*Narra ___(tn)*
Termino de pintar el cuadro con el que llevo varios días y lo miro torciendo el morro. Miro una vez más la foto que hice al paisaje que descubrimos Matt y yo en nuestro viaje, pero no estoy del todo convencida con el resultado. ¿Le falta algo? Lo dejo para que se seque y voy a limpiarme las manos.Llevo todo el fin de semana aquí metida, son cerca de las doce de la noche del domingo y no he hecho nada interesante, pero sé que si estoy aquí medio escondida, es porque solo mientras pinto, no pienso en lo que me angustia.
Me pierdo en mis cuadros. Dejar de hacerlo es pensar en Juan y en lo que paso el otro día, es recordar una y otra vez su cara de asombro cuando le dije que estaba enamorada de él, aun no me puedo creer que se lo dijera, que le confesara algo así. Fui una ton.ta, pero la idea de perderles a los dos me puso muy triste, pero era lo que tenía que hacer, pues cada día de esta semana me he sentido como si ya no fuera necesaria en su casa. Me he sentido desplazada, llevo toda mi vida sintiendo eso y no quería que me pasara con ellos. Prefería irme, a acabar peor. No esperaba que Juan dudara y fue esa duda lo que me derrumbó y me hizo hacerme fuerte y conformarme. Podré quererlo, pero cuando este sentimiento nació en mí, no esperaba que él me correspondiera, no tiene la culpa de que yo me enamorara de él, pero perder su amistad me dolería mucho.
Mientras me limpio las manos y la cara escucho sonar el móvil, voy hacia él y veo que es Matt, una vez más. Pienso en cogérselo, lo echo de menos, pero no me apetece que me recuerde el bochorno del último día que nos vimos. Ahora sé que por él nunca sentí nada, pues lo que sentía no se puede comprar a lo que siento por Juan, y a lo que una mirada suya me hace sentir. Pero quiero a Matt como un amigo. Sé, que estoy siendo una inmadura al no cogerle el teléfono, ni responder sus mensajes, pero no quiero que me diga que todo ha cambiado. Prefiero quedarme con el recuerdo de lo que vivimos. Bueno eso y que me avergüenzo de lo que hice.
Aquella noche había probado por primera vez el alcohol y cuando le dije a Matt que tal vez lo quería, él sonrió y me dijo que claro que lo quería, como amigos que éramos, pero le dije que creía que era algo más. Matt se volvió a reír, y le dije que por que no me besaba para saberlo. El sabía que era mi primer beso y tras darme uno en la frente, como había hecho muchas veces, me preguntó si estaba segura y entre risas le dije que sí, pero cuando me besó, pese a su habilidad no sentí nada, salvo una tremenda vergüenza.
Y entonces me pregunte si él sí sentía algo por mí y por eso me había besado. No supe que decirle y salí corriendo. Fui una cobarde. Pero había echado por tierra, por no saber aceptar, que lo que me daba miedo era que si yo me iba, él se alejaría de mí y le perdería como amigo, como perdí a Bianca. Matt y Bianca siempre han sido los únicos que me han entendido. Y ahora ha llegado Justin, él no se molesta por mis bocetos, y se ríe con mis disparatados comentarios. Pero eso también me pasa con sus amigos, a veces pienso que son un grupo muy extraño, pero me gustan, el otro día Laia se pasó toda la mañana conmigo y con Jazzy, hablamos y no sentí mi habitual vergüenza, ni mi miedo a estropearlo todo por decir algo inoportuno. Y hablé con ella sin miedo, no como me ha pasado con los amigos de mis padres. Desde niña he hecho siempre algo que ha causado risas y mi bochorno en las fiestas. Pero ahora es diferente y me gusta. Si para no perder esto tengo que aceptar ver a Juan con mi hermana lo haré. Pues la idea de no verlo nunca más, se me hace aun más insoportable.
