n o t a 4

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Ayer faltaste a clase, no te pude dar mi nota diaria ;) ¿Cómo te encuentras? Me dijeron que fue un resfriado, pero no me fiaba demasiado. Estás algo triste últimamente, y eso me preocupa mucho. Me gustaría muchísimo poder decirte que puedes contar conmigo, que tienes un hombro sobre el que llorar y alguien a quien contar tus problemas. Supongo que soy un cobarde por no atreverme a abrazarte cuando te veo triste, pese a que cada vez que te veo mis pies quieren salir corriendo hacia ti. En ese caso puedes llamarme cobarde, estás en tu derecho. Eso sí, prometo que te protegeré y te apoyaré siempre, aunque no deje que me veas. Seré algo así como tu ángel de la guarda. Suena mejor que cobarde, ¿verdad?


NinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora