Cuando Mia abrió la puerta, se encontró con otro vampiro, un extraño cuya mirada parecía albergar siglos de conocimiento y oscuridad. Mia lo miró con cautela.
—¿Quién eres? —preguntó Mia con una voz temblorosa.
El vampiro sonrió, revelando sus afilados colmillos.
—Me llamo Jeremias —respondió con calma—. Y tú debes ser Mia, ¿verdad?
Mia asintió, sin saber qué esperar de este nuevo personaje en su vida.
—¿Qué deseas? —preguntó, todavía con desconfianza.
Jeremias miró a Mia con comprensión en sus ojos.
—Deseo lo mismo que tú, Mia —dijo suavemente—. Venganza contra Alistair. Ese maldito vampiro nos ha causado un gran sufrimiento a ambos, y juntos podemos derrotarlo.
Mia sintió una chispa de esperanza en su interior, aunque también había un atisbo de miedo.
—¿Cómo puedes ayudarme? —preguntó Mia, aún indecisa.
Jeremias le tendió el pequeño vial rojo.
—Con esto, puedes recordar y comprender lo que Alistair te hizo olvidar —explicó—. Pero ten en cuenta que la elección de vengarte y aceptar la inmortalidad te corresponde solo a ti.
Mia tomó el vial con manos temblorosas y lo miró fijamente. Sabía que este ser de la oscuridad la había ayudado una vez, pero la decisión final recaía en ella. El futuro estaba lleno de incertidumbre, pero al menos ahora tenía una opción.
Mia sostuvo el pequeño vial de sangre de Alistair en sus manos, sintiendo el dilema que le oprimía el pecho. Por un lado, estaba el miedo a la inmortalidad y todo lo que conllevaba, el temor a lo que podría convertirse si aceptaba el oscuro regalo. Por otro lado, la venganza latía en su interior como una fuerza ardiente, un deseo de hacer que Alistair pagara por lo que le había hecho.
Esa noche, Mia estaba en una encrucijada, una elección que cambiaría su vida para siempre. Respiró profundamente y miró a Jeremias, el vampiro que le había ayudado a recordar.
—Gracias —murmuró—. Por darme la opción de recordar y de elegir.
Jeremias asintió con respeto.
—La elección siempre ha sido tuya, Mia. Si decides beber la sangre y unirte a nosotros en la inmortalidad, te apoyaremos. Y si decides seguir tu camino como humana, también te respaldaremos. La venganza no es el único camino.
Mia sopesó sus palabras mientras mantenía el vial en su mano. Era una decisión que no podía tomar a la ligera. Las emociones la asaltaban, pero en su interior sabía que tenía que enfrentar su pasado antes de mirar hacia el futuro.
—Necesito tiempo —dijo finalmente—. Tiempo para comprender y decidir.
Jeremias asintió en silencio y se retiró, dejando a Mia sola en la oscuridad de su refugio. La elección de su destino pesaba sobre ella como una losa, y sabía que no podría escapar de su legado.
Mia miró fijamente el vial de sangre de Alistair. Sabía que en ese frasco se escondía el conocimiento que necesitaba para vengarse, pero también el poder para cambiar su vida de formas inimaginables. El vial parecía brillar con un tono siniestro, como si contuviera todos los secretos del mundo. La voz en su cabeza, una vez apagada por Alistair, volvía a susurrar su nombre, pero esta vez con una seductora promesa de inmortalidad.
El corazón de Mia latía con angustia mientras luchaba con el dilema que tenía ante ella. La promesa de la eternidad le resultaba tentadora, pero al mismo tiempo, sabía que si cedía a esa voz, se perdería en un abismo sin fin. Las lágrimas se acumularon en sus ojos mientras su mente se debatía en una tormenta de miedo y deseo. La elección que tenía que hacer le resultaba abrumadora, y la angustia la envolvió como una sombra oscura.
ChatGPT
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SAGA LLAMA INMORTAL 1. CAMINO EN LLAMAS (COMPLETO) (REEDITADO)
VampiroLa vida de Mia, una joven camarera cuya existencia rutinaria da un giro inesperado cuando conoce a un misterioso hombre en un club nocturno. Después de una noche de seducción y baile, Mia descubre que este hombre es un poderoso vampiro que la transf...