Capítulo 16

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El vestido siempre se desea que sea maravilloso e ilumine cada estancia de boda en mi caso no, me case con un par de zapatillas convers, un vestido muy sencillo con encaje y rosado.
Confieso que nunca me ah gustado usar tacones, no es lo mio. La cosa es caminar y no caerse en tu dia especial, y que todos te miren.
La boda fue algo pequeño, en la casa con 50 invitados y casados por el civil.
Para la Luna de miel tenía planeado decirle mi embarazo.

Salimos del país fuimos a París, nos quedamos en una habitación hermosa y muy glamorosa.
El estaba muy cariñoso, me abrazaba y hacia que mis labios rosaran junto a los suyos.

Le dije:

- Mi amor...
- Dígame mi pequeña
- Estoy embarazada de un mes y medio.
- ¿Enserio mi amor?

En momento lloramos de alegría, los dos, nos besamos, hicimos el amor.
Necesitábamos otra aventura así que...

Era de día aún, salimos en motocicleta llegamos a un puente, me dijo:

- Hermosa dama, que hace con su sonrisa volver a un hombre como yo un estúpido.
- ¿Tu crees?
- Oh sí, y mucho más que eso, me hace temblar con sus besos, con sus labios y sus abrazos, sólo pienso tenerla conmigo.
- ¡Te amo!

Fuimos a comer el llamó a unos violinistas y empezó a cantar, era desafinado (cantó en español) nadie le entendía nada, estaba cantando una canción muy hermosa, lo encontré muy romántico, lo ame con desafinaciones y todo.

Sólo estuvimos 3 días en París.
Los demás días fuimos a comer, conocer París y sus atracciones.

Al irnos de ahí, el siguió igual de alegre, no se le vía tan celoso como antes... "pensé que había cambiado"

Un amor violentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora