Capítulo 12

9 2 0
                                    

Cuando ya llegamos al parque donde se va a hacer la convivencia, Abel me da un beso en la mejilla y se va con su clase.
Mirándolo como una boba me pongo la mano en la mejilla y me sonrojo.
Carly me saca de mis pensamientos y me apura para que salga de la guagua (autobús)
*********
Cuando ya estamos todos colocados con nuestras cosas, todos empiezan a hacer lo que quieran. Unos tocan instrumentos mientras cantan, otros se van a dar una vuelta o en mi caso me pongo a comer porque desde que me levanté no he comido nada.
Tranquila me siento delante de la mesa en donde estan todas nuestras cosas y me pongo un poco de refresco en un vaso y me pongo a comerme un trozo de bizcocho que ha traído Carly, que está para chuparse los dedos.
Me pongo a hablar con todas (Carmen, Carly, Deisy, Abigail y Carolina) sobre tonterías, para pasar el rato.
Me río con ella y nos quedamos así un buen rato.
Cuando llevamos como unos 20 minutos me pongo a buscar a Abel con la mirada pero no lo encuentro. Seguramente se haya ido a dar una vuelta.
Me levanto y le digo a Carly y a las demás si quieren dar una vuelta conmigo, pero todas me dicen que no, así que me voy sola porque necesito estirar las piernas.
Me pongo a recorrer el parque, que me lo sé como la palma de mi mano, de tantas veces que he ido, y me voy hacia donde sé que hay patos.
Cuando estoy a punto de llegar escucho una risa de una chica. Curiosa miro y veo que es una chica de primero de artes y al lado veo a Abel riéndose con ella.
Me quedo plantada mirando y veo que ella le toca el brazo y empieza a ponerse de puntillas. Abel deja de sonreir y le mira serio. Yo sigo mirando hacia ellos hasta que veo que ella le da un beso corto en los labios a Abel y luego le sonríe, miro a Abel y veo que no reacciona hasta que le va a dar un beso, con cara de no muy convencido y antes de que sus labios rocen con los suyos, hago ruido sin querer.
Abro los ojos como platos cuando veo que Abel me mira de la misma manera.
Cuando ya reacciono le miro con cara de tristeza y un sentimiento que no puedo decir que es, pero que me molesta.
Dolida me voy corriendo y escucho otros pasos detrás de mi acercándose.
Me echo a correr todo lo que puedo porque no quiero que me toque en este momento porque si lo hace hará que me eche a llorar y no quiero que vea que me afecta mucho todo lo que venga de él.
Sin mucha suerte noto como me agarra del brazo y me gira hacia él.
-Escuchame.- Intento empujarlo pero me es imposible porque él es mucho más fuerte que yo.
-No quiero.- Trato de evitar mirarlo porque si lo miro me echare a llorar.
-Por favor Lirry.- Le miro y su mirada me mata. Está llena de miedo, de tristeza.
-No, además tu haz lo que quieras, yo no soy nadie para prohibirte nada.- Miro su pecho y veo que sube y baja muy rápido. Está alterado.
-Lirry, tenía que probar, me estas volviendo loco. ¿Por qué no confías en mi?, estoy esperando por ti y cada vez que parece que doy un paso hacia delante en intentar comprenderte, tu me rechazas y das dos pasos hacia atrás. No me estas dando ninguna oportunidad.
-Lo siento, te pido tiempo, soy una persona difícil y lo siento de verdad pero es que no puedo ahora mismo no puedo decirte nada, ¿no puedes simplemente esperar a que esté preparada?, yo sólo te quiero a mi lado, pero si no estas preparado no importa. No quiero tener más rechazos. -Me mira con una tristeza que no aguanto mucho mirándole.
Sin poder aguantar más las lágrimas me voy y dejo a un Abel triste y confundido.

Mi historiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora