─Dame la nota Alice.
─Toma─ Dijo extendiendo una hoja con de papel con un trozo de cinta hacia mí.
La tomé, y la pegué, giré y Alice estaba observándome con esos lindos ojos, desvié un poco mi mirada, levante mi Glock.
─Alex... Alex ¿¡Qué estás haciendo!?─ Dijo levantando sus manos.
No dije una palabra y disparé...
-----------------------------------------------------------------
*Narra Jonier*
La luz entra por las persianas, deben ser las nueve o diez de la mañana, observo y Luis sigue dormido, agh, con un desagradable rastro de saliva en la almohada, me levanto de mi cama, me baño, me visto y antes de salir le grito a Luis:
─¡Levántate inepto!, Está tarde.
─Ah... ¿Qué?─ Dice, o eso intenta.
─Si sigues así de perezoso te sacarán a patadas de aquí por no ayudar.
─Como sea.
─Adiós.
─Adiós.
Salí, iba caminando por el pasillo, estaba aburrido, pensé en que el director tal vez me diera algo por hacer, tal vez no... Llego al despacho de Sophie y puedo verla ocupada escribiendo algo en una libreta.
─Sophie...
─Oh, hola Jonier, dime, ¿Qué necesitas?
─¿Qué ya uno no puede venir a saludar?─ Le espeté─; pues necesito al director, ¿Está?
─Humn... Que genio, si, está ahí, puedes pasar.
─Gracias; supongo.
No me responde, la fulmino con la mirada y toco la puerta de la oficina.
─¡Adelante!─ Grita el director desde dentro. Y eso hago.
─Buenos días señor director.
─Oh hola Jonier, ¿Para qué me necesitas?
─Pensé que tendrías algo para encomendarme, digo, algo en lo que pueda ayudar.
─Pues, necesito que me hagas un favor, es fácil.
─Vale, ¿Qué debo hacer?
─Ve a la armería y toma un radio, ármate, pues necesito que salgas a un supermercado que queda dirección oeste de aquí... Solo necesito que observes la actividad durante unas horas.
─Sí señor, voy en el acto.
─Adiós.
Salí del despacho corriendo a la armería, tomé un radio y un revolver, salí, tomé un vehículo sin cruzar palabra con nadie y tomé camino al supermercado indicado.
*Narra Alex*
Solo se escuchó una bala, y el golpe seco del cuerpo al caer.
─Joder, eso sí estuvo cerca.
─¿Pero qué mierdas te pasa?─ Respondió Alice alterada.
─Te salvo la vida─ Reí.
─Mierda, que susto... Vámonos de aquí antes de que lleguen ese montón de cosas.
─Vamos, corre.
Tomamos carrera a la moto, nos montamos y aceleramos, pasamos una cuadra hasta que escuchamos sonidos de otras motos acercarse.
─¿Pero qué mier...?─ Fui interrumpido por disparos de ametralladora.─ Joder Alice ¿Qué pasa?─Grité alterado.
─Nos atacan decadentes.─ Gritó─ Mantén la moto firme, me sentaré al contrario para responder al fuego.
Mantuve la moto firme mientras ella se sentó de forma que su espalda quedase contra la mía.
─¡Dispara, Alice, dispara!
─¡Joder eso haré, cállate mejor!
Alice empezó a disparar con su Uzi a los que nos perseguían, tomé mi radio y hablé por él.
─Aquí A2, ¿Alguien me recibe? Es urgente.
─Aquí, ¿Qué pasa?─ Respondió alguien por el radio.
─10 manzanas al oeste de la legión, nos atacan unos vándalos, que alguien venga, rápido.
─Entendido.
─¡¿Alice cuantos son?!
─Eran tres motos, quedan dos, y se me acaba la munición de la Uzi.
─Joder, toma mi Glock.
Le entregué el arma y ella tomó su Glock y continuó disparando.
─¡Boom! ¡Otra fuera Alex, queda una!
─¡Acabala!
─¡Joder, la munición de la tuya se terminó y la mía está encasquillada!
─Mierda.
Se oyeron 4 disparos y la moto cayó, frené en seco y al girar a ver de dónde venían los disparos.
─¡Jonier, buena esa!─ Grité.
─!De nada, hablamos luego, llevo prisa!
─¡Vale, te debo una, adiós!
─¡Adiós!
Se perdió de mi vista a lo lejos.
─Vamos, a la legión Alex, ya estamos cerca.
─Si, vaya susto.
ESTÁS LEYENDO
The Beginning of the End©
Science FictionEs simple, la historia de un joven y sus dos primos, que de un día para otro se enfrentan a una apocalipsis zombie, o bueno, así les llaman... ¿Cómo más habrían de llamarle?... Pero bueno, los tres se ven enfrentados a grandes dificultades intentand...