Llego a casa de Juan y dejo la moto al lado de su coche, bajo y cuando me abre la puerta se me pasa mi vergüenza al ver signos de cansancio bajo sus preciosos ojos.
—¿Ha pasado algo con Jazzy?
—No ha pasado buena noche.
Entro y dejo mi mochila.
—¿Has tomado café?
Juan me sonríe y yo hago lo mismo.
—Sí mama.
—No puedo evitar preocuparme por la gente que me importa.
—Me alegra importarte. Y tranquila me he tomado un café doble. Te he dejado leche preparada y tostadas. Tú no tienes mejor cara que yo.
—Tenía que terminar un cuadro, y se me resistía.
—¿Que tal ha quedado?
Saco el móvil de mi cartera y se lo enseño, haciendo algo que no suelo hacer, pero deseando saber su opinión.
Se queda callado cuando le muestro la foto del lienzo y alzo la mano para coger el móvil, pero Juan me toma la mano impidiéndome así que se lo quite.
—Es precioso, eres una artista, deberías enseñar tus cuadros al mundo.
—No te burles de mí.
—No me burlo de ti, no lo haría nunca—Me mira sonriente y me sonrojo.
—¿De verdad te gusta? Es un paisaje que descubrimos Matt y yo al perdernos de la excursión que habíamos contratado. Acabé haciéndole mil fotos y luego nos bañamos en sus frías aguas—Me río al recordar las palabrotas de Matt cuando me metí en el agua y le dije que estaba buenísima, se tiró de una para emerger cabreado por mi mentira.
—¿Y lo gracioso de la historia?
—Engañé a Matt y le dije que el agua estaba buena, pero estaba fría como el hielo, pese a que hacia calor.
—Pobre Matt.
—Me la devolvió luego—Me acuerdo de su broma y sonrío aunque con menos ganas.
—Sois muy amigos.
—Sí...—Le cojo el móvil y lo guardo—. Algún día tendré valor para hablarle y ver en lo que ha quedado reducida nuestra amistad.
—¿Por?
—Chismoso—Le sonrío y me sorprende ver a Juan serio—. No pasó nada, solo que creía estar enamorada de él y nos besamos como ya te dije tras decirle que lo quería, cuando me di cuenta que no sentía nada y que mi confesión había sido por el miedo a perderle tras el viaje, me sentí estú.pida y salí corriendo. Me da miedo verlo o hablar con él y comprobar que todo ha cambiado. Es mi amigo desde que tenía tres años.
—Debes de quererlo mucho.
—Sí, pero lo estropeé.
—No creo que lo estropearas __(tn), a veces pasa, crees querer a alguien y luego te das cuenta de que solo es amistad.
—No vayas por ahí, sé lo que siento por ti. Es distinto de lo que sentía por él, y sí, valoro más tu amistad, en el caso de Matt él se iba de viaje y sabía que tardaríamos mucho en vernos, hemos estado juntos desde pequeños, y la idea de estar sin verlo, de no tener a mi amigo me asustó, y se me pasó por la cabeza que si éramos algo más, tal vez su odioso padre me permitiría estar cerca de él, creía que esa idea era porque sentía algo, y se lo dije. Temo haberle hecho daño si él sí sentía algo por mí. Fui una egoísta. Él no se merece a una amiga como yo.
—__(tn) no eres egoísta, sentiste miedo a verte sola, y lo confundiste todo. Deberías hablar con él.
—Algún día.
—¿Y como estas tan segura de que...?
Tomo la mano de Juan y la pongo cerca de mi corazón.
—¿Lo escuchas latir? Con Matt nunca latió así, con Matt no sentí esto. Pero tranquilo, sé cuál es mi sitio.
Suelto la mano de Juan pero esta se queda en el lugar donde la ha puesto cerca de mi pecho y me acaricia con cariño.
—No me merezco esto __(tn). Soy mucho mayor que tú...
Lo miro extrañada y más porque lo ha dicho como un susurro.
—Hablas como si fueras un viejo.
—Es así como me siento desde que tengo a Jazzya mi cargo.
—Y Ainara es la madre perfecta para Jazzy—Comento con evidente ironía, Juan al escuchar el nombre de mi hermana aparta la mano y da un paso hacia atrás.
—Sí...Nos vemos luego.
Se va y me siento en la silla más cercana. ¡¡Otra vez he cometido una estupidez!! ¿A qué venía lo de ponerle su mano en mi corazón? ¡No me he ridiculizado ya bastante! Soy patética, es lo que me pasa por confiar en la gente, que tiendo a olvidarme de callar lo que siento porque odio las mentiras, los secretos... pero es hora que aprenda a callar. Es hora que deje de hacer la tonta.
****
Cuando Juan llega noto que esta cansado, le digo que le he puesto la comida en la mesa.
—¿Y tu?
—Yo comeré algo en mi estudio.
—No pienso dejarte marchar hasta...
—Prefiero irme—Me sonrojo.
—__(tn). ¿No crees que ha llegado el momento de dejar de hacer el tonto?
—No lo sabes tú bien...
—No lo digo por...—Juan se pasa la mano por el pelo y accedo a quedarme.
—De perdidos al río—Me río, saco mi plato. Juan saca el agua y un vaso para mí.
—¿Que tal el trabajo?—Juan me mira tras servir el agua.
—Cansado, ahora tengo que seguir trabajando un poco aquí en casa, luego vendrá Albert para terminar unas cosas.
—Si quieres me quedo y te ayudo con la pequeña— Juan me pasa el pan.
—Me vas a arruinar—Comenta sonriendo.
—No pienso cobrarte—Le saco la lengua y seguimos comiendo y Juan me cuenta cosas sobre el proyecto de Albert.
—Mi padre me lo comentó. Sé un poco de que va el tema.
Juan sonríe, mientras comemos hablamos de lo que les falta por hacer y los frutos que esperan que dé en la empresa.
Me quedo boba mirándolo hasta que me doy cuenta, pero no he podido evitarlo, su entusiasmo es contagioso.
—Entiendo porque mi padre te ha dado el cargo que tienes.
—¿Por?—Pregunta intrigado.
—Te gusta lo que haces y a él también.
Juan sonríe y seguimos comiendo, cuando terminamos recojo las cosas y Juan friega los platos.
—Voy a cambiarme y dormir un poco antes de que Jazzy se despierte.
—Yo me voy a pintar—guardo mis cosas suponiendo que mi idea de quedarme aquí ha sido rechazada y voy hacia la puerta— Nos vemos mañana.
—__(tn)...—Me giro—. No me importa que te quedes aquí, te lo agradecería, pero no quiero abusar de ti, ¿Lo comprendes?
—Claro.
—__(tn)...—Dice cuando me vuelvo a girar para irme.
—Empieza a ser molesto que me conozcas tan bien— Juan se ríe y me vuelvo aun con el morro torcido pero no tardo en cambiar mi expresión por una sonrisa.
—Este viernes es mi cumpleaños y he pensado hacer aquí una fiesta para mis amigos, me gustaría que vinieras, pero como amiga.
—Claro, te sale más barato invitarme como amiga...— Juan se ríe y yo con él—. Nos vemos mañana.
—Hasta mañana duendecillo.
Lo miro asombrada y me vuelvo antes de que vea como me ha impactado el apodo que ha usado, es el mismo que utiliza mi padre.
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Enamorada del novio de mi hermana (Maluma & Tú) *Terminada* , (Editando).
Подростковая литература__(tn) siempre se ha sentido diferente. Con sus 19 años no aparenta mas de 15 y para eso no ayuda mucho que siempre lleve coletas porque le molesta el pelo para pintar. Hija de un importante empresario y además Marqués, nunca se ha sentido a gusto...