Un Destino Inesperado

XXXVII

Cuatro años después.

Salí de aquel lugar que tanto odiaba después de que pasó aquello. Al salir vi a Hans recargado en el auto esperándome.

-Debo volver al trabajo, ¿te llevo a casa?

-No, tomaré un taxi, tú ve tranquilo.

-De acuerdo-se acercó a mi y me besó, a penas rozando la comisura de mis labios, subió a su auto y se fue. Yo tomé un taxi y me dirigí a casa. Entré y vi que el cuadro dónde se encontraba la última ecografía de Edward estaba tirado en el suelo, un escalofrío recorrió mi cuerpo. No había manera de que el cuadro estuviera aquí, estaba en mi habitación. Lo tomé y vi que el vidrio se había roto. Con algo de miedo subí a mi habitación y vi que el cuadro dónde se encontraba una foto mía con Hans besándonos estaba roto, pero sin la fotografía. Mis cuerpo comenzó a temblar, saqué mi celular y llamé a Hans- ¿Amor?

-Ha-Hans, tienes que venir-mi voz sonó temblorosa-

-¿Qué pasó?-preguntó alarmado-

-Ven lo más rápido posible, por favor.

-Quédate ahí. Voy saliendo-colgó-

Revisé toda mi habitación para ver si encontraba la foto, pero no estaba. Revisé los demás cuartos y todo estaba tal y cómo los dejé. Fui a dónde Hans había hecho su "despacho", en toda esa habitación habían fotos de ambos juntos, revisé y ya no estaban. No quería pensar en nada, no era capaz de procesar aquello que estaba pasando. Bajé a la cocina y me senté. Miré a todo mi alrededor y todo estaba igual. La puerta se abrió y me dirigí hacia ella.

-¿Qué pasó?-preguntó Hans mirando el cuadro de Edward que se hallaba en sus manos-

-Llegué de la clínica y cuando entré vi que el cuadro estaba tirando en el suelo, ¡es imposible que el cuadro esté aquí si estaba en nuestro cuarto!-estaba histérica, demasiado- subí a nuestra habitación y nuestro cuadro está roto, sin la foto-continué-

-Dios-suspiró y luego me abrazó- sabía que no debía dejarte sola. ¿Crees qué haya sido él?

-En realidad, es c...

-Buenos días señores-saludó la empleada pasando a la cocina, a lo que respondimos su saludo-

-Juro que si es él voy a matarlo.

NARRA NARRADOR.

-Señorita, vino a visitarla un muchacho. Dijo ser un viejo amigo suyo y que estaba ansioso por volver a verla.

-¿Entró?-preguntó Hans-

-No, justo iba saliendo a hacer las compras.

-Mierda-masculló Hans-

-Gracias Ashley-dijo ella sobresaliendo-

-Por nada-volvió a la cocina-

-Hans, sea quién sea estuvo aquí.

-¿A quién tienes en mente?-preguntó Hans totalmente enfurecido-

-Zayn-él tomó ambas manos con sus manos- Hans, esto no es nada bueno.

-Lo sé.