Capitulo 4: Confiando en una desconocida.

399 23 1
                                    

Miércoles 9 de mayo hora de ir al colegio, por lo tanto estoy con polera de magas larga para que mis compañeros no me juzguen por mis cortadas, más que tengo rostro golpeado por los golpes me dio John y la verdad no me duele los golpes sino lo que hizo, es lo más estúpido que pudo hacer en su puta vida, ya es de mañana, me levanto hago mi cama y bajo a desayunar.

Madre: Necesito hablar contigo cuando regreses de clases.

Merry: ¿Tu? ¿hablar conmigo? Es extraño porque núnca hablas conmigo,  encima después de lo que sucedió.

Madre: Solo quiero hablar por algo que necesito de ti, así que ya sabes.

Merry: ¡Vale!

Temía a las palabras de mi madre, nunca había hablado conmigo y menos con esa fría mirada que me dio, ya saliendo de casa... tengo la costumbre de darle un beso a mi madre, pero no tengo ni ganas de acercarme a ella.

Madre: ¡Merry se te olvida algo!

Merry: No se me olvida nada mamá.

Madre: ¿Mi beso?

Tuve que darle el beso para no hacerla sentir mal.

Merry: *le da beso* adiós mamá.

Madre: ¡Hasta la tarde Merry!

Ya en el buss escolar, el conductor anuncia a una chica nueva que llegó de intercambio, yo recibía a todos muy bien, pero eso que pasó me convirtió en antisocial porque creía que todos me hacían daño.

Conductor: Queridos estudiantes, es un honor presentarle a la nueva estudiante de nuestro colegio, su nombre es Katherine Matias, ella viene desde España así que ya saben chicos den la bienvenida a Katherine, ponte de pié Katherine para que te conozcan.

Katherine: Gracias conductor y a ustedes por la bienvenida *sonríe tiernamente*

Katherine una chica hermosa y está sentada a mi lado, pelo castaño, ojos marrón, piel blanca y de unos 17 años, estaba vestida con polera y sentada a mi lado, no presté atención a nada de ello, cuando de momento me saluda.

Katherine: ¡Hola!

Pero estoy en mi mundo, y no la escucho hasta que:

Katherine: *me sostiene por el hombro y me mueve* ¡oye! ¿estás bien?

Merry: *la miro* si muchas gracias.

Katherine: ¿Segura? *me mira a los ojos*

Merry: Sólo déjame tranquila ¡por favor!

Katherine: por favor, déjame ayudarte *lo dice con voz muy tierna*

Merry: No puedes ayudar, nadie puede hacerlo.

Katherine: ¡Puedo ayudarte más de lo que crees!

Merry: *la miro, se me escapa una sonrisa* no puedes hacer nada.

Katherine: En tú mirada triste se esconde las lágrimas más oscuras y espesas.

Merry: *La miro nuevamente sorprendida* ¿Qué haz dicho?

Katherine: En tú mirada observo tu misma tristeza que hace años tenía yo.

Merry: *sonrio* ¿Y que te hace pensar eso?

Katherine: Esas cortada en tus brazos y tus piernas, por cada lágrima de tus ojos.

Merry: ¿Cómo sabes acerca de eso?

Katherine: ¡Sólo lo sé!

Me sorprendió sus palabras, tan directas y dolorosas, como si fuera yo misma hablandome.

Merry: ¿puedes contarme acerca de ti?
Katherine: ¡Claro!

Katherine me cuenta su historia hasta que llegamos al colegio y ha pasado por casi lo mismo que yo,  a diferencia que no pasó por el proceso aquél de violación. Pero siento una conexión como si la conociera desde hace años.

Merry: ¿Por qué me cuentas esto?

Katherine: Para que sepas que el dolor nos llena el alma, cuando nos hacemos los cobardes.

Merry: Pero no sabes lo que me pasa a mi, y menos el motivo por cuál me corto.

Katherine: Confía en mi, yo te entenderé, vengo desde un país en el cual he visto muchos casos, no me sorprendería el tuyo.

Merry: *la miro y me sonríe mientras asienta su cabeza* Vale te contaré.

Cuándo le contaba lo que me pasó, ella empezó a llorar y me abrazo, diciendo.

Katherine: Las personas son injustas y no saben el verdadero valor de los demás ¡todo estará bien!

Merry: *le tomo su abrazo y llorando* gracias, de verdad muchas gracias.

Katherine: Pero las navajas no es na única opción, hay más y enfrenta esto, se que todo estará bien.

Merry: ¡Nos vemos en la salida!

Yo pensaba mientras la escuchaba: ¿por qué alguien que ha sufrido tanto es tan optimista? Esa era mi pregunta todo el día en clases.



Una historia suicidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora