Tutorias. Aprendiendo a amar.

¿Quien fue?

Derek

Aún estaba de piedra. Tenía dudas, muchas dudas repentinas sobre mi tutora. Por ejemplo, ¿Por qué el chico la llamaba Hannah? ¿Levine es su nombre o su apellido? ¿Por qué reacciono así? ¿Quién es el de rulos? ¿Qué significa para Levine?

Pero había una que no me iba a dejar en paz, y tenía una enorme curiosidad por saber la respuesta: ¿Cuál es el pasado de Levine?

Ella es todo un misterio. No habla con nadie, parece que todos le tienen cierto miedo, nadie la llama por su nombre, es muy fría. Y luego llega este chico y ella reacciona de tres formas distintas.

Ya lo había dicho, esta chica me pone los pelos de punta. No sé quién sea en verdad, pero la actitud y su forma de ser que ella muestra, te aleja de querer descubrirlo. Pero yo no, yo lo averiguare. Descubriré que esconde, descubriré cuál es su misterio.

Empecé a caminar, buscando mi salón. Sin Levine me perdí. No es que la necesite, pero es mi primer día, y no conozco la escuela. Revise mi reloj, faltaban 15 minutos para que acabara la clase. No tenía caso seguir buscando el salón. Así que recordé el camino hacia el jardín, y fui a tomar aire.

Los rayos de sol de esta mañana, desaparecieron. El cielo estaba nublado. Pronto llovería. Me senté en una banca, y pasee mi mirada por el campus. Repare en el árbol, donde mi bruja personal y yo charlamos/discutimos/insultamos, y me pareció ver a alguien sentado ahí. Era un árbol grande, frondoso, y alejado. Peco de ser curioso, así que fui a ver quién estaba allí.

No me la imaginaba ahí, y mucho menos en esa postura. Estaba sentada, con la vista perdida, abrazaba sus piernas con sus brazos, y había una pequeña marca de lágrima en su mejilla. Estaba sorprendido, atónito. Jamás imagine que la Levine que conocí hace unas horas pudiera estar así. Bueno, no es que la conociera de años, pero no hay que ser un genio para darse cuenta de que esta chica es muy fuerte de carácter, imponente, dura, fría, directa, rebelde y bastante hermosa.

Verla ahí, fue una cosa que me intrigó más. La verdadera Levine, ¿Es fría, dura y rebelde? ¿De verdad es así? O solo es una farsa, y en realidad es indefensa y vulnerable, como ahora se ve.

No sabia que hacer. Ella seguía allí, perdida. Y no se había percatado de mi presencia. De repente sentí unas ganas de protegerla, de abrazarla y de consolarla. Y casi me convenzo de hacerlo, pero su voz me freno.

-Deja de mirarme con lastima, Connor. Y regresa a tus asuntos- hablo hueca. Sin ninguna expresión en la voz. Ni sarcasmo, ni odio, ni burla. Nada. –Disculpa, si te interrumpo. Pero alguien debe mostrarme las aulas, presentarme los profesores y todo eso – me cruce de brazos. Quería ver si con eso ella volva. –Privacidad, Connor. Respeto. Necesitas aprender muchas cosas. Obedecer, por ejemplo. Lárgate, y déjame sola- seguía sin inmutarse. Parecía una estatua parlanchina.

-¿Sabes? No soy el único que debe aprender cosas. Tú debes aprender a dejar tus asuntos personales de lado, y hacer caso a tus responsabilidades. Solo porque tu novio, vino a hacerte una escena, vas a desentenderte de los que te corresponde hacer. Sé un poco madura y profesional, Levine. Esto no es la secundaria – en ese momento regreso en si. Porque el verde de sus ojos se volvió casi negro. Se levanto y giro en mi dirección. Realmente me intimido con su postura. Esperaba un insulto o algo pero no dijo nada de eso.

•

Hannah

Lo mire con odio. Por supuesto que no es la secundaria. Esos años fueron los más tormentosos de mi vida. El ser humillada, ignorada, marginada. Es algo que nunca se olvida. Y por tipos como Connor, que se creen los dueños del mundo, y piensan que pueden pisotear a quien este en frente.

