Capítulo 2: Entre Sombras y Recuerdos

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Mia se tapó los ojos con el brazo cuando la luz del día chocó contra ellos, gemía, agarrándose la cabeza. Se sentó despacio en la cama, preguntándose cómo había llegado hasta allí. La noche anterior resultaba completamente borrosa, apenas recordaba nada. Recordaba haber salido de casa, entrar en un local, pero a partir de ahí, la noche desaparecía, desvaneciéndose por completo.

Su mente estaba llena de penumbra y angustia. A medida que la realidad comenzaba a emerger entre las sombras, su corazón se llenaba de pesar. Se sentía como si hubiera traicionado la confianza de alguien a quien amaba profundamente: su novio. No recordaba nada de lo que había hecho, pero estaba segura de que algo terrible había sucedido en esa noche de la que no tenía recuerdo.

Lágrimas se formaron en los ojos de Mia mientras las sombras de la habitación se cernían sobre ella. Se atormentaba por su propia incapacidad de recordar, por no poder enfrentar sus acciones y asumir la responsabilidad de lo que había hecho. La angustia la envolvía como una pesada manta, y Mia se sentía atrapada en un remolino de culpabilidad, preguntándose si su relación con su novio podría sobrevivir a esta traición la cual era responable.

El sonido del agua de la bañera llenándose con lentitud la sacó de sus pensamientos. Mia se levantó lentamente de la cama, sintiéndose físicamente débil por la resaca y emocionalmente destrozada por su falta de recuerdo. El agua caliente de la bañera parecía ser un refugio temporal del tormento que estaba viviendo.

Se sumergió en la bañera, dejando que el calor del agua la abrazara. Cerró los ojos y permitió que las lágrimas se mezclaran con el agua que la rodeaba. Los recuerdos fugaces de la noche anterior se deslizaron en su mente como sombras. Recordaba risas, música estridente, luces parpadeantes y, sobre todo, la presencia de un extraño, el hombre misterioso que la había llevado a la zona VIP del club.

El miedo y la confusión la invadieron mientras intentaba recordar más detalles. Aunque sus recuerdos eran fragmentados y borrosos, lo que sí estaba claro en su mente era que algo oscuro y aterrador había ocurrido durante esa noche perdida.

Mia finalmente salió de la bañera y se vistió con ropa limpia. Miró su reflejo en el espejo del baño y se dio cuenta de que su rostro llevaba el peso de la culpa y la tristeza. Sabía que debía encontrar respuestas, pero estaba demasiado asustada para enfrentar la verdad.

Entró en el pequeño bar donde trabajaba. Todo parecía extrañamente tranquilo, demasiado. Sin embargo, Mia necesitaba un día tranquilo debido a su terrible resaca.

Saludó a Viky, su compañera, y a madame Scarlet, la dueña. Pasó a la trastienda para cambiarse cuando se sintió repentinamente débil. Se agarró como pudo al congelador y jadeó. Se deslizó lentamente hasta el suelo, apoyándose en la pared e intentando controlar el ataque de pánico. Apenas podía respirar, y la cabeza no dejaba de dar vueltas hasta que finalmente todo se volvió negro.

Tardó dos días en despertarse, le informó el médico. No sabían a qué se debía el estado comatoso en el que la habían inducido, pero lo estaban estudiando. Además, parecía que había perdido una considerable cantidad de sangre.

El médico le dio el alta una semana después, cuando estuvo seguro de que estaba recuperada completamente, aunque Mia aún tenía sus dudas. No había querido hablar con él sobre el sueño recurrente que había tenido todas las noches desde que despertó amnésica.

El sueño era simple pero aterrador. Un hombre, el diablo en persona, la hacía bajar al infierno y la arrojaba a las llamas. Le ordenaba cometer el más grande de los pecados: matar a alguien, beberse toda su sangre, absorber toda la bondad de su alma y luego regodearse en su sufrimiento. Y lo peor era que en el sueño, lo hacía. La sensación de satisfacer al diablo la aterrorizaba y aun asi en el sueño eso la llenaba de felicidad.


A pesar de su lucha interna y el tormento constante, Mia sabía que debía enfrentar y descubrir la verdad detrás de esa noche olvidada. La oscuridad se cernía sobre ella, pero estaba decidida a desentrañar los secretos que la ataban a un destino incierto y a encontrar la redención que tanto ansiaba.




SAGA LLAMA INMORTAL 1. CAMINO EN LLAMAS (COMPLETO) (REEDITADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora