Estoy totalmente lista para enfrentar esta gran aventura. Mi madre se cree que yo no puedo cuidarme, yo ya no soy una mocosa. Ella piensa que tengo cinco años cuando tengo diecisiete.
—¿Todo listo Andreita?—pregunto Mamá. Ella sabe que me enojo cuando me dice así, lo hace para verme molesta. ¡No soy una niña! ¡Por Dios! ¿Cuando entenderán eso?
—Sí.
Baje con mis maletas y las subí al auto. Fui a la cocina y por una china. Me da un poco de pena estar sin mi habitación y sin celular por un mes. Esto va a parecer un año. Pobre de mí.
—¿Nos vamos?—pregunta Mamá.
—Claro, se nos hace tarde—contesté.
Me metí al auto y en mi estómago se sentían mariposas. Estoy mas nerviosa que nada, pero no quiero demostrarlo.
—Veremos a ver si en verdad tienes el potencial para quedarte viviendo en Londres —dijo. A ella no le da ni un poco de pena que me valla. Que clase madre tengo.
Llegamos a donde están los botes. Me iba a ir a una pequeña isla muy lejos. Allá veré que voy a comer.
—Bueno dame un beso y un abrazo—dijo Mamá y me beso la mejilla acompañado de un abrazo. —Te me cuidas.
Ahora se me viene a decir que me cuide, cuando me manda a una isla sola y sin comida. Que hipócrita.Subí al bote con mis maletas y me senté. El bote comenzó a despegar y Mamá seguía mirándome, hasta que ya lo que veía era un punto de lo lejos que estaba.
Okay, Andrea Brook prepárate.
—Señorita, ¿Qué la trae a esta isla?—preguntó un señor mayor. Ahora viene este entrometido para donde mi.
—Es una prueba de sobre vivencia—dije alzando los hombros.
—Tenga mucho cuidado, es menor y en esa isla hay monos y culebras venenosas.—
Al decir eso comencé a temblar. No quiero morir sin ir a Londres. ¡No! Viejo idiota que viene a asustarme.
Trague saliva y mire al mar tratando de relajarme. Tengo todo el día de hoy para hacer una pequeña casa de hojas supongo. Por suerte traje mi botiquín de primeros auxilios, cuchilla, un encendedor y cosas pequeñas de comer. Lo demás lo tendré que conseguir en esa isla.
Llegamos y la isla estaba sin ninguna persona. —Bienvenida a la isla Püma—dijo el mismo hombre que me había hablado antes. No le respondí y me baje del bote. Los hombres del bote bajaron a buscar unos cocos, me daba un poco de miedo que estuvieran ahí, no quiero que me hagan daño, soy la única chica aquí.
Los hombres se montaron nuevamente en el bote y se fueron lentamente. Pensé en pararlos, pero tenía que tener las bolas para quedarme. Bueno no tengo bolas porque soy mujer, pero como sea.
Ahora estoy sola, es hora de buscar un lugar donde pueda dormir antes de que caiga la noche. Me metí adentro de la isla y solo veía árboles, no paraba de mirar el suelo. No quiero encontrarme con una enorme cobra. Miré a todos lugares y de lejos veo algo de madera. Voy directo a donde esta eso. Puede ser de ayuda para mí. Voy pasando los árboles y wow. Voy a llorar de emoción.
¿Quien carajos hizo esto?
Era una enorme casa de madera en el árbol. No me importa si hay alguien o si es de alguien. Me meto dentro de la casita y todavía sigo sin creerlo.
No, no, no...
Este es mi puto día de suerte. Tiene de todo, desde una cama enorme, nevera, asientos, televisión y baño. Aquí me quedo, definitivamente aquí me quedo.
Dejé mi maleta al lado de la cama y voy a la ventana. Se veía la mayoría de la isla. Se veía el lago, árboles con hermosas flores y el cielo tan azul que me hace suspirar. Nunca pensé que terminaría en una isla a los diecisiete, pero aquí estoy.
Fui a ver si había algo de comer en la nevera. No paro de comer, pronto salgo rodando por la puerta. Abrí y estaba llena de cosas chatarras. No había comida para desayunar, almorzar y cenar. Solo había cosas para merendar, refrescos y botellas de agua. Abrí el refrigerador y me encontré con Helado de chocolate, mi favorito y otros tipos de helado y hielo.
Me senté con el pote de helado y una cuchara, prendí la televisión y busqué los canales que habían, por suerte estaba el que me gusta.
Esto si es vida, sin escuchar a mi madre, en una relajante isla y un pote de helado. Pareciera como si hubiesen mandado a hacerme esta casa. ¿Quién la habrá hecho? ¿Será de alguien? Sea de quien sea aquí me quedaré, además no hay rastros de persona aquí.
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That summer feeling
RomanceEstar en una isla sola no esta nada fácil. Andrea solo lo hace para probarle a su madre que ella se puede mantener sola y así la dejen ir a estudiar en el lugar de sus sueños Londres, pero la madre tendrá un propósito para todo esto. Los invito a le...