Esta noche

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Bueno, sinceramente, mattias no m ha dicho nada después de eso, apenas son las 10:00 p.m. y estoy sola en mi casa, mi bellisima y preocupada madre se fue con mi padrastro a donde no se, y mattias me trajo y me dejo sola. No se que hacer.

Suena el teléfono...

-Buenas?

-Hola Maddison

-Mattias, que haces?

-Estaba aqui donde mi amigo, ahora estoy de camino para allá

-Y que diablos quieres que haga?

-Preparame algo.

-Si señor soy su criada.

-Nos vemos en un rato

Me pare del sofá y me dirigí a la cocina, se qué no deberia hacer nada pero si voy a tener sexo quiero que por lo menos saque una sonrisa. Me dirigí a hacer una pizza casera de la que compramos en el super y puse una palomitas, me imaginé que mattias queria ver una pelicula hací que busqué netflix para ver si queria ver una. Fui a darme un baño en lo que la pizza tardaba y aproveché para ponerme la ropa interior mas sexy que tengo y me puse una ropa medio desnuda, sali y la pizza estaba lista, justamente mattias estaba entrando.

-Que hiciste Maddison?

-Que te importa?

-Deja tus sarcasmos para el sexo.

-Eres tan directo

-vamos ver una película.

Nos sentamos en la sala junto con unos pedazos de pizza y las palomitas, sólo nos sentamos y vimos una película de acción.

- No me tortures Mattias.

-En que te torturo.

-Sabes perfectamente

-Asi que ya quieres...Bueno vamos.

Se sube rápidamente y me sube en su hombro como si fuese una muerta acabada de morir. Subió las escaleras y me llevó a la habitacion de huéspedes. Me tiró fuertemente a la cama y se abalanzó sobre mi. Me estaba besando rigidamente, mientras me quitaba la ropa, cuando ya estaba nada mas en ropa interior se comenzó a quitar su ropa, hasta que quedo su pecho totalmente descubierto, ohh Dios que sexy!, comenzó a besarme en cuello hasta los brazos bajaba lentamente por mis bragas hasta llegar a mi tanga. Hasta que me di cuenta que me quitó el brasiel.

-Tienes unos senos tan bellos.

-Ehh, no tenia que saberlo pero, gracias.

Si señores, Mattias me estaba lamiendo los senos, hasta que llegó hacia mi tanga y me la quitó, la tiró al piso al igual que su calzón.

-Estas lista?

-Tienes un condón?

-Si

-Pues ya estoy lista.

Y comenzó a penetrarme y yo a gemir, solo sentia dolor y placer.

-Di mi nombre

-Mattias!

-Te gusta?

-Si!

Hasta que llegué a ver el cielo...

Jugando con mi hermanastroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora