1. Ser maestra.

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Estado: Concluido.

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Quizás no debería comenzar escribiendo acerca de algo que ya hice, pero como estaba en mi lista yo creo que merece estar en su puesto original. 


Como todos sabemos, probablemente esta no es la profesión más atractiva para todo el mundo por tres sencillas razones:

1. Bajos salarios.

2. Trato con los niños (en algunos casos).

3. Trabajo para la casa.

Si se les ocurre alguna otra opción, por favor, háganme la saber y la añadiré con créditos incluidos a este capítulo. El único requisito es que la razón que me coloquen sea coherente, porque no voy a colocar una que diga: "Estar de pie por mucho tiempo". Lol.

Por otro lado, a pesar de lo que nosotros creamos y que tengamos nuestros gustos definidos, tenemos que tener presentes algunos beneficios de ser maestro, a parte de la experiencia que ganaría siéndolo y por no ser del montón que decidió que no le gustaba antes de probarlo (no estoy diciendo que eso esté mal, es solo que esto es algo muy fácil de comprobar en comparación con la mayoría de las profesiones.

Las personas que ejercen la tarea de ser profesor son tan sagrados, que en Japón ellos son los únicos que no tienen que inclinar la cabeza en modo de reverencia ante el emperador, ya que sin ellos no existiría un emperador. En la mayoría de los países no son símbolos de respeto, pero aún así ellos aman su trabajo; increíble, ¿No?

Ser estudiante no es fácil, y entiendo el hecho de que muchas personas detestan tener que estudiar -por lo menos antes de ingresar a la universidad- algo que no les interesa. También entiendo que sí existen profesores que se enorgullecen de reprobar a todos sus alumnos, pero eso no quiere decir que sea la mayoría, como tampoco eso quiere decir que toda la tarea que mandan es para hacerlos sufrir. De hecho, yo siempre amaré mi colegio -al igual que todos los que estudiamos ahí-, y gracias a ellos logré entrar en la mejor universidad de mi país (¿O del mundo?). Aprendí acerca de muchísimas cosas que amo en estos momentos (excepto los números, a esos no los amo, ni los aprendí), y no está de más decir que pasé los mejores años de mi vida allí.

Y fue gracias a ese amor que tuve por mi colegio que logré ser maestra... O por lo menos lo fui durante un mes.


Yo me había graduado en julio, e ingresaría a la universidad en diciembre; sin embargo, un día de septiembre, cuando a penas habían comenzado las clases, me pasé por ahí con unos amigos, teníamos que buscar papeles importantes y jactarnos por ahí de que éramos ex-alumnos.

En un momento nos quedamos hablando en unas mesas de concreto que estaban en el patio, hasta que se nos acercó la directora y empezamos a bromear acerca de que estábamos allí para hacer de profesores suplentes de Literatura -porque la profesora estaba de reposo-, hasta que ella nos dijo:

—Bueno, si quieren ser profesores, estamos buscando suplentes para dar Inglés en kindergarden. Acérquense a la oficina de la coordinadora del departamento y hablen con ella.

Luego se fue y seguimos bromeando, pero la verdad era que yo sí quería ser profesora suplente. Quiero decir, ¿Qué tan cool es tener la suficiente experiencia en algo como para ser profesor cuando tienes la misma edad que los alumnos de último año? Nada. Así que se lo comenté a mi madre, y ella me dijo que fuera el día siguiente y que lo intentara.

Pero yo no era la única que quería el cargo.

Esa misma noche recibí un mensaje de texto de uno de los chicos que se encontraban conmigo ese día.


"Hey, ¿Cómo estás?"

"Excelente, ¿Y tú?"

"Bien. Te escribía para saber si de verdad ibas pendiente de aceptar el cargo de maestra de inglés..."

"Sí, ¿Por qué?"

"Porque yo también quiero... Pero vamos a ir mañana a hablar con la jefa del departamento a ver que nos dice, capaz nos acepta a los dos".

"Mmmm, está bien".


Y, efectivamente, ella nos aceptó a los dos.

Debo decir que era una experiencia genial, sobre todo porque yo adoro la inocencia y bondad de los niños (aunque habían unos que más allá de todo eso, realmente tenían muy mal comportamiento), y lo felices que se ponían cuando nosotros, sus profesores más jóvenes, llegaban al salón. Y lo mucho que lloraron cuando les dimos la última clase.

Abajo colocaré algunos anexos de las preguntas y situaciones raras que hicieron los niños, por si lo quieren leer.

Por último quiero decir que el patrono universal de los maestros es San Juan Bautista de La Salle, ya que él fue el que revolucionó la técnica de dar clases, en la cual los maestros le daban clases a cada alumno uno por uno, convirtiéndola en que un maestro le de clases a 40 alumnos en un salón. A parte de otros métodos como que los salones deben de tener ventanas a la izquierda y no a la derecha, los colores de las paredes, entre otras. Y yo tengo la felicidad de poder decir que estudié en uno de los colegios fundados por él.

Sin nada más que agregar -a parte de los anexos-, me despido dándoles las gracias por leer esto.


"No te dejes aminalar por las penas y dificultades, la vida está llena de ellas". —San Juan Bautista de La Salle.


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ANEXOS.

Preguntas frecuentes de los niños:

1. "¿Ustedes están casados?".

2. "¿Son novios?".

3. "¿Tienen hijos?".

4. "¿Por qué sus hijos no estudian con nosotros?" (cabe destacar que él y yo solo teníamos 18 años en ese momento).

5. "Maestra, ¿Estás embarazada?" - ¿Te parece que estoy embarazada? - "Mmmm... No" - ¿Entonces?

6. "¿Puedo jugar?".

7. "¿Me ayudas a colorear?".

8. Niño: "Maestra, no entiendo nada de la letra A". Yo: "Santiago, estamos viendo la letra D". Él: "Ah... Maestra, no entiendo nada de la letra D". *repítase esto con todas las letras*

9. "¡Maestra, él me pegó!" - "¡Claro que no! Él me escupió y tuve que pegarle".

10. ¿Puedo comer?.

11. "Maestra, ¿Es verdad que las personas que terminamos de primeras somos mejores que los demás y por eso nos pones calcomanías (pegatinas)?". 

12. "¿Nos van a invitar a su boda?".

13. *susurrando* "¿Ustedes se dan besitos?".

14. "¿Viven juntos?".

15. "¿Dónde aprendieron inglés?".

16. "Si ya se inglés, ¿Tengo que hacer la tarea de todos modos?".

17. "¿Qué quieren ser ustedes cuando sean grandes?".


100 Cosas por Hacer antes de MorirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora