Lo Imposible. Wigetta.

Capitulo 6.

Narra Vegetta. 

Había llegado a Londres. Y llevaba rato intentando hablar con Willy pero no cogía el móvil. La quinta vez lo cogió.

Willy: ¿Hola?

Vegetta: Hasta que contestas chaval tengo rato llamándote.

Willy: Lo siento he estado ocupado. -dijo algo triste-

Vegetta: Todo bien compañero?

Willy: Sí, sí. Te tengo que colgar estoy algo ocupado.

Vegetta: Vale. Willy.

Willy: ¿Si?

Vegetta: Te amo.

Willy: Y yo a ti.

Rápido colgó la llamada, sé que algo le pasa en cuanto regrese lo averiguaré.

Narra Willy.

La verdad Luzu tenía razón no iba a negarle la oportunidad al este bebé de crecer con su familia, de vivir.

Willy: Tienes razón. -Mi móvil sonó por quinta vez. Así que respondí.

*Después de la llamada*

Mire el reloj de mi móvil y vi que ya era tarde.

Willy: Ya es muy tarde creo que ya me voy.

Luzu: De ninguna manera tú te quedas esta noche aquí.

Willy: No, no yo tengo mi casa además no quiero causar molestias.

Lana: No las causas además no te dejaremos que te vayas así como estas.

Willy: Vale, se los agradezco en verdad solo un última cosa. ¿Porque no se sorprendieron al saber que podía tener hijos?

Luzu: Pues porque hace poco vimos un reportaje pero no creímos que fuera verdad pero cuando nos lo contante tú ya estábamos preparados.

Willy: Vale.

Luzu: Bueno te gustaría grabar algo aprovechando que estamos aquí?

Willy: Si por que no.

Grabamos un par de cosillas antes de dormir. A la mañana siguiente desayunamos o mejor dicho Luzu y Lana desayunaron ya que a mí no me apetecía nada. Ese día estaba con las náuseas a tope. Después de agradecer por el hospedaje volví a casa.

*Dos días después*

Estábamos en el aeropuerto Luzu, Lana y yo. Cuando siento unas manos rodear mis hombros.

-Hola Chiqui. -sonreí.

Willy: Quizá debería irse ya que mi novio no tarda en venir.

Vegetta: Que suerte tiene ese hombre de tener a alguien como tú con ojos de chino.

Willy: Es que es tonto.

Luzu: Wigetta a la vista. -dijo Luzu en tono burlón.

Después de dar la bienvenida subimos al auto camino a casa.

Narra Vegetta.

Íbamos camino a casa. Luzu venia manejado, Lana de compiló y Willy y yo en los asientos de atrás.

Lana: Y como te fue Vegetta.

Vegetta: Muy bien. La verdad Londres es muy bonito.

Lana: Me imaginó.

Willy Estaba algo lejos de mí así que lo acerque a mí y lo abrase por la cintura.

Willy: Quédate quieto Samuel.

Vegetta: No sabes cuánto te extrañe.

Luzu: Los estoy vigilando.

Soltamos unas risitas.

Lana: Vegetta plis no presiones demasiado el estómago de Willy.

Vegetta: ¿Porque? -pregunte extrañado.

Willy: Por... Por nada -Dijo algo nervioso.

Vegetta: ¿Hay algo que deba saber?

Luzu: Creo que Willy y tu deben hablar.

Willy: Luzu podrías detener el auto? - volteé a ver a Willy y estaba algo pálido con sus ojos cerrados y respirando profundo.

Luzu: ¿Porque? -después de verlo por el retrovisor entendió. - No, no Wilfred en mi auto no.

Lana: Para ya Luzu.

Luzu detuvo el auto y Willy salió corriendo, yo lo seguí. Cuando estuvo algo lejos vomito más a ya de darme asco me preocupe.

Vegetta: Estas bien?

Willy: Si, si ya paso.

Vegetta: Aún estas enfermo verdad?

Willy: No en realidad te explico en casa si?

Vegetta: Vale.

Volvimos al auto.

Lana: Estas bien Willy?

Willy: Si ya sabes cómo son estas cosas.

Necesitó que me expliquen todo.