Destino. |Thomas Sangster y Tu| HOT *Editando/Actualizando*

D I E C I S I E T E

-Adelante-se escucho dentro de la oficina que ataba frente a nosotros.
Thomas y yo seguíamos abrazados...eso era muy asjajsjajsjja XD...
La chica celosa se hizo a un lado para que pudiéramos pasar, y yo al verle la cara me emperre a niveles que no son normales, ya que esta estaba viendo a Thomas con mucho deseo.
Así que hice algo que no creí atreverme a hacer jamás...
Me acerqué al rostro de Thomas, y mire sus labios.
Este rápidamente se percató de lo cerca que estábamos, pero se quedó inmóvil.
Ese fue un gesto de aprobación para mí, así que junte nuestros labios en un beso lleno de lujuria y sorpresa.
Sus labios eran dulces, y encajaban a la perfección con los míos.
Este era uno de los mejores besos que jamás tuve en mi vida, y no podía creer que estuviese besando al hombre que comenzó a cambiarme la vida.
Duramos unos cuantos segundos así, hasta que nos separamos por falta de aire...puto oxígeno...por bueno, humanos teníamos que ser...
Antes de entrar a la oficina mire a la chica, quien seguía detrás de nosotros.
Tenía una cara que...válgame dios, nadie podría saber que estaba queriendo expresar...
Así que solté una pequeña risilla, y esta se volteó malhumorada.
Creo que esa chica es DEMASIADO celosa, aunque bueno, no con sus hombres, sino con los ajenos.

Thomas me miró con una gran sonrisa después de ese beso, parecía que en realidad sí le había gustado.
El hermoso chico al que acababa de besar cerró la puerta detrás de él ya estando dentro de la oficina, y el hombre detrás del escritorio nos dijo que tomáramos asiento, así que nos sentamos.
-Son novios, esposos, o algo así?-preguntó este de inmediato.
-Novios-dije rápidamente.
Thomas soltó una pequeña risa, una perfecta risa...
-Y el...está enterado del incidente?-preguntó el hombre, quien estaba acompañado de dos guardias a sus espaldas.
No me había dado cuenta.
-El...el..el me salvó la vida...esa noche...-dije casi en susurro.
Thomas lo notó...de nuevo...
-Bueno...realmente no nos gusta revivir ese momento...-dijo este casi de inmediato.
-Si, lo entiendo...se que ah sido duro para ustedes...especialmente para usted, señorita Grier-comentó el hombre-pero bueno, eso no es a lo que los eh hecho venir-
-Entonces?-pregunté confundida.
-Quiero que me diga...que hará con la casa de sus padres?-me preguntó este-no podemos venderla así nada más...-
Me quedé en silencio.
Necesitaba pensar...otra vez...
¿Cómo no lo había pensado antes?
Dios, creo que Thomas me afecta demasiado...nah, no es cierto...pero hablando en serio...
¿Qué debo hacer?
-Yo...-dije mirando a la nada, pero luego mis ojos se dirigieron a Thomas, quien me miraba buscando una respuesta-podemos...podemos discutir eso...a solas?-le pregunté al hombre queriendo decir que necesitaba salir a hablar con Thomas.
-Por supuesto-contestó este.
Tomé el brazo de Thomas, y me dirigí a la puerta de la oficina rápidamente, casi arrastrándolo.
Una vez afuera de esta hablé.
-Thomas...que...¿qué debo hacer?...-necesitaba ayuda en eso-Thomas, tal vez parezca absurdo no poder decidir bien esto, pero yo ya había dicho que la vendieran, y no me importaba si se llevaban las pertenencias...-
-Bueno...deberíamos ir a la casa...-dijo después de un rato de silencio.
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Perdónenme...Xc
Deberían quemarme viva...bueno, no tanto así...pero si algo parecido...