Mi otra mitad (Elijah Mikaelson)

NUESTRA VERDAD

Narra Esther:

Yo no entendía nada, no creí que fuera un problema que la pequeña Amara fuera una bruja como Kora o como yo, pero si fuera eso Niklaus no se hubiese alterado así, Amara subió corriendo a la habitación muy triste y llorando como nunca lo había hecho, Kora, amiga y hermana fiel no debiste tratarla así..

Mi madre: Esther mi hija me hizo una promesa y no la cumplió y debe aprender de sus errores.
Esther: Kora ¿acaso no confías en las palabras de tu hija?
Elijah: pero, ¿porque la tratas asi? Amara no ha hecho nada ella estaba muy asustada y susurraba me duele, me duele mucho.
Mi madre: ¿Amara asustada? ¿Mi hija sufría? ¿Pero porque? ¿que le pasaba?

Arriba en la habitación:

Rebekah: Amara, que te pasa Amara dime algo por favor, no llores.
Yo: por culpa de Niklaus mañana nos vamos a nuestra nueva casa.
Rebekah: ¡pero porque! ¡que ha pasado!
Yo: sin dejar de llorar de repente me sentí muy mal y me desmaye.
Rebekah: Señora Kora, Madre venid corriendo Amara se ha desmayado
Mi madre: ¿que estas diciendo Rebekak?
Rebekah: corred por favor,
Elijah: ¿Que has hecho Niklaus?
Si le pasa algo no te lo perdonare jamás.

Como Niklaus no dio ninguna respuesta, cuando llegaron a la habitación mi madre decidió preguntarle de una vez por todas.

Mi madre: Niklaus que es lo que viste en el bosque exactamente.
Niklaus: pues vi como a Amara le cambió el color de ojos a un amarillo brillante
Mi padre: ¿amarillo? ¿Estas seguro Niklaus?
Niklaus: si Kieran muy seguro
Mi madre: Kieran coge a tus hijos y ve al río a hablar con esos lobos, para ver que le han hecho a nuestra hija.
Esther: Kora estas segura de que deben bajar al río, es muy peligroso.
Mi madre: confío en mi esposo Esther y se que nada les pasará.
Elijah, : dejad que os acompañe por favor.
Mi madre: Elijah no te preocupes, su padre se ocupará y Amara estará bien, de verdad.
Elijah: pero yo...
Mi padre: Elijah, volveremos enseguida lo prometo.

Mi padre y mis hermanos se convirtieron en lobos antes de llegar al río, cuando se encontraron con la manada, mi padre se sorprendió mucho porque nosotros éramos blancos como la nieve y nuestros ojos eran azules como el cielo y la manada que se encontraba en el bosque era de un color negro como la noche con los ojos de un color amarillo brillante.
De repente el Alfa se acercó a mi padre y a mis hermanos y una vez cerca volvieron a ser humanos, y hablaron:

Extraño: Soy Seth el Alfa de la manada Media Luna.
Mi padre: ¿Media Luna?
Alfa Seth: Si
Mi padre: Yo soy Kieran el Alfa de la manada Luna llena y estos son mis hijos Greig y Christopher.
Seth: ¿Luna llena?
Mi padre: Por lo que veo nuestro aspecto se debe a que somos de diferentes Manadas.
Alfa Seth: Ya veo, pero a que se debe vuestra visita
Greig: Queremos saber que le habéis hecho a mi hermana
Alfa Seth: ¿tu hermana?
Mi padre: si mi hija, hace como una hora que bajó al río a por agua con un joven,
Alfa Seth: ¿Esa niña es tu hija?
No lo sabíamos pero tampoco le hemos hecho nada, además el joven que la acompañaba la protegió muy bien, y nos alejamos de ellos cuando vimos a esa joven como los ojos le cambiaban a nuestro color de ojos, pensamos que sería una joven visitante, nos fuimos y no les hicimos nada, aunque se dice que hay una leyenda.
Mi padre: No por favor, que esa leyenda no se refiera a mi pequeña, pense.
Bueno Seth muchas gracias por todo ha sido un placer conocer a tu manada.
Alfa Seth: No tiene que darmes las gracias, somos Alfas y nos debemos apoyo y respeto, además de que si la leyenda es cierta y se refiere a tu hija ella será nuestra reina y Alfa de las tres fases lunares.
Christopher: padre ¿a que se refiere con eso? No sera que la historia que nos contaron los abuelos es cierta.
Mi padre: Christopher hablaremos luego deacuerdo, tu madre estará preocupada tenemos que volver.
Greig y Christopher: Un placer, hasta pronto.