Nur ein Wort ─ 〔Erik Durm〕

SEIS

Creo que uno de mis defectos es dejar los temas pasar. En este caso, no lo dejé pasar solo una semana, sino creo que hasta a más de un mes. Me encontraba más concentrado en las prácticas para los partidos locales.

Nuestro equipo de fútbol, los Schwarzgelben (1), estaba desempeñando un buen papel en los equipos escolares del estado y no queríamos estropear esa racha. Nuestro míticos rivales, Die Roten (2) se encontraban a 5 puntos por debajo de nosotros y era histórico porque ellos eran los referentes para las ligas estatales, e incluso hubo un tiempo en donde llegaron a las nacionales. Nosotros no podíamos decir lo mismo y queríamos hacer historia.

Así que, se puede decir que todo lo que conocíamos en la escuela cambió radicalmente.

En cuanto a Matze, aunque él y yo somos de la misma sección, apenas lo veía en el receso. Ni qué decir a la hora de salida, cada uno iba por su lado.

Mi equipo me llamaba para que me sentara en su mesa, eso también significaba que Emma y yo no comiéramos juntos el refrigerio en las gradas, donde todos los cambios empezaron.

Era como una especie de división de todo lo que conocía de la secundaria. Nos alejamos. ¿Era como Troy Bolton en High School Musical 2? Eh, sí, si quieren colocar ese ejemplo...raro, pero exacto.

Dios, a las medias hermanas de Emma les encantaban esas películas. We're all in this together, decían.

Emma...Ella efectivamente está saliendo con Alexandre. Y los descubrí apenas el sábado.

flashback

Llegué a la fiesta que organizaba Ann-Kathrin Brömmel en su lujosa residencia. Oh, cierto, también tengo que mencionar que Mario está empezando a tratarme bien a diferencia de que no me trataba para nada, o sea, me ignoraba.

- ¡Erik! -volteé para encontrarme con mi pareja de laboratorio, de almuerzo, de algunas clases y al parecer de próximamente todo, Tessa.

- Hey, hola. Tess. ¿Cómo estás? Linda vestido, lindo fiesta. Ehm. -le hablé de una manera torpe.

Mi vida sentimental era confusa, perdónenme, ahora se los explico:

En la última semana, Tessa y yo nos hicimos más cercanos. Disfrutábamos una buena conversación sobre deportes de invierno y sobre Queen, cuyas canciones escuchaba para sus sesiones de shopping con sus amigas y que era "terapéutico", por cierto.

Aparte, la gente puede percibirla como una "frívola fashionista", término que ella misma empleó para explicarme ese fenómeno cuando la gente la conoce solo a primera vista, pero en realidad es muy inteligente. Tal vez puede obsesionarse con las cosas, pero es inteligente.

Mi madre quedó fascinada cuando intercambiaron ideas sobre decoración de interiores. Sí, la gurú de decoración, dos veces portada de la revista ¡Hola!, quedó fascinada por las ideas de una adolescente de 16 años. Y sí, Tess llegó a mi casa para organizar el proyecto de mitad de año en Literatura, otra larga historia.

A lo que iba, poco a poco yo también quedaba fascinado con ella. Es dulce cuando la llegas a conocer a fondo... No tan dulce como Emma, claro está. Cada persona tiene su nivel de dulzura, supongo. Pero Tessa Berkeley posee un carisma digno de una personalidad magnetizante. Ya veo por qué siendo de grados inferiores fue elegida como integrante del Consejo Estudiantil, es brillante.

- Erik, me vas a hacer sonrojar por tanto que me miras. -rió levemente. De vuelta a la realidad. Qué vergüenza, Durm.

- Lo siento. -susurré. Ella soltó otra pequeña risa.

- No te preocupes. Es más, a ti se te ve más lindo sonrojado que a mí. -Oh, vaya. Estúpida típica característica física. Estúpido de cara enrojecida- Yo... me preguntaba si querías bailar conmigo. La pista de baile está algo sola y Trina, -como suelen llamar a Ann-Kahtrin-, sabe que disfruto bailar con las mezclas de ese DJ que siempre contrata.

Pestañeé varias veces ante la propuesta. ¿Bailar? ¿Yo? ¿En esta economía?

- Claro, no veo por qué no. -a veces me odio.

Tessa asintió feliz y me tomó de la mano para dirigirnos hacia la mencionada pista.

DJ Sync era el discjockey más requerido del momento en el estado, entonces tenía que mezclar otra canción del momento: Blame de Calvin Harris.

Tessa bailaba al compás de la música y yo trataba de seguirle el ritmo, y tomando distancia, por si le pisaba. Era un momento crucial. Me acordé de Emma y sus clases de Baile Moderno, me relajé y empecé a bailar lo mejor que pude, hasta que dirigí mi mirada hacia las grandes ventanas que daban una gran vista al patio de atrás... Mala idea.

Emma Novin y Alexandre Koenig se encontraban parados cerca a la piscina. Koenig estaba peligrosamente cerca del rostro de mi mejor amiga y sucedió lo que temía que pasara... la besó.

También noté que cerca de ellos estaban los amigos de reputación dudosa de Koenig. Esto no me gusta para nada.

Tampoco había notado que paré de bailar, por lo que Tessa me miró preocupada.

- Erik, ¿te encuentras bien? -escuché eso como si fuera un eco. Vaya que esa imagen me afectó, no estaba preparado.

- Sí, sí, me siento...bien. -apenas le pude responder, pero le dirigí una sonrisa para que se tranquilizara- Creo que es mejor que vaya por una bebida. Luego te veo. -dije esto para irme. Sin embargo, Tessa me sostiene del brazo antes retirarme. Ambos nos miramos momentáneamente a los ojos sin decir nada. Yo realmente vi esos ojos marrones preocupados y solo atinté a darle un beso en la frente. Ella cerró los ojos.

- Está bien, te espero. -respondió, entre feliz y desanimada. Creo que esperaba un beso también.

Salí en dirección hacia la barra, -con y sin bebidas alcohólicas, el *underage drinking* es lamentablemente común aquí-, espero que no se haya percatado de lo que pasó entre Emma y Koenig.

Esa noche terminó y empezó algo.

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(1) Uno de los apodos del Borussia Dortmund.

(2) Uno de los apodos del Bayern München.

*underage drinking*: Es el consumo de alcohol en menores de edad y que es ilegal, pero igualmente lo hacen.

N/A: Esta etapa de la historia se desarrolla en el año 2014. Por eso la elección de esa canción, jaja.