Seres Celestiales

16 1 0
                                    

Entre los movimientos ágiles del tiempo y del espacio, su hoz posaba delante de los ojos de aquel que no tenía alma,ni corazón, decidido a acabar la vida de quien intento acabar la suya hace unos momentos. Entre el ajetreo que habría de suceder,y entre los surcos de la luz en frente del portal, aquel que no poseía más que un incorpóreo cuerpo, sin alma y sin corazón, decidido a finalizar con una vida, tenía en sus manos - directamente apoyadas- lo que era la arma más letal conocida , un arma, que con solo palabras podía hacer y deshacer, un arma, tan poderosa como el mismo silencio, como el mismo canto de las nubes, como los sonidos de los rayos al caer a la superficie , de todo lo conocido,de todo lo visto, todo lo descubierto hasta la fecha ;pero no era suficiente,no era completamente fuerte, no, no era el arma que lograría salvar su falsa vida, lograría sacarlo de aquel aprieto, de ese ingenuo punto de perspectiva vista para poder superar, lo que era su peor debilidad, su peor presentimiento, lo que el más temía, sin saber que el no podía temer : '' el tiempo ''
El portal estaba sellado, pero totalmente atento a los sucesos que enfrente de sus pensamientos estaban ocurriendo.
delante de sus ojos, se encontraban dos seres totalmente opuestos, decididos cada uno a eliminar a su vez al otro,cada uno, decidido a dominar lo que próximamente se avecinaba, cada uno con cumplir un objetivo, un motivo, una misión.
-no sabes lo que haces, debes volver por donde vinisiteis, escoria, mis maestros me lo dijieron, y así será, por siempre, y para siempre.
-¡Quien eres tu para decir que hacer, los magos no han causado más que problemas, ¿escuchaste? Es hora de poner fin a esta realidad, a esta, casa de nigromantes, es hora, de que tu cuerpo deje de existir, ser sin sentido
Exclama.
-no lo hagas, nunca sabrás el daño que has causado, nunca sabrás, que fue lo que hiciste, entiende cazador no eres  la más mínima parte de este infinito universo, si destruye mi destino, y el de mi mundo, ¿quien ha de controlar, expandir vuestro conocimiento?

Se intenta levantar, pero su cuerpo no daba más, sus poderosas piernas de piedra no le dejaban avanzar, era como si todo su esplendor hubiese sido apagado como quien apaga la llama de un corazón inocente entre las eternas y oscuras muestras de afecto, odio.
El cazador le mira, el desprecio se ve en sus ojos llenos de las llamas más oscuras de todas.

-no entiendes, definitivamente, no perderé más mi tiempo, ha llegado tu hora, te sentenció, al destierro.

-y... Así ha de ser, he fallado maestros.

Atraviesa su daga en el centro de aquel gigantesco ser de piedra, derrotado entre los escombros de Lo que eran un posible cuerpo de mármol, entre las cenizas de lo que eran un arma posiblemente tan poderosa como aquel que le había derrotado. Faltaba una cosa, algo... Todo estaba en calma, hasta que:
-has derrotado al centinela, joven cazador, el ser más poderoso creado por los seres celestiales. Tu entrada esta permitida, aunque tus motivos fueran contrarios a los míos, no puedo negar el conocimiento a quienes gozan del don de la sabiduría, pero, si intentas solo una, vez derrocarme, atente a las consecuencias.

-¿quien eres tu, anciano?

Su tono de voz se torna fuerte, imponente, creía ser el más grande, el más poderoso de todos en este universo.
-yo soy quien no quisieras enfrentarte nunca, los dominios de quien no debes nunca toparte, soy tu presente, tu futuro pasado, veo todo, y veré todo, si algún día se me permite.

- escuchame, anciano, no se quien eres, pero si no me dejas entrar con mi ejército, no haré más que destruirte como lo hice con tu amiguito ese.
-pues, es entonces, claro tu motivo, observa pues, el poder que gobierna lo que será la inexistencia de la ciudadela.
El cazador con una, velocidad increíblemente extraña, sobrenatural, lanza una apuñalada, al sentido y dirección de donde se encontraba el misterioso hombre sentado en los brazos del mármol que cubría el suelo. iba directamente a su corazón, letal, asesino. Pero... nada ¿ que había sucedido?
Un movimiento fugaz, rápido, ha de pasar entre los escombros, y, con una ilusión fabulosa, logra llegar directamente a los ojos del aprendiz.
Lo mira directamente y pronuncia :
-mirame, cazador, verás, lo que siempre viste, verás, tu mente, antes de tu corazón, verás, tu recuerdos antes de tus acciones, ahora, sabrás que es ser yo, que es poder dominar algo que no es tuyo, algo que le pertenece a lo que fueron mis maestros. Mírame bien, a los ojos, y veras tu vida pasada, tu futuro, tu presente, y tu pasado, mírame...

Los recuerdos vuelven a la mente del individuo, los vivos paisajes de un oscuro atardecer se vuelven realidad, y las imágenes de Lo que son los pilares de crónicas escritas en si mismas interceptan todas las dimensiones posibles. No había escapatoria, el viejo aprendiz lo sabia, tenia claro el motivo por le cual el había sido elegido. Era él o la ciudadela.

Aturdiendo a su agresor, el maestro se dirigió rápidamente hacia la compuerta de lo que es la ciudadela, dos gigantescas masas de Piedra, construidas hace mucho, y con una estructura difícil de comprender, hasta por los arquitectos más capaces de nuestra época. Enciende sus manos, habre fuego contra la gema en la parte superior, una verdosa Esmeralda, que le daba el suministro de energía a toda la compuerta a la entrada de la mega construcción. No funciono.
Lo comprendió . Entendió por que estaba ahí. Entendió por que paso lo que tenia que pasar, comprendió, por que ellos lo habían sucedido, por que le heredaron sus poderes. Tenía que usar su máximo potencial, debía utilizar lo que nunca había utilizado, y si lo hacía, su cuerpo quedaría totalmente inutilizado, debilitado y frágil a todo lo que el ambiente y los factores han se comprometer a la existencia, su existencia.

Sus ojos se volvieron blancos, transparentes, su pelo, se volvió oscuro, negros, rojizo. Su piel se puso pálida, y sus manos empezaron a brillar como nunca lo había hecho. Su cuerpo temblaba, y los cuatro elementos se hacían presentes durante el trayecto de sus movimientos.
AHHHHGG. Fue su última voluntad, emitió un rayo de energía,
vientos, aguas, fuegos, tierras, surgieron, y se unieron para formar una especia de éter universal, de un tetraelemento jamás visto, jamás creado.
-destruido el portal... Ya nada interferira en el universo.... Cazador.... Ya no eres útil... Ja ja... Ugh.
-¿¡que has hecho!? Te mataré, Te MATARÉ!
rompe la confusión y se dirige al anciano, caído en el suelo por el gigantesco gastadero de energía que había utilizado.
-ja... No puedes hacer nada mas... Yo estoy totalmente jódido... No durare más que unos minutos más, y mi cuerpo desaparecerá... Mi energía no existirá.. Y tu, joven mago, caerás en La desesperación... Tu poder no es suficiente. si, controlas el quinto elemento, pero no es útil ahora.... En algunos años más, ellos lo inventaran, ellos lo crearán como si fuese una simple galleta, algo sumamente estúpido, idiota, pero... Que mas da, el futuro es el futuro.. Y no .... Augh.
Falleció.

-reclamar esta vida.. Será lo que motivará a encontrar la llave de esta puerta ... Desde hoy, el gremio de Los magos nacerá... Y traeré de vuelta al maestro que dará vida a nuestro mundo... El gremio de los mago de fuego nacerá.

Historias Entre PalabrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora