LOS HERMANASTROS..."CAPITULO ESPECIAL" Capítulo 14 -descubrí mis sentimientos-

141 5 0
                                    

Yo: Kris estás diciendo tonterías yo no te gusto! Eso es imposible, estas ebrio? Yo no puedo gustarte, tu no me podrías gustar a mí, simplemente no es verdad, mañana vas a arrepentirte de todo lo que me estas diciendo
Kris: Ok, haz lo que quieras sale con el imbécil ese, ya no importa nada. Nunca me escuchas! Nunca me vez, tienes razón no debería haber dicho nada...
Yo: no actúes así si somos como hermanos ahora, mañana hablamos las cosas te parece? Ahora voy a ir a mi cita, descansa y ya verás que mañana todo va a estar más claro en tu cabeza.
Él me miro sin decir nada, entonces nuevamente rompí el silencio.
Yo: no seas niño, háblame, ahhh me cansas...
Kris: por favor solo vete ya dijiste lo que querías, ahora sal y has tu vida yo no voy a molestarte.
Kris se encerró en su cuarto, yo no sabía que pensar, no podía creer que esto era cierto, pero me dolió verlo tan triste aunque dentro de mi estaba segura que se debía a una borrachera o algo así, sentía un malestar en mi pecho como si corazón quisiese hablar pero yo fuera incapaz de comprenderlo aún así decidí salir igual, pero me sentía muy triste por aquella discusión funesta que había tenido, fui a la cita aquel doctor era tan guapo y amable, nos sentamos en restaurant y pedimos la carta, sentía que ni cabeza no estaba en aquel lugar, nos trajeron algo para beber y aunque la conversación era agradable no pude aguantar y pasados 10 minutos me quise ir porque no podía con la situación, pensé ¿que estoy haciendo? Debería ir y aclarar las cosas con Kris, después de todo nos conocemos hace más de un año y deberíamos poder hablar, le expliqué a mi cita que no me sentía bien y corrí para llegar a casa.
Abrí la puerta y ahí estaba Kris un tanto borracho tirado en el sillón medio dormido en un estado a todas luces deprimente, me dio mucha tristeza verlo así, lo levanté como pude y casi arrastrándolo lo llevé a su habitación y lo subí en su cama, le quité los zapatos, suspiré por el cansancio que me significo arrastrarlo hasta ahí y me senté al lado de él en la cama, el dormía, habían huellas de lagrimas en su cara mi corazón dolió al ver eso y lo limpié con mis manos, de pronto me quede mirándolo dormir y acariciaba su cabello en un gesto casi maternal, lo miré con cuidado, su color de piel, sus ojos su nariz sus labios, todo parecía estar tan en paz sentí como si mirara un cuadro, estaba contemplándolo y entonces extrañamente sentí mi cara muy roja, mi corazón comenzó a latir muy fuerte como nunca antes, puse mi mano en mi pecho por lo fuerte que se sentían los golpes, como si se me fura a salir, de hecho sentía que se podía escuchar a kilómetros, sentí que quien estuviera ahí podría oír como latía , ¿qué es este sentimiento? Me sentía ahogada, era tan extraño, me puse muy nerviosa así que quise pararme para salir de ahí pero cuando me estaba levantando Kris sujetó mi muñeca, no te vayas me dijo, creí al escuchar esas palabras que podía morir en ese minuto, Dios mío que es esto? Kris quiero irme le dije, no te vayas insistió, intenté safarme, por favor Kris quiero ir a mi habitación!! No te vayas volvió a decir, honestamente yo solo quería salir de ahí, como si tuviese mucho miedo de mis propios sentimientos, como si quisiera huir de mi destino, entonces él se puso de pie sujetó mi rostro con sus manos, me miro fijo a los ojos y de forma decidida me dio un cálido beso, aquel beso era tan distinto a todo incluso al que nos habíamos dado cuando recién nos conocimos aquella vez fue algo más bien provocativo insolente pero ahora? Ahora era indefinible, yo nunca había sentido algo así con un beso, lo miré y se me sentí conmovida entonces algunas lagrimas cayeron de mis ojos, el secó mis lagrimas con sus pulgares, y tiernamente me preguntó, que pasa? Sumergida en sus ojos abrí la boca y le dije: Kris tengo miedo! Esto es tan extraño...
El dio una tierna sonrisa y me dijo: yo no tengo miedo, porque te amo, de verdad de amo, es cursi es extraño no es lo que esperaba pero es verdad, te amo así como estas, antes ahora y siempre, me sentí segura, extrañamente segura, como si estuviera en los brazos de mi madre y nada malo me pudiera pasar, protegida, amada, llena de sentimientos puros que creía haber perdido, por dentro pensaba este hombre sabe todo lo que he hecho pero aún así le gusto, es eso posible? El rompió el silencio del abrazo y me dijo: ante mis ojos eres la más hermosa, la más inteligente, la más pura y la única, yo ya no tengo ojos para nadie más, porque mi vida tiene ahora sentido cuando te miro a los ojos, sus palabras rompieron mis barreras y esta vez fui yo quien lo besó, aquel beso nos llevo a las caricias, caricias tiernas pero también sensuales, nos sentamos juntos en la cama mi corazón parecía salir de mi pecho, sus manos desabrocharon con maestría mi vestido y yo me sentía torpe al quitarle la camisa, los besos no se detenían jamás el terminó de quitarme la ropa y se separó un poco, me observó profundamente, yo me sentí ruborizada, el levantó mi rostro y me dijo: eres perfecta! No sabes cuánto soñé con este momento, empezó a besar y dar pequeños mordiscos en mi cuello, como marcando mi cuerpo en cada beso, me tocaba pero era suave y agradable yo también lo hacía era como si quisiese que él también se sintiera amado como yo me sentía en aquel momento, quería esto, quería entregarme porque mi corazón me lo pedía, era como sellar un pacto único que solo nosotros dos podíamos comprender, el me tomo como suya dándome a sentir todo su amor, la penetración era intensa pero rítmica, suave profunda mis gemidos eran fuertes y los suyos también estábamos envueltos en una atmosfera de placer que yo jamás había experimentado, me sujetaba fuerte de su espalda y el sudor hacia resbalar mis manos, nuestra respiración era agitada, yo sentía un orgasmo tras otro, pero era tan distinto a lo vivido antes esto era tan profundo tan placentero, su cuerpo y el mío se acomodaban a la perfección como una sintonía el ritmo y el flujo de los movimientos era exacto, sin hacer esfuerzo podía percibir todo lo que ocurría en su cuerpo y el mío, pero no podía percibir nada del mundo exterior, no podía pensar en nada que no fuéramos nosotros dos ahí y ahora, el bajó por mi cuello a mi abdomen y de ahí hasta mi sexo, su lengua recorría mi interior y mi cuerpo se curvaba de placer, lo acaricié y cambiamos de posición esta vez fui yo quien dirigí aunque no sé si dirigir es la palabra porque había una complicidad que hacía innecesario ser dominante, el ver su cara de placer me hacía sentirlo a mí, nada era incomodo nada era violento todo fluía, sin necesidad de que lo dijese yo sabía que estaba próximo a acabar, para mí era mi primera vez en mucho sentidos, porque sentía por primera vez que el sexo era diferente, era un acto tan humano, tan de piel pero al mismo tiempo tan elevado, también era para mí la primera vez teniendo sexo sin preservativo, ni siquiera había pensado en ello, tenía curiosidad por la sensación, pero también me sentí extrañada de mi misma y de la confianza que sentía con él, como si no fueran necesarias ningún tipo de barreras de pronto sentí un calor enorme en mis entrañas, su cara y su cuerpo me hacían sentir más profundo el momento, ese calor me hizo acabar a mi también, acabamos juntos y nos mirábamos con una ternura que jamás creí podía existir en el sexo, no solo nuestros cuerpos se habían combinado perfecto si no que nuestras almas tambien, caímos agotados en la cama, te amo me dijo con un tono seguro y sin darme cuenta yo estaba respondiendo; yo también te amo, realmente estoy enamorada, quizás hace mucho que lo estaba pero no podía darme cuenta entonces pensé, ¿se puede encontrar el amor así? Con alguien que jamás creíste? De forma inesperada? Puede el amor estar latiendo fuerte y tu no escuchar sus latidos por tanto tiempo?.
Estábamos abrazados entonces el me dijo: te acuerdas lo que te dije del baile? Pues ahora creo que seré el mejor bailarín del mundo, yo solo lo besé, me sentía feliz, completa y podría haber muerto en ese minuto porque sentía que mi vida ahora sí había valido la pena, pensaba en cómo me gustaría pasar así el resto de mi vida ahí abrazados, sin miedos sin vergüenzas, sin el tiempo, ahí juntos todo desapareció, incluso todo lo que él y yo hayamos vivido antes, ya nadie existía, nos dormimos así desnudos abrazados uno al lado del otro con un sentimiento tan nuevo que da miedo tan profundo que da pavor pero tan hermoso que vale la pena ser vivido, a la mañana siguiente desperté y nos vi ahí abrazados, era tan bello, tenía la sensación de estar viendo una película, yo la que no creía en el amor, la que no creía en nadie, estaba ahí idiotizada mirando a ese hombre dormido y mi corazón no dejaba de latir, esto es el amor? Que es el amor? Es como se ve en las películas o en verdad es así, dos personas que se gustan tanto que no son capaces de darse cuenta y viven chocando una con la otra, hay tanta pasión que ni ellos la ven y discuten por cosas sin sentido, más un día se miran a los ojos y todo cambia, quiero creer, ahora quiero creer que lo que estoy sintiendo es amor, preparé el desayuno, comimos nos reímos vivimos, estábamos de cierta forma ambos sintiéndonos vivos como nunca antes, de ahí en adelante los días transcurrieron casi todos así, tan felices que parecíamos idiotas, seguí mi tratamiento, ya me quedaba una semana para terminar y mi cabello casi llegaba a mis hombros, vivíamos como una pareja y nuestra vida sexual era explosiva, era como si siempre quisiésemos estar el uno con el otro, pero éramos conscientes de que pronto volveríamos a casa y no podíamos volver como novios, como íbamos a hacerlo ahora? Por esa misma razón decidimos que una vez terminado mi tratamiento permaneceríamos un mes más en nuestro departamento para pensar bien las cosas, para planificas para poder disfrutarnos y ver cómo íbamos a hacer en casa, cómo explicar todo esto, como vamos a enfrentar ante todos esta nueva vida ahora juntos


Los HermanastrosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora