Lo Imposible. Wigetta.

Capítulo 50.

Narra Samuel.

Cuando salí de la habitación fui directo al lobby para poder preguntar si tenían lo necesario para continuar con lo que deje pendiente en la habitación. Por desgracia me dijeron que no lo tenían, iba a volver cuando escuche que algunos compañeros Youtubers saldrían asi que pregunte si podía acompañarlos para hacia traer lo que necesitaba. Llegamos a un centro comercial y después de recorrer varias tiendas y comprar lo que cada uno nesecitaba. Estábamos a punto de volver cuando en una tienda vi un lindo unicornio de peluche que no dude en comprarle a Sally. Cuando lleguemos al hotel note que había más gente afuera de la que recordaba. Y eso que ya había obscurecido.

Willy: ¿Donde andabas? —Dijo saliendo de no se donde.

Vegetta: tranquilo que fui hacer unas compras.

Willy: ¿y que compraste?

Vegetta: le compre algo a mi pequeña. ¿En donde esta?

Willy: durmiendo en la habitación.

Vegetta: ¿La dejaste sola?

Willy: no esta valería con ella. ¿Enserio crees que dejaría a mi hija sola?

Vegetta: capaz.

Willy: por quien me tomas tío.

Vegetta: ya tranquilo que era broma. ¿Entonces a que bajaste?

Willy: para pedir mas agua para poder tenerla para la fórmula de Sally.

Vegetta: vale ¿subimos?

Willy: si ya me avisaron que subirán enseguida el agua.

Subimos a la habitación y le pedí de favor a Valería que si podía cuidar de Sally esa noche. Yo tenía otros planes.

Willy: ¿a donde te llevas a Sally? —Dijo Willy saliendo del baño.

Vegetta: tranquilo Willy estará bien.

Valería: Diviertance. —Dijo con una sonrisa.

Willy: ¿de que habla?

Vegetta: de esto.

(+18 XD se me fue un poco de las manos. Aceptó críticas y sugerencias.)

Me acerque a el y bese apasionadamente, recorrí con mis manos a mi antojo su espalda por encima de su camisa mientras el posaba sus manos en mi nuca y cabello. Cuando estaba a punto de quitarle su camisa de nuevo alguien tocó la puerta.

Vegetta: Me cago en... —Dije con la respiración agitada.

Willy: debe ser el agua sólo espera un segundo.

Me dio un beso antes de marcharse, yo me quite mi camisa y me tumbe en la cama, cerré por un momento mis ojos hasta que sentí un peso extra encima mía seguidos de unos besos que partían de mis labios hasta llegar al botón de mi pantalón.

Vegetta: tranquilo chico.

Dije atrayéndolo de nuevo a mis labios.

Willy: es que te necesitó.

Vegetta: y yo a ti pero ten paciencia.

Seguimos con el beso hasta que la ropa comenzó a estorbar. Quite su camisa y ahora estábamos igualados, en un ágil movimiento coloque a Willy debajo mía para comenzar a deshacerme de sus pantalones, cuando logre desabrocharlos y bajarlos note como escondían una erecion. Sonreí al igual que el. Sin duda yo estaba igual que el si no incluso más.

Vegetta: Willy esta feliz de verme. —Comente en tono burlón.

Willy: es que es tonto.

Me atrajo con ambas manos hasta sus labios y sin romper ese beso en un ágil movimiento término por quitárselos el mismo para comenzar a desabotonar el mio.

Willy: al parecer tu estas igual de feliz de verme.

Dijo al notar mi erecion.

Vegetta: y no sabes cuanto.

Nuestras voces ya estaban agitadas. Me acerque lo más posible a Willy sin llegar a lastimarlo y en uno de mis movimientos mi miembro rozó con el de el haciendo que soltáramos un gemido ahogado en un beso. Hice lo mismo que él hace rato y ahora era yo quien hacia el recorrido con los besos al llegar a su vientre bese al rededor de la ahora cicatriz que tenía ahí. A él no le agradaba mucho pero a mi me parecía hermosa. al llegar al resorte de su bóxer me detuve sólo para contemplar el rostro de mi Willy quien mantenía sus ojos cerrados. Con mi boca tome el elástico de su ropa interior y lo baje dejando al fin libre a su amigo, lo tome en mis manos y comencé a estimularlo haciendo que más gemidos salieran de la boca de mi compañero, con mi lengua rose la punta de su miembro sintiendo como se estremecía. Hasta meterlo todo en mi boca. En un momento pude sentir como sus manos se enredaban en mi cabello.

Willy: Para. Que, que quiero que tu también disfrutes.

Le hice caso y el se levanto de donde estaba sólo que el me pidió que me sentara al borde de la cama, se arrodilló frente mio y sin bajar por  completo mis bóxer liberó a la Vegeconda quien se sentía prisionera en ese pedazo de tela. Comenzó a estimularlo dando pequeños lenguetasos al rededor de ella, cosa que me hacia estremecer al igual que desesperarme hasta que termino por meterla toda. tome su cabeza  y comencé a moverla a mi antojo, después de unos minutos en esa posición comencé a sentir ese cosquilleo que va desde la columna hasta la parte baja del vientre.

Vegetta: Willy detente.

Willy: ¿Porque? ¿No te gusta? —Dijo seductoramente.

Vegetta: me encanta es sólo que no quiero terminar aquí.

Levante a Willy y lo acomode en la cama, fui a las bolsas que acababa de comprar para sacar el pequeño paquete de preservativos y poder sacar uno.

Willy: asi que por eso desapareciste ¿no?

Vegetta: ya vez.

Abrí el envoltorio y coloque el pequeño objeto de látex sobre mi miembro y deshacerme al fin de la ropa que me quedaba. volví a posicionarme sobre Willy. Estuvimos besándonos mientras lo preparaba. Cuando Willy estaba listo posicione a mi amigo en su entrada.

Vegetta: ¿Listo compañero?

Willy: más que listo.

Vegetta: Vale relaja el cuerpo.

Fui entrando en el poco a poco hasta que mi miembro desapareció en el. Espere un poco para que Willy se adaptara mientras yo seguía besándolo. Él enrolló sus piernas en mi cintura y en un movimiento me indicó que siguiera. Comencé con unas envestidas suaves que fueron aumentando de ritmo con cada una de ellas. La habitación se lleno de nuestros gemidos y del choque de nuestras pieles. En una de las envestidas llegue a tocar un punto clave en Willy quien no paraba de pedir más. Yo seguía con las envestidas hasta que sentí como Willy se contraía sabía perfectamente que él estaba a punto de llegar cosas que a mi me exitó más hasta el punto en el que ambos conseguimos llegar juntos.

Willy: Samuel.

Vegetta: Guillermo.

Fue lo que ambos pudimos decir al momento de terminar.