Obviamente no es la secundaria. A esta edad ya no se es tan estúpida, tan ingenua, tan noble. Porque si lo eres te pisotean, se burlan de ti. Pero de eso aprendes, que el ser amable no sirve ni una mierda.

-Connor, por alguna razón, solo Lizzie y Dave están cerca de mi. No te metas conmigo. No te lo recomiendo –lo mire, y parecía sorprendido.

Empece a alejarme, como debí hacerlo con Luca aquella vez. Camine por los pasillos, como un fantasma. Todos me miraban, pero no me importaba. Ser el centro de atención, como ser la invisible, es lo mismo. Vi a Lizzie acercarse, parecía preocupada. Movia los labios, pero no le escuchaba lo que decía.

Mi mente estaba en otro lugar. Escuchaba otra cosa.

“Venga Hannie, que las amigas se comparten todo, ¿no?”

Pase de largo y llegue con Sommer. De alguna manera, me sentía bien hablando con el. Abri la puerta y me sente en el sillón verde que tenia junto a la ventana. Ese era el lugar al que iba cuando tenia una crisis. Como ahora.

-Levine, ¿Qué paso? – Sommer se sento frente a mi en una silla acojinada. Yo miraba por la ventana. Pero sabia que expresión tenia. Los labios y el ceño fruncido, y los ojos abiertos.

-Estuvo aquí. Me vio. Me hablo. Se acerco – realmente me dolia pensarlo. Y escalofríos recorrían mi cuerpo. Sommer se irguió en su asiento. –Levine. Levine, voltea. Mirame, Levine- escuchaba su voz, pero algo lejana, estaba dejando de sentir mi cuerpo, y se oscurecia todo.

Lo único que pensé fue: “está pasando, de nuevo está pasando”. Pero recorde que ya no lo iba a hacer, iba a luchar si volvia a pasar.

-¡Levine! ¡Levine, hazme caso! ¡LEVINE!- sentí las sacudidas y los gritos de Sommer. Y lentamente me gire hacia el. Su rostro realmente demostraba preocupación. Mucha preocupación, para ser sincera.

-Levine, tranquila. Estas aquí, conmigo. Respira, regresa. Levine regresa – poco a poco empece a sentir mi cuerpo de nuevo. La habitación se ilumino un poco más. Y escuchaba a Sommer perfectamente.

-Estoy bien, ya paso –el suspiro aliviado. Y se volvió a sentar en la silla. Se froto la cabeza con un poco de deseperacion, y me miro. -¿Cómo llegaste? –sus rostro de repente se volvió 10 años mas viejo. –No lo se, estaba en el pasillo con Connor. De ahí, no recuerdo nada. Hasta el momento en el jardín – intentaba hacer memoria, pero todo estaba borroso.

– ¿El jardín? ¿Cómo despertaste en el jardín? – se veía cofundido. Yo lo estaba un poco. No es normal que me despierte antes de llegar con el. –Estaba con Connor, creo –suspire cansada. Cerre mis ojos e intente recordar. Y lo hice.

–Estaba con Connor, no se que me dijo. No lo entendí bien, pero reaccione cuando me dijo “Esto no es la secundaria”. Le dije que no se metiera conmigo, y me fui. Solo hasta ahí se que paso. Hasta que llegue a la ventana. Eso es todo – abri los ojos. Sommer estaba expectante.

-Connor, ¿el te despertó? – asentí y el fruncio el ceño muy confundido. –Puede llegar a ser muy irritante. Supongo que eso fue lo que me despertó – me encogi de hombros. El parecía sorprendido, sacudió su cabeza. –Levine, ¿A quien viste? ¿Con quien hablaste? ¿Quién te hizo recordar? – me quede callada. Decir su nombre era una tortura. No quería hacerlo, pero era necesario.

-Fue Maslow, Luca Maslow- dije y temblé de rabia.