Quizás sea, que la costumbre de llorar y sentirme sola haga que ya no esté detrás de ti como lo hacía antes.
Quizás ya estoy asumiendo que lo nuestro durará poco, como las últimas veces que intentamos.
Quizás sólo servimos para vernos, pasar el rato y ya.
Y quizás eso, haga que esté a pocos pasos de dejarte de amar, como lo hacía aquel día, 21.