Que tal, si no se

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Narra Maddison

*suena la alarma*
-Mierda! -digo desde que suena ese horripilante sonido de la alarma.
Era un día típico igual que al de todos los dias, 5:00 a.m. Indica la hora de mi alarma, no querer levantarme era típico, pero con está resaca que tengo...todos los días es diaria mi situación, levantarme, arreglarme y dirigirme hacia la empresa esperando avances tanto económicos como sociales, pero no, todo seguía igual...

-Buen día señorita -me decía la secretaria que siempre está sentada justo al lado de la puerta, con un vaso lleno de café...pues es típico.

-Buenos dias Teresa -sonrió y entro a la oficina-

-Emm...hay una junta en 5 minutos, es que llego un joven que quiere hacer negocios para la empresa -dice ella entrando y dejando el café en la mesa-

-De verdad -hago mueca- y yo que hoy no estoy por visitas, pero ya que, gracias nena -sonrío y me coloco la chaqueta-

Me dirijo hasta el salón de juntas, ahí solo nos juntamos el vicepresidente de la empresa, algunos cargos mayores y yo, por lo tanto es una junta más pequeña de lo que debería ser, entro al lugar y todos se levantan y me saludan, sonrío cordialmente y me siento en mi lugar, en verdad no soy muy amable, pero tengo aunque sea que fingir un poquito, me quedo mirando hacia el frente, habia un hombre con el pelo largo, estaba de espaldas, se me hacía reconocido a...mejor ni pienso en eso, eso es pasado, muy pasado.

-Buen dia, mi nombre es Mattias Steward, vengo de vivir en los Estados Unidos, estoy aquí en Inglaterra buscando empresas para poder invertir dinero y también tener algo porque preocuparme en la vida...buena presentación ¿No? ¿Que dice usted señorita Maddie? -dice con una sonrisa en su rostro y con su ego a mil-

-Estupido -digo entre dientes- Pues, usted no tiene nada en que preocuparse en la vida como para venir a querer invertir dinero en mi empresa, ¿verdad? -digo en forma de reto, quiere jugar con fuego, pues no sabe que tiene el diablo presente-

-No, la verdad no, además le convendría una buena carga de dinero ya que por lo visto, su...empresa está deteriorando y creo que no le haría daño un socio. -dice mientras lo miro fijamente y los demás quedan impactados  por la forma en que hablamos-

-Mire señor Steward, no me agrado mucho su presentación pero, a la verdad, necesito de su dinero y acepto, necesito hablar con usted en la oficina para coordinar todo -digo levantándome de mi asiento-

-Claro, y gracias a todos por su atención -dice acompañándome a la oficina-

-ESTAS LOCO? MANIÁTICO? Como diablos se te ocurre venir a hacerte socio de MI empresa -digo cerrando la puerta e histérica-

-Ni siquiera sabia que es tu empresa -dice de lo más calmado-

- Verdad que no me había acordado que te falta un puto cerebro, ¿como piensas en ser socio de una empresa sin ni siquiera saber el nombre del propietario?

-Y tu eres mas idiota que me lo crees, claro que si sabía, solo que me cansé de andar por el mundo y decidí invertir mi dinero, en cosas productivas.

-Y PORQUE DEMONIOS TENIA QUE SER EN MI EMPRESA?

-Porque no quería y ni quiero invertir mi dinero en lugares desconocidos, es mejor a ti que te tengo más confianza.

-Es en serio Mattias? Es que vienes así de la nada, a querer ser mi socio después de todo lo que pasó -digo agarrandome la cabeza-

-Tranquila, nuestra vida personal no tiene que ver con los negocios, y sobre lo personal quiero hablar contigo en privado, en otro lugar mas adecuado.

-No me interesa Mattias, estoy bien así -digo negando-

-Por favor! Te lo pido, aunque sea permíteme -dice mirandome a los ojos-

-No se Mattias, no sé...

*holiss soy yo la autora, quiero que me disculpen por mis retrasos es que no he tenido mucho tiempo con tantos trabajos, pero hare lo posible por subir de vez en cuando*

Jugando con mi hermanastroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora