuera de revista tendría el valor, de cruzar el vagón y preguntarte ¿Quién eres...?"
Los nervios la invadían cada vez que miraba a aquel chico de ojos olivo subir al tren, todo comenzó un Lunes del año 2004, (T/N) era una hermosa joven de ojos (C/c), tenía una belleza muy peculiar en aquellos rumbos, pretendientes jamás le faltaron sin embargo la chica nunca le entregó su corazón a ningun hombre hasta ahora... aquel moreno le sacaba mil suspiros y estaba dispuesta a darle una oportunidad si así él lo quería...
"Te sientas enfrente y no te imaginas que llevo por ti mi falda más bonita, y al verte lanzar un bostezo al cristal se inundan mis pupilas"
Sin embarago tenía un defecto, un pequeño gran defecto, (T/N) era demasiado tímida y nunca se atrevió a hablarle a aquel chico, de vez en cuando lo miraba mientras leía el diario matutino, sus ojos olivo la hipnotizaban cada día más
"De pronto me miras, te miro y suspiras yo cierro los ojos tu apartas la vista apenas respiro me hago pequeñita y me pongo a temblar"
La primera vez que cruzaron miradas hubo una conexión especial. Desde ese instante supo que ese chico era el hombre con el que quería pasar el resto de su vida, pero temía que él no pensara lo mismo. "Ojos olivo" lo había apodado al no poder descubrir su nombre. La segunda vez que cruzaron miradas el chico no fue capaz de sostenerla lo cual entristeció mucho a (T/N)
"Y así pasan los días de lunes a viernes como las golondrinas del poema de bequer de estación a estación, frente tú y yo. Ahí viene el silencio..."
Todos los días era lo mismo. El momento duraba tan solo quince minutos ya que el joven se bajaba pocas estaciones después de abordar el tren, (T/N) simplemente se quedaba ahí sumergida en sus pensamientos mientras se dedicaba a escribir sobre él en su libreta
"De pronto me miras, te miro y suspiras yo cierro los ojos tu apartas la vista apenas respiro me hago pequeñita y me pongo a temblar... Entonces ocurre, despiertan mis labios pronuncian tu nombre tartamudeando supongo que piensas que chica más tonta y me quiero morir"
Lo sabía, lo supo aquella mañana del once de Marzo, el chico contemplaba el exterior cuando ella lo pronunció en voz baja lo suficientemente claro para que solo él lo escuchara.
—A-Antonio...
El mencionado sorprendido pasó su mirada de la ventana a los ojos de la chica totalmente sonrojada "Es el fin" pensó ella "De seguro me ha de tomar por una idiota ridícula" Antonio seguía mirándola como si estuviera a punto de decirle algo, ella simplemente tomó su libreta y se dirigió a la salida del tren.
"Pero el tiempo se para, te acercas diciendo -Yo no te conozco y ya te echaba de menos, cada mañana rechazo el directo y elijo este tren..."
—¡A-aguarda (T/N)!—Se detuvo al escuchar su nombre de los labios de su amado, este colocó una mano sobre su hombro mientras ella giraba lentamente, de cerca era mucho más atractivo —Yo...
—¿Cómo supiste mi nombre?—preguntó aún nerviosa
—Y tú, ¿Cómo supiste el mío?
Sonrió, ahora ambos estaban a mano
—Mucho gusto (T/N)
—El gusto es mío, Antonio
"Y ya estamos llegando mi vida ha cambiado un día especial este 11 de Marzo. Me tomas la mano, llegamos a un túnel que apaga la luz..."
El universo estaba a su favor, ambos habían sentido aquella conexión desde la primera vez que sus miradas se encontraron, ambos se habían enamorado uno del otro, un gran silencio se hizo presente, el tren repentinamente colapsó debido a una gran explosión. Los gritos invadieron aquel lugar, (T/N) y Antonio sufrieron las consecuencias de aquel suceso
"Te encuentro la cara gracias a mis manos, me vuelvo paciente y te beso en los labios. Dices que me quieres y yo te regalo el último soplo de mi corazón..."
—¡Antonio!—la chica estaba gravemente lastimada, buscó al español entre un montón de cadáveres, no pasó mucho para que lo encontrara, tendido en el suelo, la explosión le había dañado el oído además de que había alcanzado parte de su estómago—Antonio...
—(T/N)...—Susurró este, la chica trató de controlar las lágrimas, Antonio la vio caer inesperadamente, se arrastró como pudo hasta alcanzarla y tomarla en sus brazos —Tanto tiempo he esperado... Me alegra saber que al menos pude conocerte
—No... no hables así—respiraba agitadamente
—Me temo que este es el final
—No, Antonio... yo te...—poco a poco el brillo en los ojos de (T/N) se fue apagando hasta quedar sin vida, Antonio lloró, depositó un pequeño beso en sus labios que expresaba todo lo que sentía por ella
—Yo también te amo...—susurró para despues dejarse caer a su lado...
N/A: Basada en una historia real, escrita en el diario de una pasajera donde la nota estaba sin terminar, lo que da a entender que ese mismo jueves estaba escribiendo esa entrada en su diario. La pasajera fue una víctima más del atentado en donde fallecieron 192 personas.
