Cacería de Mutantes: La Guerra

Comunicación cortada

Cailyn

Seguimos con el plan pero Adria no se ha comunicado, no nos ha dicho si ya encontró el lugar o si se encuentra en algún problema así que decidimos ir a donde ella.

- ¿Cómo sabremos donde esta? -pregunta Brian

- Si siguieron el plano del lugar deberíamos encontrarlos fácilmente.

- Creo que lo más sensato sería tratar de comunicarnos antes de ir, tal vez se le olvido informarnos.

Me quedo mirándolo en silencio mientras busco la radio, no quiero decirle que la razón por la que no lo había hecho hasta ahora es por miedo, ¿Qué pasaría si no me responde?, podría ser por cientos de razones y las que me vienen primero a la mente son de lo más aterradoras.

Levanto el comunicador y lo enciendo para escuchar mucha estática.

- Aquí geek a gata, responde – odio el nombre código que me asigno pero no me queda de otra más que usarlo.

Nadie responde, para empeorarlo recuerdo que ella tiene un auricular en vez de uno de estos radios, dijo que era más fácil usar eso a tener prácticamente un ladrillo colgando de su cintura.

- Adria responde – imploro con un tono más preocupado hasta que escucho respuesta.

- Cailyn....- es lo primero que dice pero para empeorar mi condición no es Adria quien me responde.

- Eric ¿Dónde está Adria?- pregunto antes que cualquier otra cosa. Brian me observa preocupado por la situación.

- Ella está aquí – dice susurrando – pero está muy herida y tenemos grandes problemas.

- Vamos en camino – respondo comenzando a avanzar.

- NO – responde algo alterado – tienen armas muy poderosas, ya le disparamos a todos pero el....no es como habíamos pensado.

- ¿A qué te refieres? - pregunta Brian arrebatándome la radio.

- Adria está muy mal herida y no se está curando con su velocidad normal y el...no podremos ejecutar el plan.

Me quedo mirando al vacío por unos segundos y en ese tiempo es como si todo se moviera a cámara lenta, igual que cuando creí perderla, es como si me estuviera chocando contra una pared, ¿no podemos hacer nada? prácticamente lo que él me está diciendo es que todos nuestros planes, todos nuestros sacrificios han sido en vano.

- No lo escuches – dice una voz tratando de respirar con mucho esfuerzo.

- Adria no, estas muy lastimada.

- CALLATE ERIC – ella responde furiosa – Cailyn el plan continua, no escuches a este idiota, yo estaré bien.

Me quedo en silencio con una pequeña sonrisa, pero sé que ella está loca, se le escucha que no está para nada bien pero no importa lo que yo diga ella no se detendrá.

- Cailyn, vamos a apagar los comunicadores así que no te preocupes por nosotros, ¿ok?, y...te amo.

En cuanto termina de decirlo lo apaga y me deja con un sentimiento de angustia, a todos los que la escuchamos de hecho, esa maldita, de seguro que va a hacer algo que le costara la vida y esa fue su despedida.

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Adria

Me quito el auricular y lo destruyo sintiendo la mirada penetrante de Eric en mi cabeza.

- Explícame cómo vas a seguir peleando – es lo único que dice a lo cual solo me volteo con algo de esfuerzo y le sonrío.

- Estaré bien – respondo a lo cual el me mira con más ira, lo cual no pensé que fuera posible en este punto.

- Tu brazo está prácticamente despegado, tienes un agujero en el cuello y otro en el estómago, no te estas curando y dices que estarás bien, oh, además del hecho que nuestro objetivo acaba de escapar HACIENDO UN AGUJERO ATRAVEZ DEL SUELO.

- ....estaré bien.

- UGH, NO HAY FORMA CONTIGO.

Se nota lo furioso que esta y lo entiendo, trato de explicárselo pero no puedo. Miro mi brazo y si, entiendo su punto pero lo que creo que él no se ha dado cuenta es que aún sigo en shock, y por esto no estoy reaccionando como es debido. Me recuesto en el suelo y cierro los ojos para descansar un poco, consideremos que no es una bomba ni nada así lo que hay por aquí así que me puedo dar un tiempo para descansar.

El comienza a caminar de un lado a otro preocupado hasta que se detiene y se me queda observando, mi curación comienza de manera acelerada y me sube la temperatura, comienzo a tener convulsiones hasta que finalmente todo mi cuerpo se relaja.

- ¿Adria ?- el pregunta preocupado - ¿estás bien?

Yo solo me siento mirando al frente.

- ¿Sabes que es lo más irritante? siempre es a mí a quien le disparan.

- ¿Que?

- Si – me levanto y me sacudo el polvo – es como si todo el que tiene algún arma sienta la necesidad de dispararme solo a mí, SOY UN TIRO AL BLANCO PARA EL MUNDO.

- Calma – dice con una sonrisa – eso no es verdad.

- ¿A no? he caído de edificios y puentes, me han apuñalado, golpeado, disparado y también envenenado, quisiera ver un día QUE NO SEA A MI A QUIEN LE DISPAREN.

Eric se me queda mirando intentando no reírse pero le es imposible así que solo me le acerco y lo golpeo en el estómago con fuerza, si se piensa bien eso no le hace el mas mínimo efecto, lo siente como si hubiera sido un niño pequeño quien lo hubiera hecho.

- Cálmate tiro al blanco – dice entre risas tratando de respirar – tenemos que destruir a esa cosa....

- Lo sé, y se fue cavando un agujero a un sitio que ni siquiera estaba en los planos del lugar.

- Solo tenemos que saltar.

Miramos el suelo por unos minutos y le dejo a entender que yo no voy a bajar primero así que el salta y yo voy detrás de él.

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Duramos unos 20 minutos bajando y aun no llegamos a donde debemos, por momentos olvido donde estamos y considero imposible que podamos seguir bajando, he perdido a Eric de vista así que solo me queda escuchar cuando él llegue a tocar suelo lo cual pasa dentro de poco, en segundos veo una luz y caigo de rodillas evitando aplastarlo, miro arriba y noto que el techo está a unos 10 metros de altura. La luz del lugar es tipo laboratorio y el pasillo es enorme, Eric ni siquiera me ha mirado, solo se queda observando el final del pasillo escuchando algo que para mí es imposible de percibir hasta que esta más cerca, unos pasos metálicos de un ser de dos metros de alto que se mueve más rápido que nosotros dos juntos, ese estúpido androide con un rostro que parece demasiado humano se nos queda mirando, nos levantamos y tomamos nuestras armas, apuntamos y comenzamos a disparar con todo lo que nos queda.