Bipolar

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Me levanté con calor y Andrés seguía durmiendo. No puedo negar que dormí muy bien. Me encantó la compañía de él. Aproveché y salí a buscar algo de comer. El día estaba hermoso, los pájaros silbaban, el sol brillaba hasta mas no poder. ¿Que mas podía pedir?

Camine un poco hasta encontrar bananas. Aunque sea podemos desayunar algo.

Llegué a donde estaba Andrés durmiendo y comencé a comer la fruta.

-¿Qué comes?-pregunta Andrés provocandome un susto.

-Bananas, toma-dije dándole las bananas.

-No quiero-dijo en tono seco.

¿Y a este que le picó ahora?

-¿Que te pasa?-pregunte.

-Pasa que dormí horrible y hoy no estoy para andar siguiendote el juego.

Juro que él es bipolar.  Yo no le he hecho nada. Lo juro.

-¿Sabes qué? No me importa si dormistes bien o mal, lo único que te voy a decir es que conmigo no te pongas con esos humores porque no te e hecho nada-dije. No aguantaba más, este idiota me dan ganas de darle en la cara. Un día está bien y otro mal, no soporto esas niñerías.

Contesto algo que no logré oír porque me estaba alejando, pero le respondí sacándole el dedo del medio. No me iba a quedar de brazos cruzados con el idiota ese.
Salí a caminar y poder recibir un poco de aire fresco. Camine mucho de hecho y en realidad no sabia donde estaba, solo quiero encontrar la casita y poder tomar un poco de café. Caminé, caminé y caminé, no encontraba la casita. Me senté en el suelo porque no podía seguir caminando.

Este imbécil me dañó la mañana. Por su culpa estoy perdida, por culpa del feo ese.

-¿Qué hago ahora?-dije para mis adentros.

Me levanto del piso ya que sentada nunca encontraría la casita y volví a caminar. Pase unos cinco árboles y de lejos pude ver la casa. Mis ojos vieron gloria, lo juro. Voy corriendo y entro. Me tiro al suelo y comienzo a besarlo. ¡Esto es vida!

-Que bueno que te encontré mi amor-dije. Esta felicidad que tengo ahora mismo nadie me la quita

Andrés no estaba, creo que todavía sigue buscando la casa. Que bueno, eso le pasa por idiota. Cuando llegue quiero hacerle una broma para que no vuelva a joder conmigo.

(...)

Me levanto de la cama feliz. No se porqué. Dormí un rato y me hizo muy bien. Salgo a la sala y veo a Andrés viendo televisión. Es hora de mi venganza. Quiero darle en la cabeza, pero no sé con qué.

Busqué en la cocina y vi un sartén, le voy a dar suave en la cabeza y cuando corra para donde mi enojado se va a caer porque le voy a hechar mantequilla al suelo.

Buajaja, la venganza es dulce mi querido amigo.

Puse mucha mantequilla en el suelo. Tengo suerte que había en la nevera. Comencé a caminar lento con el sartén y le doy en la cabeza, pero no tan duro. Comienzo a correr y los pies se me resbalan y me caigo de nalgas y siento otro ruido mas y sé que Andrés también se cayó.

¡Yes! Misión cumplida. Aunque por culpa de la mantequilla también me caí, pero pude ver a Andrés como un idiota en el suelo.

-Eres una idiota-dijo Andrés en el suelo. Yo me levanté y le tiré un beso, lo que hace que se enfuresca mas.

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Perdón!!! Esta corto lo sé, pero quería pasar un capi porque me estoy tardando mucho...  Pero el próxima será mas largo!

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⏰ Última actualización: Feb 23, 2017 ⏰

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