Amor invensible (Liam, Niall y tú)

Louis y Raquel... y algo mas...

Narra Louis! :-)

Tomlinson ten los pantalones para decirle que te mueres por ella! Aunque definitivamente no es por amor. Dile que te gusta y que quieres una oportunidad con ella. Te hace sentir "mariposas" y eso es suficiente... o no?

-Porque debe ser tan complicado?-dije en voz alta.

-De qué hablas?-dijo una voz que retumbo en mis oídos por varios segundos. Era ella.

-Hace cuanto llegaste?

-Hace nada. Justo ahora.

-Ah... por eso.-cambié la vista.-Empezamos?

-Ehh sí.

-Malditas matemáticas.-ella sonrió y tiró sus libros sobre la mesa.

-Eso era lo que encontrabas tan complicado?

-Eh?-ella rodó los ojos.-Sí, eso era.-la condenada se veía tan prepotente haciendo ese gesto pero debo admitir que me gustaba.

-Bien, saca tus cosas... empecemos con esto.

-Geometría?-esta vez yo rodé los ojos.

-Tenemos examen la semana entrante.-tomó asiento y yo hice lo mismo.

-De verdad?

-No, sólo era una broma.

-Tú y tu sarcasmo.

-Tenemos una buena relación. Mi sarcasmo y yo somos como almas gemelas.-la miré fijo. Hija de su madre! Estaba jugando conmigo! Era una burla!

-Te burlas de mi?

-Siempre lo hago.-reí, eso no se podía negar.-Mira, los triángulos tienen diferentes nombres. Emm... se clasifican por sus lados. O sea el nombre depende de los lados. Me sigues?

-Sí, eso creo.-dije y pasé mi mano derecha por mi cuello.

-No creas! Tienes que estar seguro.

-Pues sí, sí.

-Entiendes?

-No soy tan idiota, Raquel.

-Como digas.-sus palabras fueron acompañadas por un gesto lleno de sarcasmo.

Pasó las páginas y me enseñó unos triángulos y círculos. La verdad no entendía ni madres! Estaba ahí como un imbécil. Tzz la escuchaba hablar pero se oía tan distante. Era claro que en lo ultimo que yo estaba pensando era en matemáticas. Bésala! Gritaba mi subconsciente, mientras mi lado cuerdo en ese momento me decía que no. Me aseguraba a mi mismo que primero debía hablar con ella. Estaba esperando una señal y mi señal llego. 

-Louis, creo que deberías...-ella estaba concentrada en el libro de geometría mientras me hablaba y al girarse nuestras caras estaban mas cerca de lo esperado.

-Esta es mi señal.-dije y, en medio de mis nervios y su extraña mirada, le robe el beso que por tanto tiempo había deseado. A fin de cuentas la vida me había enseñado que los verdaderos besos no se piden, se roban.

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Narra Liam :)

Los días iban pasando y no lograba sentirme mejor o al menos olvidar ese nombre que sacudía mis pensamientos cada vez que podía. Cualquier cosa que se encontraba a mi alrededor hacia que ese nombre resonara en mi mente. Mi cerebro no dejaba de cuestionar quien era ella, la mujer que estaba marcada por ese nombre. 

-Hey, Liam. 

-Es ella, antes de que preguntes de nuevo que me pasa.

-Creo que haz cometido un gran error al pedirme que te borre la memoria, amigo. 

-Sí, eso parece, pero bueno por algo lo he hecho. Tal vez me hacía mas daño y me dolía mas mientras la recordaba. 

-Bueno si tú lo dices. 

-Podemos ir a cazar un par de animales?

-Por qué no?

-Vamos. Me muero de sed.-dije.  Cody se adelantó y cazó primero que yo. Yo por mi lado me entretuve admirando la belleza del lugar. Era lindo ver una naturaleza intacta, libre del ser humano, un bosque que era de mi familia, nadie conocía aquel lugar. Respiraba el aire fresco cuando una chica cayó de un árbol. Estaba sobre una rama y la misma de partió, entonces ella cayó con la rama. Al menos eso me dijo la chica al ayudarla. Cody vio la escena y se acercó a ayudar.

-Estás bien?-dije mientras la levantaba del suelo.

-Sí, me duele un poco la pierna pero creo que estaré bien.

-Vives cerca?

-La verdad es que no.

-Y qué haces por acá?

-Tú quién eres?

-Liam Payne.-dije y ella hizo un gesto de dolor.-Puedes sostenerte sobre tu pierna?

-No. 

-Permite que te ayude.

-No te conozco. No sé cuán loco estés.

-Tranquila, no te haré nada.-su cara no cambió, seguía desconfiando.-Conoces a los Smith?

-Conoces a...-ella iba a realizar otra pregunta pero Cody interrumpió.

-Hola, Samanta. Otra pierna rota?-dijo Cody con media carcajada.

-Hola, Cody. Eso creo, me duele lo suficiente como para que esté sana.-dijo. Cody la tomó por la cintura y ella pasó su brazo por los hombros de Cody. Parece que ya era costumbre.-Debes tener mas cuidado.

-Sin sermones, Cody.

-Bien, bien, no diré nada.-dijo Cody y rió. Parecía ser uno de los mejores momentos de su vida.-Vamos, Liam. 

-Claro, que bueno que me recuerdas, por un segundo me sentí como extra. Como si estuviera en medio de ambos. Fue una bonita escena.

-Nunca estaría con Cody.

Cody no dijo nada. Llegamos a la casa y con sumo cuidado, Cody, le hizo un yeso a su amiga. Luego de unos minutos pudimos tener una conversación bastante normal. Ella era muy alegre y se le notaba lo traviesa. Estatura promedio, ojos oscuros, piel morena, cabello muerto con algunos rayos grises. Era tan parecida a un indígena. Cody la miraba como si fuera lo mas importante en su vida. Simplemente no controlaba su forma de mirarla. Noté que le gustaba hacerla reír y verla contenta. Pero ella ya lo había dicho... "nunca estaría con Cody".

-Vamos, tonta, yo te llevo a casa.-dijo Cody a Samanta.

-No, mejor llamo a mi hermano.

-Para qué, Sam? Yo te puedo llevar.

-Te mencioné que ya le he escrito por mensaje?

-No.

-Entonces... tranquilo, Cody, ya le he avisado a mi hermano por mensaje y me dice que ya está cerca.-dijo y se escuchó el sonido del auto. Cody, con un gesto de cansancio, ayudó a la chica y la llevó hasta su hermano. El chico abrió la puerta del auto y Cody subió a Samanta al mismo. Luego dejó un beso en su cabeza y cerró la puerta. Habló unos minutos con el hermano de su amiga y al final, luego de despedirse, entró a la casa. 

-Te gusta.-solté.

-No.

-Sí.

-Ya te dije que no.

-Yo sigo diciendo que sí.-Cody me miró un tanto molesto y luego lo dijo.

-No me gusta, yo la amo y eso duele.