[4] Las memorias de Leprechaun © {EN PAUSA}

[14/10/2015] 21

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La escena del crimen estaba tan animada que me dieron ganas de cantar "El Muerto Vivo" de Peret. Y no estaba muerto no, no, estaba tomando cañas, lerelele. Pero yo sabía lo que había producido aquel brote de alegría, mi dibujo de Tom Pig. Mientras miraba por la ventana del cuarto de Luca Trulli sentí que los vellos de mi nuca se erizaban, siempre me pasaba cuando Josh estaba cerca pero no lo veía, algo emitía más frío que el Iceberg Que Hundió Al Titanic.

-Glenn -me llamó mi Sombra.

Salí de la habitación y Tom sostenía su caricatura por una esquina como si quemara.

-Nadie fastidia al pintor...

-Para el carro vaquero, te quería decir que me ha gustado. Por lo menos has animado a la chavalería con tu dibujo porcino.

-Yo quiero el mío ¿me lo das? -Me dijo Getxa casi sonrojándose- Tienes mucho talento, en serio.

Tom dobló el suyo y lo metió en el bolsillo de su cazadora y el Vasco admiró su dibujo un minuto más o menos y luego hizo lo mismo.

-Glenn -agudicé el oído, se oía en la puerta-. Glenn.

-¿Josh? -Pregunté a la puerta cerrada.

-En el sótano, bajad al sótano. He oído unas voces.

Le dijimos a Wolf lo que había dicho mi hermano y bajamos por las escaleras, abrimos la puerta y uno de los ayudantes le dio un par de protectores para los pies y un gorro.

-¿Un gorro?

-Por las pruebas y eso, además pierdes más pelo que un gato persa. Venga, pasa.

Se los puso a todo correr y buscamos la entrada al sótano aunque parecía que no había ninguna puerta por lo que supusimos que estaba oculta. Llegó el Sangres a la cocina ya que había oído los gritos del irlandés errante.

-¿Qué eran esos gritos? Ah, hola Josh -levantó una mano-. ¿Habéis oído eso? Han encontrado en Dalkey una fosa común con, por lo menos, cuarenta cadáveres.

-¿No jodas?

-Me llamó hace un par de días un garda amigo mío pero no le creí. Ahora lo han dicho hasta en el telediario. Madre mía, como se nos haya colado en la ciudad...

-¿Pero han dicho como han muerto? -Preguntó Tom levantando una ceja.

-Todavía no.

-Me juego el cuello a que fue la mafia -dijo Josh desafortunadamente.

-Que cruel...

Él nos miró con un gesto de interrogación.

-Encima de tu pelirroja cabeza hay un cadáver degollado.

Se encogió de hombros.

-Vale pues mejor me juego las pelotas.

En la cocina no vimos ninguna puerta a ningún sótano. Buscamos por todos los lados pero no la hallamos, removimos hasta los cajones pero no apareció puerta alguna.

-¿Estás seguro de que las has oído? -Comentó Wolf.

-Sí, segurísimo.

-Por cierto, tu y yo tenemos una conversación pendiente ¿recuerdas? Pásate luego por comisaría...

-Josh; vale, luego voy con Glenn y los demás.

-Entendido tocayo.

-¿Tocayo?