CAPITULO 9

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El despertador me despierta tan puntual como siempre, obviamente porque es un despertador y no... Nikki en quien no se puede confiar para estas cosas. 

Despierto a Nikki una vez. Me voy a la ducha. Me lamento por mi... pubis totalmente depilado. Salgo de la ducha. Vuelvo a despertar a Nikki. Preparo los desayunos. Despierto a Nikki de nuevo y tras oler su desayuno, se despierta. En serio es para mi suficiente razón como para hacer una fiesta con stripper incluido, en serio. 

- Toma tu desayuno, Nikki- digo poniéndole el plato delante de la cara. Ella lo toma poniéndome cara de asco y comienza a comer sin decir palabra.- ¿Que pasa? ¿No disfrutaste ayer suficiente arrancándome los pelos de mis partes femeninas? 

- ¿Partes femeninas que tienes ochenta años?- se burla.- Llámalo vagina, coño o como te apetezca... todo el mundo lo llama así. 

- Eso no es lo que estaba preguntando, pero bueno es saber que conoces muy bien la jerga de la calle- digo apuntando con el cuchillo a su cara. 

- Es que tu no estas en el siglo XXI, abuelita- se chulea.- Sé una niña grande y llama a tus partes como se merecen. 

- Está bien. Ya he tenido bastante por hoy- digo dejando mi plato en la mesa de la "cocina".- ¿A que hora entras en el hospital? 

Se queda callada unos segundos. Esta pensativa hasta que decido interrumpirla. 

- ¿Qué pasa?- pregunto preocupada. 

- ¡Joder! Estaba segura de que sería yo la que te haría esa pregunta y no tú a mi- dice sin ninguna ápice de felicidad en su rostro. 

- Yo también pensaba que haría las practicas en un hospital, pero ya ves que no. Lo mejor es seguir adelante. 

- Así me gusta. ¡Con un par, de ovarios!- dice guiñándome un ojo.  

Nikki termina su desayuno mientras yo me visto. Simplemente escojo del montón de mi ropa unos vaqueros ajustados, una camiseta blanca y unos zapatos de deportes. ¡Total, voy a un gimnasio! 

- ¿No iras a así verdad?- pregunta Nikki recorriendo mi cuerpo de arriba a abajo con la mirada. 

- ¿Sí?- pregunto tanteando el terreno. Con Nikki al mando de la moda es mejor caminar con pies de plomo. 

- ¡Por encima de mi cadaver!- grita Nikki horrorizada mientras comienza a quitarme la camiseta.- Ahora mismo vas y te pones esta blusa lencera con encaje en los bordes...- dice pasándome la camisa en cuestión que es de color perla. 

- ¿Te has dado cuenta de que es pleno invierno, verdad?- pregunto a Nikki levantado un ceja en señal de desafío. 

- Me importa un mierda. Te pones un chaquetón encima. Además en los gimnasios hace mucho calor.- Ella tienen en realidad un poco de razón en eso.- Y también te pones estas botas mías- dice lanzándome un par de botas marrones de caña estrecha que tienen tacos y son hasta por debajo justo de la rodilla. 

- ¿Más tacones?- me quejo mientras lanzo una mirada mortal a las botas.

- Sería una pena si Dios nos hubiese otorgado el mismo numero de calzado y no lo usaremos en nuestro propio beneficio. 

- Diras en "tú" beneficio- apunto. 

- Lo que sea- dice agitando una mano. 

Como buena prima, hago lo que me dice y me pongo lo que ella me ha dado. ¡Menos mal que ha aprobado mis vaqueros al menos! Lo cierto es que como siempre que me viste ella, estoy mucho más guapa que normalmente y parezco más adulta también. 

- Ponte un poco de maquillaje, Olivia- dice Nikki através de la puerta del baño. Como siempre, hago toque me dice. 

Al final me cojo un charreton azul marino, las llaves del coche y me dispongo a salir del dormitorio. 

- Te olvidas de esto- dice Nikki pasándome el pequeño neceser negro. 

- Gracias- digo llevándome una mano al pecho. Nunca. Nunca puedo olvidar mi kit de diabetes. 

Sí, en efecto. Tengo diabetes tipo uno por lo que necesito inyectarme insulina, a parte de controlar periódicamente mi nivel de glucosa en la sangre. Al ser diabetes tipo uno significa que es hereditaria, en el mayor de los casos. Y lamentablemente como todos los tipos de diabetes, no tiene cura. 

Me subo al coche y tomo unas cuantas respiraciones antes de comenzar mi primer día de practicas. 

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¡GRACIAS! 


SOLO 1 RONDA (faltas de ortografía incluidas hasta corrección)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora