Enamorada de mi profesor de mates (corrigiendo)

Capítulo 3: Miranda

Narra Sandra:

En eso que él mirándome fijamente me pregunta...

-Sadrita, espero que no te duermas en los laureles como en tercero que si no te la vas a llevar buena de mi parte.- En eso que me doy la vuelta y continúo con mis amigas hacia la esquina para que cada una fuera a su casa a por las cosas necesarias para la fiesta.

Eran las seis de la tarde y me disponía a salir a buscar a mis niñas. Llego al el portal de Marta y como es normal tarda lo suyo en bajar. Me llega un washapp de ella diciéndome que va a tardar unos cinco diez minutos, ya me lo imaginaba de todos modos asique busque en mi bolsillo y tenía dos euros, y para hacer tiempo me fui al chino a comprar unas chuches. Entré al chino y me encontré con Miranda y me empezó a hablar...

-Hola Sandrita, ¿qué te pasaba antes?

-Hola Miranda, no me pasaba nada importante, cosas de adolescentes ya tú sabes.

-Ya claro a ti nada pero contigo y Antonio algo pasa porque estás muy rara últimamente con él, ¿se puede saber el por qué?

-Cosas de adolescente Miranda, te lo contaría pero no es algo importante.

-Ya...

-De verdad Miranda no pasa nada, solo que algunas veces me pone de los nervios y no me apetece cruzarme con él para hablar.

-Bueno eso espero. Hasta mañana Sandrita

-Hasta mañana Miranda

Por fin baja Marta, aunque tenemos que esperar un rato más a Anahí. Entre tanto aparece Rafael y se para a hablar con nosotras.

-¡Hola chicas!- Dice Rafael. Entre tanto yo miro a Marta y la veo roja como un tomate y decido responder yo.

-Hola Rafael, lo siento mucho pero estamos esperando a Anahí y tenemos prisa.

-Vale chicas, no os preocupéis la verdad es que yo también voy con un poco de prisa, adiós

-Agur Rafael

Nos da dos besos a cada una (motivo por el que Marta pasó de tomate de ensalada a tomate frito) y siguió su camino

Viene Anahí y nos vamos hacia mi casa. Pasamos una noche muy divertida, pero el problemilla fue que estábamos muy locas y gritábamos todo lo que podíamos.

No dormimos nada, eso hay que decirlo y lo peor fue que al día siguiente teníamos que entrar a las ocho y media al instituto y subir todas las escaleras, tres pisos para nuestro cuerpito.

Entramos al instituto y nos tocaba como cada jueves matemáticas a primera hora y luego la optativa que hubiéramos elegido. Resumiendo, tres primeras horas del jueves infernales e insoportables. Por fin había llegado el recreo. A todo esto Gonzalo habla con Marta y conmigo para idear un plan que consistía en hacer que Anahí se enamorara de él por lo tanto los dejamos solos en el recreo, que por cierto cuidaban Miranda, Antonio, Marco y Cristina. Al rato llega Rafael a hablar conmigo de que se quiere llevar a Marta para hablar de cosas y al final como es normal por no decir un horror me acabo quedando sola y para colmo va Yolanda y le dice a Antonio que quiere hablar con él y que si podía subir al piso de la sala de profesores. En ese momento mi mirada de asesina era insuperable y como tengo buena suerte (la mejor del mundo) me llega un mensaje de Marta diciéndome que se iba con Rafael las próximas horas y que me inventara algo para decirles a los profesores. Cuando termino de leer el mensaje veo a Antonio con Yolanda hablando en la ventana del edificio principal. Esos serán los típicos momentos en los que me entran ganas de no haber existido.

HOLAAA, QUE QUERÉIS QUE OCURRA CON TODAS ESTAS RELACIONES QUE SE HAN IDO FORMANDO? LO SENTIMOS POR TARDAR TANTO EN ESCRIBIR PERO ES QUE NO HEMOS ENCONTRADO HUECO. ESPERAMOS QUE OS GUSTE, VOTEN Y COMENTEN PLIS.