Capitulo 3.

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Ella podía escuchar una suave voz quejarse débilmente, la castaña se revolvió un poco y al estirar su mano pudo sentir algo húmedo y frío bajo ella, sus ojos se abrieron de golpe y al girar su mirada se dio cuenta de que se trataba de Lauren, su mano sin querer se había posado en su rostro, la chica estaba empapada de sudor mientras seguía susurrado y quejándose en voz baja, el corazón de Camila comenzó a latir desesperadamente en su pecho, ella sin pensarlo se deslizo hacia ella, presionado su cuerpo contra el suyo, Lauren estaba boca arriba el cabello pegado a su frente por el sudor y su ceño fruncido como si ella estuviera sufriendo.

- ­Lauren­-Ella susurró su nombre moviéndola ligeramente

-­No, no, déjame-­ Parecía que el contacto de Camila hicieron de su pesadilla aún más real, ella comenzó a moverse y quejarse con más fuerza

-­Es un sueño Lauren, tienes que despertar­-Su tono de voz aún era suave, sus manos se aferraron fuertemente a cada lado de sus brazos, Camila se había arrodillado a su lado para poder mantener un control de los temblores de la chica ­

-Para, para, me haces daño­- Camila miro aterrada hacia todos lados pensando que hacer, si salir y avisarle a los padres de Lauren, quizás ella estaba teniendo un tipo de ataque o tratar de despertar a la chica de cualquier manera, Camila tomó la cara de Lauren entre sus manos tratando estabilizarla

-­Lauren despierta, despierta ahora­- Camila le hablo fuertemente al oído, la chica rápidamente abrió los ojos y trato de alejarse de Camila, Lauren aún estaba aturdida mirando hacia todos lados, tratando de localizar en donde estaba, Camila alargo una mano para tocar el muslo de la chica y cuando lo hizo Lauren salto ante el contacto

- Tranquila, soy solo yo, Camila­- Los ojos verdes buscaron el sonido de su voz

- ­¿Camila?­- Sus ojos se encontraron con los suyos, Camila los pudo ver llenos de dolor y miedo, ellos brillaban por las lágrimas atrapadas, la castaña automáticamente sintió su pecho apretarse, Lauren sufría pesadillas y estaba segura que era por el atentando que de niña le había pasado, Camila se acercó cautelosamente para tomar la mano fría de Lauren entre la suya entrelazando sus dedos para luego apretarla suavemente haciéndole saber que ella ya no estaba soñando.

Lauren bajó la mirada hacia sus manos y el calor que Camila le trasmitió relajo su cuerpo al momento, así estuvieron minutos hasta que la respiración de Lauren se regularizo, la chica de ojos verdes no quería soltar su mano, se sentía tan bien como cuando encuentras esas pocas cosas que pueden encajar a la perfección en un puzle que prácticamente nadie puede armar, Lauren se sentía de esa manera, totalmente desarmada, miles de piezas esparcidas que probablemente nadie tomaría el tiempo o podría tratar de repararla, Lauren soltó un suspiro antes de desenredar sus manos suavemente, Camila frunció el ceño levemente al sentir la falta de esta.

-­Yo...-­ Lauren luchó contra sus palabras entre lo que quería decirle y en lo que debía decirle ­-Perdón por despertarte-­ Su voz ronca y adormilada pusieron su piel de gallina, Camila tragó saliva ­pesadamente

-No te preocupes, estabas teniendo una pesadilla ¿Verdad?-­ Lauren solo asintió con la cabeza pasando una mano por su cabello ­-¿Tu.. quieres hablar de ello?-­ Antes de que pudiera contestar su alarma comenzó a sonar, Lauren tomó eso como una señal antes de pararse y encerrarse en el baño para prepararse para un día más, Camila se dejó caer en la cama, gruñendo levemente, ella enterró su cara en la almohada y ese olor tan particular en ella dibujaron una sonrisa en sus labios, era la almohada de Lauren, Camila la abrazo contra sí y cerró los ojos preguntándose cómo podría ayudarla.

Después de esa discusión todo parecía ir en una montaña donde solo puedes deslizarte hasta lo más profundo, Camila intentó de todo para llamar la atención de la chica de ojos verdes, pero ella parecía haber puesto una pared incluso mucho más alta de la que ya tenían, esa fue la primera vez que después de dos días había cruzado más de tres palabras, Camila se sentía frustrada ella solo tenía diez días más para estar en casa de Lauren, compartiendo prácticamente todo el día, ella sabía que después de irse toda oportunidad de entablar una amistad con Lauren serian nulas, ella necesitaba ganar la confianza y amistad de Lauren pero Camila tampoco quería forzar las cosas, ella suspiro ¿Cómo es que la hermana de su novio podía robar en estos momentos cada uno de sus pensamientos?

My brother's girlfriendDonde viven las historias. Descúbrelo ahora